Control «The gifted»

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DOS AÑOS ATRÁS EN UNA UNIDAD DE REUBICACIÓN MUTANTE, GEORGIA.

Marcos y Jade lideraban el pequeño grupo de rescate hacia la segunda cerca y cortar los alambres, tal como estaba planeado. Mientras que John y Augusto estaban en la primera cerca, Marcos estaba por cortar los alambres, pero Jade lo detiene.

—¿Qué sucede?

Elsa mira detenidamente la unidad. —No veo na...—una bala en su cabeza la detiene alertando al grupo. Jade abre los ojos y trata de acercarse al cuerpo de su amiga, pero Marcos simplemente la detiene y la apresura a levantarla para empezar a correr.

Las alarmas se encienden y Jade gime de dolor cuando una bala atraviesa su pierna.

—¡Agáchense, nos encontraron, agáchense! —avisa Marcos soltando un gruñido posicionando a la rubia al frente suyo para cubrirla. John se tensa cuando ve la sangre en la pierna de Jade, por lo que se apresura abrir los alambres y cuando la tiene a su lado corta un poco de tela de su camisa. —Randall y Elsa están muertos.

—¿Qué ocurrió? —cuestiona enrollando la tela en la herida de Jade, quien solo gruñe al sentir el ardor aumentar.

—Tenían armas automáticas y rastreadores. Con ese armamento no podremos salir de aquí.

—Si me acerco puedo anular su sistema y ganar tiempo.

—No—se apresura Jade en negar, haciendo que Augusto la mirara con desaprobación. —¿Qué hay de ti?

—Estaré bien, iré detrás de ustedes—responde para todos el rubio, pero su mirada se conecta con la de Jade, quien se encontraba nerviosa por la vida del rubio. —Solo váyanse.

Jade traga en seco y antes de irse, agarra la mano del rubio. —Nos veremos allá—murmura bajo sin importarle las miradas de todos puestos en ellos, la sonrisa ladina del rubio la tranquiliza un poco. Marcos, Sage, Jade y John se levantan para empezar alejarse de la unidad e ir hacia la camioneta, pero un disparo cerca de ellos los hace voltear. —No, ¡Gus!

—¡Gus! —grita también John, pero la rubia no se negaba a la posibilidad de perderlo a él también, por lo que trata de ir hacia el cuerpo del rubio siendo detenida por Marcos y Sage. Las lágrimas y el dolor empiezan albergar a Jade, quien no logró sostenerse más. No podía escuchar ni ver más nada, solo el cuerpo de Augusto. —¡No!

Jade, suelta un suspiro viendo el amanecer, John la mantuvo al tanto del plan para sacar a Lorna de Servicios Centinela, y ese plan solo pudo darle recuerdos que quería simplemente olvidar. Unos brazos en su cintura la hacen despistar y cuando alza la mirada se encuentra con los morados de Clarice.

—Hola—dice Jade un poco incomoda, aún no se adaptaba a los nuevos sentimientos de la peli morada. Clarice le agradaba, y es que Jade se había mantenido callada para no dañarla y mucho menos ahora que había logrado controlar un poco más sus poderes.

—¿Estás bien?

—Sí, solo... solo pienso en sacar a Lorna de esa maldita prisión, es mi amiga y, bueno, eso me tiene algo frustrada. —se desahoga a medias, y es que claro, no iba a decirle que también estaba estresada por sus "nuevos sentimientos."

—John sabrá qué hacer.

—Claro que sí, siempre tengo un plan. —ambas se giran ante la voz del nombrado, haciendo que Clarice bajara sus manos de la cintura de la rubia, el tono y la mirada de John la colocaban incómoda y no entendía muy bien el por qué. Jade suspira desviando la mirada de su novio y pasa un mechón de cabello atrás de su oreja. —Jade, ¿puedo hablar contigo?