Capítulo 6: Quidditch y Navidad

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POV Jade/Hermione
Pronto daría inicio el primer partido de Quidditch, mi mente divagaba mientras pensaba en lo que iba a hacer, mis portales comenzaban a ser más decentes, lo cual agradecía, a este paso espero perfeccionarlo este mismo mes, tal vez también practicaría las demás lecciones poco a poco, mi siguiente paso, sería entrar a la dimensión espejo.

Por otro lado, no estoy segura con respecto a en qué momento será bueno intentar entablar una conversación decente con el futuro hurón, estaba segura que ahora mismo las posibilidades eran pocas, después de todo, aún es un niño, incluso el año próximo seguiría siendo muy pronto, por ahora lo podía aplazar para el tercer año.

Después del incidente del troll, Snape se mostró cojeando, Harry y Ron comentaban que ojalá le doliera mucho, aun así, la duda de cómo se lastimó la pierna los invadía, eso los devolvería eventualmente al encuentro con Fluffy. Mandé indirectamente el libro de Quidditch a través de los tiempos a Harry para que lo leyera, lo veía leyendo el libro cuando podía y parecía algo interesado.

Sabía que su entrenamiento era intensivo, por lo que al igual que Hermione en el libro, decidí ayudarlo con algunas tareas que eran laboriosas, enviándoselas de forma anónima, realmente le había quitado un peso de encima, eso si él deseaba saber quién lo ayudaba, y no dejaba de preguntarles a varios compañeros investigando la identidad de la persona.

Evidentemente, el único consiente de mis acciones era Neville, pues el pasaba mayor parte del tiempo conmigo en lo que redactaba ambas tareas y lo ayudaba con la suya, además de su practica con los hechizos básicos de encantamientos. Aunque también redactaba en ese tiempo el segundo libro de mi saga, a Neville le llamaba la atención, pero por vergüenza hasta ahora nunca ha preguntado acerca de ello.      

Poco después Snape le recogió el libro a Harry, más tarde Harry fue a recuperarlo, escuchando la interesante conversación de las tres cabezas de Fluffy, también la conversación con Ron acerca de que seguro Snape fue a la zona prohibida por Dumbledore y de la cual advirtió a inicio de curso. Solo pensando que haría un monstruo de tres cabezas en Hogwarts.

Pronto llegó el partido en un parpadeo, sabía que Harry estaría nervioso, pero no me preocupaba, lo haría bien, no tenía duda, Hagrid llegó pronto sentándose al lado de Ron, yo estaba en la parte de atrás junto a Neville, tenía que admitir que Lee Jordan le daba su toque al ser comentarista del partido de Quidditch, el vivir en primera persona las confusiones de Dean comparándolo con el futbol muggle, además de ver a los gemelos y Wood en el partido, le daban más sentido a mi emoción.

Harry era bueno, tenía ese talento necesario, y aunque casi fue derrumbado de la escoba por la falta hecha por Slytherin, era formidable que siguiera sobre ella, Hooch deseaba que también me anotara para entrar al equipo, pero me negué rotundamente, me encanta volar, pero no me gusta que me empujen o intenten descalabrarme en el acto.

Fue entonces que llegó mi señal, cuando Harry perdió el control de la escoba completamente fue mi señal para entrar a la acción, le dije a Neville que me esperara, fue entonces que Hagrid dijo que solo magia tenebrosa podría afectar a las escobas, bajé y me escondí debajo de las gradas apareciéndome debajo de los asientos de los profesores.

No pude evitar que una risa traviesa escapara de mi boca, aunque no fue escuchada por nadie, gracias a que la atención estaba fija en Harry, quien casi estaba por ser derribado de su escoba, no tardé en incendiar a Snape y hacer lo mismo con Quirrell. Volviendo a mi lugar, al instante antes de ser descubierta, no des quité el fuego, porque era entretenido ver como lo querían apagar, hasta que uno de los profesores invocó un aguamenti.

Todo pasó rápido, por lo que cuando llegué a mi posición, Harry ya estaba aproximándose al suelo, Neville me vio con sorpresa, había tenido ganas de llorar, por lo que había ido al lado de Hagrid, me vio y se tranquilizó, me llamó a su lado haciendo que los demás preguntaran a donde había ido, a lo que sonreí.

¡¿Soy Hermione Granger?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora