Judith Gil, una chica de 18 años con grandes planes para el futuro, en el que claramente, Tom Holland está. Tiene mucho dinero gracias a su querido tío Pablo, su mayor sueño es viajar a Londres y poder conocerlo. Pero unos pequeños atajos hacen que...
-Verás- comienza a hablar mientras nos acercamos a pesar mi maleta para poder llevarla...
-Elsa tenía todo planeado, que fueras en avión y llegaras a Londres y ahí yo te recogía, pero sobre las una de la mañana en Londres, pero a Elsa le "chivaron" que esto era nuevo para ti, así que me obligó a recogerte aquí también para que tuvieras más seguridad- ... espera, nos toca- dice sin dejarme responder y señalándome al hombre que nos espera.
-An, aquí está, no llega ni a los 8kg que es lo que pedí por si acaso- digo rezando por que mi báscula no esté estropeada.
-4kg, bien- dice colocando mi mochila en la cinta la miro con pena, me daba cosa que estuviese sola durante el viaje, lo siento soy muy sentimental a veces...
Nos retiramos y dejamos que el siguiente que espera, pase su maleta, durante dos horas no hacemos nada interesante, esperamos al avión durante un largo tiempo y mientras sacabamos el billete de avión, que por suerte había.
Al rato, nos avisan que nuestro vuelo iba a salir, Homer y yo nos dábamos prisa para no perder el vuelo, al entrar quería llorar, nunca había montado y sabía, que iba a tener miedo pero merecería la pena, nos sentamos en nuestros respectivos asientos, gracias a dios me ha tocado al lado de la ventana, Homer está a cinco asientos más adelante de diferencia.
Esperamos al despegue, ese momento es el perfecto para pensar hasta que...
-HOSTIAS NO ME JODAS QUE SE ME OLVIDÓ DECIRLES A MIS AMIGAS QUE ME IBA- digo... grito en mi cabeza, rapidamente cogo mi móvil, aprovechando que seguimos en tierra, miro la hora... son las nueve.
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La verdad esperaba que se pusieran peor, supongo que ellas ya lo sabían por mi tío y era una sorpresa... no sé.
Como ya vamos a despegar, apago el móvil por seguridad. A mi lado me doy cuenta que hay una chica, está con su móvil, soy un poco... curiosa, llamémoslo así, así que miro que habla con alguien que tiene agregada como ¡Mamá! que nombre más seco, supongo que es su madre, soy estúpida, pues claro que lo es. Ya me paso de curiosa y veo que la chica le ha escrito, mamá tendré cuidado, te quiero!! y dos corazones. La chica levanta la vista y mira a su bolso, parece que busca algo, se rinde y lo cierra, gira su cabeza y me mira a mí, algo que me sorprende, no me lo esperaba, me averguenzo por que me ha pillado observándola, o eso creo.
-Hola- dice con una sonrisa grande y preciosa.
-Hola- digo saludando con la mano. Ella es muy guapa, tiene el pelo teñido de rosa, su piel es blanca pero no mucho, de labios finos y no muy grandes, sus ojos son verdes y grandes, parece tener la piel suave, lo que hace que me den ganas de tocarla... para comprobarla.
-En... sí, lo que pasa es que es mi primer vuelo- dice quitándose las manchas de rímel de la cara.
-También es el mío- digo con una sonrisa consoladora.
-¿No te aterra?- dice casi llorando.
-La verdad es que sí, pero no hay que preocuparse, tienen mucho control en el avión- digo pensando si abrazarla, pero sería muy raro...
-Sí, eso lo sé, no me da miedo volar... me da miedo volar sola.-
-Pero... no estás sola- digo cogiéndole la mano. Ella me mira sorprendida, después mira nuestras manos unidas y se le escapa una lágrima.
-No te preocupes, ¿vale? todo saldrá bien- digo soltándole la mano y cogiéndo un pañuelo, le seco la lágrima, ella me mira mientras sonríe.
