CAPÍTULO 17 "SENTADOS EN LA MISMA MESA"

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-Buenas noches. -Dijo Kimberly.

Kevin me abrazo de la cintura y miramos a James y a Kimberly.

-Feliz cumpleaños Fallon. -Dijo Kimberly.

-Gracias. -Sonreí. -Que dichosa soy de compartir con la persona que más quiero y con otros dos inútiles. Pero no quiero tener ningún inconveniente hoy. -Dije feliz. -¿Pasamos a la mesa?.

Tomé a Kevin de la mano y fuimos al comedor. Kimberly y James tomaron asiento, después Kevin y yo. Me senté en la silla que tenía globos a los lados y donde había un letrero de felicidades.

-Por cierto. -Tomé mi copa de vino. -No se preocupen por usar bien los cubiertos. No tienen a quien impresionar.

Kevin soltó una risa y me tomó de la mano.

-Kevin. -Dijo Kimberly mirándolo fijamente. -Dime ¿Ya superaste tu etapa de gay?. -Preguntó burlona.

-Kimberly basta. Hoy no. -Dijo James mirándola.

-No dejala. -Dijo Kevin. -Y responderé a tu pregunta diciendo que no. Yo soy bisexual, fue solo una etapa de confusión, pero ya tengo claro lo que quiero. -Sonrió

-Que lindo. -Sonrió. - Lo malo es que te quedaste con la mujer de tu padre. -Dijo mirándome.

-Si. No me arrepiento. -Dijo sin mirarla.

-¿Tampoco te arrepientes de ser un traficante de droga?. -Preguntó James.

-Yo no metí esa droga, ni tampoco Fallon. -Dijo Molesto.

-Si, claro. -Dijo Kimberly.

-Yo averiguare quien fue. Tengo un as bajo la manga. -Dijo Kevin feliz.

-Si con tu dinero vas a pagar para inculpar a otros...

-Pará nada. -Interrumpió Kevin. -Solo meteré a prisión a los verdaderos culpables.

-Pero si los culpables son ustedes. -Dijo Kimberly. -Además es despacho de Luke...

-A mi padre no lo metas... -Dijo molesto.

-Ah claro, ahora debemos...

Tomé mi copa de vino y la lance al suelo.
Todos me miraron y tomé los globos y con mis manos los trone.

-Me tienen arta. -Dije molesta. -¿Quieren diversión?.

Me subí a la mesa y todos me miraron raro. Y Kimberly por quedar bien me aplaudió.

-¡Baila! ¡Baila!. -Exclamó Kimberly.

Patie todo lo de la mesa y ensucie a todos de vino, agua y sopa.

Me resbale y caí sentada en la mesa. Kevin se acercó pero lo quite. Me baje de la mesa y comencé a llorar.

-¡No puedo creer que ni en mi cumpleaños me dejen tener el poco protagonismo que merezco!. -Exclame entre lágrimas.

Kevin se acercó y intento abrazarme pero lo avente.

-¡No quiero ya nada!. -Grite.

Subí las escaleras hacía mi cuarto y me encerré con seguro.
Avente mis zapatos a la cama y me quite las joyas, las puse en mi tocador y me mire al espejo.

-Ya estoy arta de que estén peleando como perros y gatos. -Dije sollozando. -Pero es mi culpa. -Dije molesta. -Por meterlos a mi casa.

Pase mi mano por mi boca y mi labial rojo se corrió y me manche la barbilla y las mejillas.
Me desabroche el vestido y me lo quite. Me tire en el piso y seguí llorando.

-Ya no los soportó. -Dije llorando.

Abrace mis rodilla y tape mi cara.
Escuche que alguien abría la puerta con las llaves y entró.

-Que mal te vez mi amor. -Dijo James desde la puerta. -Pero te mereces sufrir por el resto de tu vida.

-¡Largate!. -Exclame.

-Okey. Pero que felicidad me da verte así.

Cerro la puerta y tomé un zapato y lo avente a esta.

-¡Idiota!. -Grite.

Me recosté en el piso y seguí llorando. Volví a escuchar a alguien entrar y me moleste.

-¡No quiero ver a nadie!. -Exclame molesta.

-No tienes elección. Lo lamento. -Dijo Kevin acercándose.

Me tomó de los brazos y me levanto. Me miró por unos segundos y me abrazo.

-Creo que te debo una disculpa. -Dijo triste.

-No te preocupes. Después de más de dos semanas viviendo con esos imbéciles, no se porque pensé que se mantendrían al margen el día de mi cumpleaños. -Dije molesta.

-Ya no te pongas así por culpa de ese par. -Dijo acariciando mi hombro.

-No sé en qué estaba pensando en sentarlos en la misma mesa que nosotros. Pero ya. -Me hice a un lado. -Lo único que quiero ahora es encontrar a los culpables de que fuéramos a la cárcel.

-Yo creo poder averiguar quien nos inculpo injustamente. -Dijo Kevin.

-¿Cómo?. -Pregunté confundida.

-Bueno. Es una larga historia, que tiene que ver con Jacob y de cuando estuve en prisión. -Explicó nervioso.

-¿Y que tiene que ver una cosa con la otra?. -Pregunté.

MI FAMILIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora