Gran poder peliverde

Cap 18

Abrí mis ojos lentamente, había dormido bastante incómodo, momentos después de que Aizawa-sensei se había retirado llegaron mis compañeros, y Koda, que es a quien le confié mi pájaro me lo trajo.

Me había informado que ahora me debería encargar de él, luego de eso el silencio gobernó la habitación pues nadie iniciaba una conversación, claro no duró mucho hasta que todos empezaron a hacer babosadas para intentar hacerme reír, habían hecho apuestas y todo, al final milagrosamente ganó Mineta, quien sabe como pero me había sacado una pequeña carcajada.

Al final se tuvieron que retirar porque se había agotado el tiempo de visita, después de un rato me quedé dormido solo acompañado del ruido de los autos de afuera, y el constante pitido de la máquina de pulso.

Uno diría que es aburrido estar ahí, pero en mi caso es diferente por obvias razones, me traía calma el saber que estaba en una camilla sin miedo, solo con la meta de recuperarme para volver a la escuela cuando las clases empiecen otra vez.

Sabía que algo pasaría en el campamento, pero pensé que sería algo mejor, solo alcanzamos a estar tres días, algo decepcionante, a este paso no avanzaremos mucho, mi tranquilidad fue interrumpida por fuerte ruido a lo lejos, como si hubieran roto una pared, me alarme pues aquí estamos en un hospital, hay personas que requieren atención.

Ya estoy siendo paranoico, los hospitales son de los lugares con mayor seguridad en cuestión de agencias, se tendría que tener un elaborado plan, y tampoco es un hospital tan reconocido como para tener a alguien importante, pero claro.... yo y mi bocota teníamos que hablar.

La puerta de mi habitación fue abierta, y entró alguien que hizo el sonido calmado y constante de la máquina que señalaba el ritmo de mi corazón aumenta abruptamente, ignorando todas mis incomodidades me senté rápido en la camilla.

-Mira no hay tiempo de cuestionar, el señor Rasker ya está aquí y viene a por ti, así que apúrate que nos vamos, confía en mí un momento ¿si?- habló detrás de la máscara, aquella que se parecía al pico de un ave.

Se acercó a mí para quitarme todos los cables que me conectaban a la variedad de máquinas, yo la verdad no sabia que hacer, si bien el me había ayudado, y la extraña sensación de que debía estar con él seguía en mi, fue el causante de acontecimientos terribles a lo largo de mi vida,

Sin embargo soy completamente incapaz de usar mi quirk, mi cuerpo duele con solo moverlo y la voz de mi boca no sale, así que que por más que quería negarme no podía, cuando termino me agarro de las piernas y la espalda, solo por el mar de decisiones en mi cabeza olvide completamente el nombre que había mencionado.

Se le notaba lo apurado que estaba y se notó aún más por la manera brusca en la que me levanto para salir rápido de la habitación, el repentino movimiento ocasionó que me mareara y mi vista diera vueltas, esto para Overhoul en realidad fue a su suerte puesto que los pasillos del hospital parecía de película de terror.

Cuando salió de la habitación se dirigió a las escaleras de emergencia, por los pasillos no había nadie, por lo menos no consiente, personas con capuchas de color negro estaban en el suelo a lo largo del pasillo, estos eran traidores de los Yakuza que se unieron a aquel hombre tan repugnante con la escusa de que el tenia más posibilidades de lograr su cometido.

A algunos les faltaban extremidades, pero curiosamente la sangre no salía .....

Minutos antes...._______________

Apenas me enteré del ataque de mi antiguo empleado a los estudiantes de la clase 1 "A" y "B", mi reacción no fue la mejor, estaba bastante ocupado con mis asuntos, pero no podía descuidarlo, así que después de una investigación más detallada supe de su próximo movimiento al ver que había fallado.