Judith Gil, una chica de 18 años con grandes planes para el futuro, en el que claramente, Tom Holland está. Tiene mucho dinero gracias a su querido tío Pablo, su mayor sueño es viajar a Londres y poder conocerlo. Pero unos pequeños atajos hacen que...
Mi primo llegó hace dos horas y ya está como en su casa, se a puesto el pijama, hecho su cama (aunque como duerme en el cuarto de invitados solo tenía que quitar las sábanas) también hemos cenado...pizza, ya que la última vez que cocinamos algo juntos casi se nos quema la casa... es una larga historia.
-¡Gabriel, tráeme helado de la nevera, el de tarta de queso!- digo gritándole desde el salón, él está en la cocina, y ya que ha venido, me aprovecho...
-Cógelo- dice lanzándome la tarrina entera a las manos,
Cuando la abro y como un poco con la cuchara, me llega el frío al cerebro, por lo que decido esperar a que se derrita un poco. Mientras espero, cojo el móvil y me meto en instagram.
-¿Vas a mirar si ha subido algo?- dice mi primo leyéndome la mente.
-Sí, pero dudo mucho que...- paro de hablar al ver una cosa que no me esperaba.
-¡HA SUBIDO UNA HISTORIA, HA SUBIDO UNA HISTORIA!- digo saltando y gritando.
-Es solo una historia Judi, ¿porqué te pones así?- dice mi primo cogiéndome el móvil.
-¡Él está en Londres!, ¡¿no te das cuenta de que si tengo el suficiente dinero puedo irme ahora y encontrármelo!?- digo quitándole mi móvil de las manos.
-Nena tu sueñas, Londres es enorme, ¿sabes? además, ¿que tiene que ver que suba una foto?-
-¡Significa que puedo saber dónde está!- digo de los nervios.
-Ay madre la que tengo que aguantar...ahora envidio al amigo de mi madre...- dice mirando al techo.
-Cállate imbécil- digo dándole una floja colleja.
-Bueno venga, mira ya la historia, ¿no?- dice irónico.
-Que ya voy...- digo dándole a su perfil y metiéndome en la historia.
-¿Cuál es?- me pregunta mi primo.
-Es esta- digo mostrándole mi móvil.
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-Parece que Tom sigue en Londres en su casa- digo con una cara de enamorada estúpida.
-Pues sí, si te vas justo ahora...- dice mi primo.
-¡Vamos a ver cuanto dinero tengo!-
MI primo y yo vamos a mi cuarto y busco todo el dinero que tengo y lo ponemos en la mesa del comedor, tengo bastante la verdad.
-Te recuerdo que aunque tengas el dinero suficiente no te lo vas a encontrar-
-¿que no? se cuál es su zona, y la casa por fuera, aunque sea muy grande...dame tiempo, mientras tu cuentas el dinero, yo voy a buscar la casa- digo encendiendo mi ordenador.
Parecía del FBI... pero me daba igual, solo quería conocerle, o dejarle una carta, no lo sé. Nos llevamos cuatro horas buscando y contando el dinero, bueno, mi primo terminó antes, pero se quedó dormido.
-¡Gabri despierta!- digo echándole agua.
-¡Mierda!- dice saltando del sofá.
-¿Cuánto dinero tengo?- digo rezando porque sea suficiente.
-No sé como, pero has ahorrado, y tenías de antes, en total, mil euros y un céntimo.
-Es broma- digo paralizada.
-Es completamente cierto- dice sonriéndome.
Empiezo a llorar de alegría, me tiro sobre él y le hago cosquillas. Después de un rato y una guerra, me pongo de pie, y le propongo venir conmigo a Londres, yo se lo pagaría todo, pero él sus caprichos, menos mal que aceptó, tengo dinero suficiente y mejor ir cuanto antes, nos dormimos, ya mañana hablaremos.
