El Hada Negra De La Laguna

Marcos no es de esos

Bajo las escaleras con un chándal puesto y encuentro a mis amigos empezando a limpiar las pintadas que hicieron ayer por nosotros, no habrá expulsiones pero este es nuestro castigo.

- Veo que llego justo a tiempo. - Digo cogiendo un trapo y líquido para limpiar los cristales.

- ¿Llegarás? - Me pregunta Iván burlándose de mi estatura y yo le sonrío. - Al ver que de verdad parece que todo ha vuelto a ser como era antes.

Empiezo a limpiar los cristales de la puerta y se acerca Marcos.

- Paula se ha peleado con Evelyn esta mañana. - Me dice preocupado. - No presta atención en clase, y la profesora tiene que castigarle. Dice que se aburre en clase porque lo que le dice Amelia ella ya lo sabe. ¿Crees que tiene que ver con lo de mis padres?

- Puede que Paula diga la verdad. - Le digo sin dejar de hacer mi trabajo. - La mayoría, por no decir todos los estudiantes con un IQ más alto que la media de su edad, suspenden los exámenes.

- ¿No tendría que ser al revés? - Me pregunta sorprendido por mis palabras.

- Para hacerlo fácil de entender, ¿Qué te gusta más: hacer algo que puedes hacer todos los días o algo que requiere algo en especial? Puede que Paula se aburra de las explicaciones que le dan en clase y sea por eso que no presta atención. - Le digo y vuelvo a hablar al ver que sigue igual de confundido que antes. - Parece que no me estoy explicando bien. Paula no se esfuerza en aprender a sumar porque ya sabe hacerlo, tú ponle una división delante, ya verás que lo hará mejor que algo tan sencillo como una suma.

- ¿Estás diciendo que mi hermana solo presta atención a lo que quiere? - Me pregunta intentando entender mi punto de vista. - Pero que tiene eso que ver con que se esté portando mal.

- No sé. También te digo que puede que me haya pegado una columpiada increíble. Yo hablo desde la experiencia.  - Le digo pensando en lo que he dicho anteriormente. - ¿Sabes qué? Olvida lo que te he dicho.

- Lo que tenemos que hacer es descubrir que le pasó a Irene Espí. - Dice Carol poniéndose en el centro de la entrada del internado.

- Pero Carol, corazón, ¿cómo vamos a descubrir lo que le pasó a Irene Espí si no sabemos ni quién es?  - Pregunta Iván abrazando a Carolina y dándole un beso en la mejilla.

- Irene Espí, Samuel Espí. - Dice Victoria ordenando lo que sabemos por el momento. - Está clarísimo que eran hermanos, y si él era huérfano, ella también.

- Y los dos vivían aquí. - Dice Carolina orgullosa.

- ¿Te has dado cuenta tú solita de eso Carol? - Le digo ya que su comentario es obvio. - Podríamos mirar en la biblioteca, puede que todavía exista algún papel, algún documento o unos archivos del antiguo orfanato.

Cuando voy a ponerme a limpiar de nuevo se abre la puerta dejando ver a un hombre con unas maletas en la mano vestido como los botones de los hoteles. Detrás de ella entra una chica alta y morena de la edad de Marcos, más o menos.

El señor del traje deja las maletas en las escaleras y la chica hace ademán de cogerlas pero le detiene Roque, quien se acerca a ella.

- Si quieres te ayudo con las maletas. - Le dice él sonriendo amablemente.

La chica no dice nada y se va.

- Ya me cae mal. - Comentó cuando ella ya está lejos de nosotros. - ¿Quién se cree que es?

- ¿Os parece bien si vosotros os quedáis aquí y nosotros empezamos a buscar cosas en la biblioteca? - Dice Victoria cambiando de tema y mirándonos a Marcos y a mí. - Así mientras vosotros limpiáis aquí, Roque y yo limpiamos allí y Carol e Iván buscan información.