La Luz de la Sirena - Jenlisa

12

«Ya casi llegamos». Afirma Lisa. Comparto una mirada con las otras chicas que estaban al frente de las dos, moviéndose nerviosamente. Miro hacia adelante mientras cruzo los brazos y tiemblo por el aire frío.

Eran las dos de la madrugada y estábamos a solo un minuto de nuestro destino y a un minuto de encontrarnos con una Diosa real.

Sintiendo una mano en mi espalda baja, miro a mi lado y veo a Lisa mirándome con preocupación.

«¿Ansiosa?» Ella pregunta. Sonrío levemente y asiento con la cabeza.

«Mucho». Se ríe mientras frota círculos relajantes en mi espalda, haciendo que mi cuerpo se ablande.

«No te preocupes, es una de las diosas más amables que he conocido, pero de nuevo, solo la conocí una vez». Afirma con un guiño juguetón antes de mirar hacia atrás. Me río y niego con la cabeza mientras tomo otra respiración profunda mientras Lisa comienza a apagar el motor y soltar el ancla.

«Estamos aquí». Anuncia Lisa antes de guiarnos a ambas al frente del barco donde estaban Jisoo y Rosé.

«Respira profundamente, respira profundo». Se repite Rosé para sí misma mientras la idea de conocer a una Diosa finalmente se instala. Lisa se ríe antes de subirse en el borde y dejar escapar un profundo suspiro. Ella nos mira y nos envía una sonrisa tranquilizadora.

«¿Están listas, chicas?» Ella pregunta. Todas nos miramos la una a la otra antes de enfrentarnos a la chica de cabello plateado una vez más y asentir con la cabeza. Lisa asiente brevemente antes de mirar hacia el mar. Cierra los ojos y comienza a tararear suavemente.

Fue la melodía lo que me atrajo hacia ella, pero sin palabras.

Por un momento, fue como si todo se hubiera calmado de repente. Ninguna de las dos hizo ningún movimiento, pero Rosie soltó un grito ahogado en el momento en que el cabello plateado de Lisa brilló de repente. Era como si la luz de la luna brillante estuviera brillando sobre ella.

«Esposa de Poseidón, Diosa del mar...» Lisa grita con voz fuerte con la luz de su cabello cada vez más brillante.

Su voz hizo eco, haciendo que el agua vibrara debajo de nosotras. Rápidamente me acerqué a las chicas y las tomé de las manos, sintiéndome petrificada pero también muy ansiosa por ver lo que estaba a punto de ocurrir.

«¡Te pido que vengas y me respondas!» Lisa ordena. Aguantamos la respiración mientras un repentino silencio insoportable rodeaba la atmósfera.

«¿No escuchó su llamado?» Jisoo me susurra y antes de que pudiera responder, Lisa había volteado lentamente la cabeza. Todas ampliamos nuestros ojos hacia sus ojos indiferentes. Sus orbes parecían haberse ido y sus ojos eran blancos, pero brillaban como su cabello.

«Ella está aquí». Dice Lisa antes de cerrar los ojos por un segundo. La miro con asombro en el momento en que abrió los ojos de nuevo, revelando su forma normal con la luz en su cabello desapareciendo.

Ni un segundo después, una luz brilló bajo el agua y, de repente, una hermosa mujer se levantó de repente del agua.

«Anfitrite...» Exhalé. Una hermosa mujer de piel clara con largo cabello castaño ondulado, flotando como si todavía estuviera en el agua, sonreía suavemente hacia nosotros con su largo vestido blanco que parecía brillar.

«Hola Lisa». Saluda la Diosa. Lisa de repente sonrió y se inclinó. Todas abrimos los ojos y rápidamente seguimos su ejemplo.

«Por favor, chicas, no hay necesidad de eso. Lisa, lo sabe mejor». Se rió, provocando que Lisa se riera ligeramente y levantara la cabeza con un breve encogimiento de hombros.