-Soy Leo-
-Yo soy Judith- digo quitando el pañuelo de su cara. Empezamos a despegar y nos asustamos, nos damos las manos para calmarnos y al rato, ya estamos en el aire, soltamos nuestras manos y respiramos, ambas nos miramos y reímos, durante el vuelo, seguíamos nerviosas pero a medida que hablábamos se nos iba pasando, me contaba prácticamente toda su vida, al parecer tiene diecinueve años, vive en Madrid con sus padres y sus tres hermanos, ella es la única chica, le dieron una beca para estudiar en Londres y sin pensárselo dos veces, aceptó, se llama Wimbledon College of Arts, sabe hablar inglés con fluidez porque su tía vivió allí durante un tiempo y le enseñó. Yo le conté todo, incluso lo de Tom, la entrevista y se emocionó, le gusta marvel y lo conoce pero no se considera muy fan, solo lo ve por marvel, algo que me parece genial... le hablé sobre mis amigas y sobre Zaniel, encendí el móvil y le enseñé fotos de todos.
Hablamos sobre experiencias vergonzosas y muchas más cosas, no podíamos dejar de reír, incluso una mujer con unos niños nos miró y nos mandó a callar o se aseguraría de tirarnos del avión, por su amenaza Leo y yo nos reímos pero bajo, esa mujer parecía de dinero y sería capaz de pagar a alguien para hacer el trabajo sucio. Nos entró el sueño y poco a poco nos quedamos dormidas una apoyada en hombro de la otra, yo estaba apoyada. Me levantaba de vez en cuando por las turbulencias y veía por un hueco a Homer dormir como un tronco.
-Judi, ya hemos aterrizado, no sé como no te has enterado- dice una voz, cuando me levanto, veo a Homer en el pasillo del avión. Me levanto muy dormida y miro a los lados buscándola, pero no está en el asiento de al lado. -¿Leo?- digo levantándome, hecho un vistazo al resto de asientos pero ya no hay nadie.
-¿Dónde está todo el mundo?- digo nerviosa, ¿y si es otro de mis sueños?
-Ya se han bajado, llevo llamándote un rato- dice cogiendo sus cosas.
-Lo siento- digo saliendo.
Cuando bajamos, veo a mucha gente moviéndose de un lado para otro, nos vamos en busca de mi maleta, pero yo busco algo más importante.
Mientras andamos le pregunto a Homer -Oye, ¿no has visto a ninguna chica de pelo rosa junto a mí?-
-Sí, hablabas con ella, no sé dónde está ahora- dice poniendo su mano en el hombro como consuelo.
-Jo, me había caído muy bien- a lo lejos veo un pelo rosa y sin dudarlo corro hacia allí dejando a Homer detrás, él me grita preocupado.
Está frente a mí pero cuando la llamo, se da la vuelta una mujer, pero no es ella, mi decepción es tan grande que se me escapa una pequeña lágrima, habíamos caído tan bien... y ya no la volveré a ver...
-Judith, ¿qué haces? nos esperan fuera- dice con mi maleta ya en la mano.
-Lo siento, bueno vamos- digo con un hilo de voz.
Al salir me encuentro a Elsa, ella me sonríe y me abraza -Me alegro que estés sana y salva, los aviones son muy peligrosos- dice cogiéndo su móvil, la están llamando.
-¿Sí? an, hola Steve, sí, está aquí, ¿con quién? voy, toma Judith, alguien quiere hablar contigo- dice tendiéndome su móvil.
-¿Sí?-
-Hola Judi, soy Nieves, ¿has llegado bien?-
-Sí, la verdad el viaje me ha encantado-
-Genial, me quería asegurar, bueno te dejo que te tienes que acomodar-
-Vale, adiós Nieves- digo sonriendo, Elsa recupera su móvil y me lleva hacia un taxi.
-El hotel se llama Ibis, toma el dinero y ve hacia allí, acomódate, prepárate y mañana te llamaremos- dice dándome no sé cuántos dólares, le hago caso y me monto en el taxi cogiendo mi maleta y me despido de Homer y Elsa, le doy el dinero al taxista y se pone en marcha, a los pocos minutos, salgo del taxi y me encuentro frente al hotel, caigo la en cuenta después de tanto tiempo...
-¡ESTOY EN LONDRES- grito corriendo hacia el gran hotel...
