Cap. 2

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Paso una hora para que la Sultana Mihrimah y las esclavas llegarán al palacio. La Sultana se dirigió a la entrada del palacio para ahí esperar a las esclavas.

-niñas, bajen todas rápido- dijo Yusuf bajando a las esclavas del carruaje -todas formadas sin hacer escándalo, caminen a donde la Sultana- dijo caminando para que lo siguieran -son todas Sultana-

-Bien, llama a la señorita Daye y lleven las a que las revise la doctora- dijo y se retiro de ahí

-Vamos muchachas caminen hacia adentro- dijo Yusuf metiendolas al área de los baños -esperen aquí, iré por la señorita Daye y la doctora- dijo y salió corriendo de una forma graciosa en busca de Daye

-Creo que no estoy preparada para esto Alessia, quiero salir corriendo- dijo Izabela a su amiga un tanto nerviosa -ya lo había aceptado pero ahora me da miedo-

-Ya estamos aquí Izabela, no hay marcha atrás- respondió tratando de calmarla -además creo que no nos irá mal- rio mientras la miraba

-Porque tanto escándalo niñas- llegó Yusuf acompañado de dos señoras -ella es la señorita Daye y estará al pendiente de que cumplan con su obligación en sus deberes- dijo mientras señalaba a la señora más alta -ella es la doctora  que las revisara, tomen esas toallas, desnúdense y cubranse con la toalla para que las revisen, esperare afuera señorita Daye-

Todas hicieron lo que les pidieron, y como buena suerte de Izabela, fue la primera en ser revisada.

-¿Como te llamas?-  pregunto la señorita Daye a Izabela tomándola del brazo para que hablara

-Me llamo Izabela- dijo con la cabeza baja -Izabela Vianello- sin desapartar la mirada del suelo

-Bien señorita Izabela- la jalo a donde la doctora

-No, ¿que me quieren hacer?!, estoy bien!- se estaba resistiendo ante la revisión pero no sirvió de mucho, Daye al ser más alta, termino por arrastrarla hasta donde la doctora

-Aquí no mandan ustedes, y pobre de la que vuelva a hacer espectáculos como estos, no perdonaré a nadie!- les grito a las otras esclavas que solo se limitaban a escuchar con la mirada baja -Y usted señorita Izabela que sea la última vez que hace esto o la enviaré al calabozo-

Izabela no tuvo de otra más que dejarse revisar, las revisiones constaban de que se aseguraban que fueran puras y no tuvieran alguna enfermedad que pusiera en riesgo a la Sultana.

Después de 3 horas la doctora acabo de revisar a todas las esclavas, dando por terminado su trabajo se dirigió a la señorita Daye.

-Ya acabe mi labor- dijo a Daye la cual solo hizo una seña de que esperara afuera

-Ya están preparados los baños, ahora se van a bañar sin hacer escándalo- miró desafiante a todas en especial a Izabela -estare afuera, si escucho algo entraré y les rompere los huesos- dijo y se retiro a hablar con la doctora

-te dije Izabela que no fueras a hacer eso- Alessia la miró un tanto molesta

-Ya, perdón pero me llegaron recuerdos y es difícil-

Todas empezaron a bañarse tal y como les habían ordenado, todas dejaban caer el agua tibia sobre sus cuerpos delicados, y pasaban las esponjas por todo su cuerpo.

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-¿Todas están bien doctora?- pregunto Daye ya estando afuera de los baños

-Si, todas están bien, e incluso la señorita rebelde del principio está aún más saludable- refiriéndose a Izabela

-Bien, eso es todo- saco una bolsita con monedas de oro y se las dio a la doctora por su trabajo

Daye volvió a entrar a los baños para sacar a las criadas y llevarlas a donde dormirían

-Bien, vamos todas afuera- todas empezaron a salir de los baños -las llevare a donde dormiran ahí hay camisones para que duerman

Las llevo a dicho lugar y ya ahí todas empezaron a cambiarse  para dormir.

-Mañana se levantarán temprano, empezarán a educarlas para que tomen sus puestos lo más rápido posible- terminó de decir y se retiro en busca de Yusuf y la Sultana

-Ves, esto no es tan malo- hablo Alessia -hasta mañana Izabela-

-Hasta mañana Alessia- dijo y se sentó en su cama para asimilar todo.

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-Sultana- Daye entró a los aposentos de la Sultana Mihrimah haciendo una reverencia -Las esclavas ya fueron revisadas, todas están sanas, la doctora recalcó en especial a Izabela- miró a la sultana

-¿Izabela? No la conozco- soltó una risa

-Si, y a decir verdad su belleza destaca entre todas las esclavas que llegaron- de igual manera soltó una risa

-Mañana quiero conocerla... Por cierto Daye, llegaron dos esclavas de regalo, una de ellas tendrá la suerte de ser educada por ti y por mi, y será la que  ayudará a nuestro plan, tenemos que deshacernos de Hurichian si queremos ganarle a Selim, tenemos pocos meses, ellos no tardarán en irse a sus provincias.

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Hasta aquí mi reporte Joaquín ;)

𝑹𝒆𝒚𝒉𝒂𝒏 𝑺𝒖𝒍𝒕𝒂𝒏 (EN EDICIÓN.) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora