La historia de Izabela, una chica de 15 años veneciana que llego como esclava al palacio de la Sultana Mihrimah, la cual la educaria para que formará parte del harem de uno de los principes.
"Solo tienes que convertirte en su favorita, y darle un pr...
-Alteza- Reyhan se enderezó en la cama mirando a Bayezid el cual se ponía su vestimenta
-Reyhan ¿Dormiste bien?- la miró sonriendo
-De maravilla- coloco la sabana cubriendo su cuerpo. Se levantó de la cama y fue hasta el -¿Y usted?-
-También de maravilla- Bayezid rió leve
-Las criadas han traído tu ropa, ve a vestirte para desayunar- Bayezid dijo a la mujer
Reyhan tomó su ropa y se fue atrás de un biombo. Rápidamente comenzó a vestirse. Quito la sabana de su cuerpo y se coloco el vestido
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-Alteza, el desayuno está esperando afuera- uno de los guardias habló
-Que entren- Bayezid dijo desde adentro. En sólo segundos las criadas entraron con las bandejas de comida y bebida -Déjenlo sobre la mesa y salgan- ordeno
Reyhan después de eso, salió del biombo y regresó con Bayezid. Las criadas después de poner los alimentos en su lugar salieron del lugar.
-Escuche de tus planes en la provincia- Bayezid tomó a Reyhan del brazo guiandola hasta su lugar en la mesa, ambos tomaron asiento, uno en frente del otro -Son buenos planes realmente, dime ¿Qué piensas poner?- la miró mientras servía agua en las copas
-En su ausencia la gente reclamaba algunas cosas, eh comprendido que faltan algunas cosas a esta provincia- dijo después de dar un trago a la copa -Por ahora pienso en una escuela para los niños y niñas, un comedor para todo aquel que quiera ir y tal vez un estanque y pozos para que la gente pueda ir a recoger agua y no sufran por la escasez-
-Piensas en todo- Bayezid rió
-Es lo que la gente necesita- dijo segura -Además, piense, al Sultan le agradaría la idea de que su hijo tenga contentos a la provincia-
-Pondré algunos terrenos y los pondré a tu nombre para que hagas lo que te plazca- Bayezid sonrio
Ambos desayunaron entre risas y platicas sobre el imperio.
Después de un par de horas, Reyhan estaba de regreso en sus aposentos para estar con sus hijos.
-¡Madre!- la pequeña Gevherhan corrió hasta ella
-Mi Gevherhan ¿Como estas?- Reyhan se agachó a abrazarla
-Bien mamá- la niña sonrió
-¿Donde esta Murad?-
-Mehmed vino a jugar, ambos fueron a los jardines a jugar- Gevherhan respondió
-¿Ellos solos?- Reyhan se paro de golpe, la niña negó
