Diario de DIO

~6~

La muerte de Dario no me afectó en lo más mínimo, pues cometí un acto noble al terminar con su vida.

Escupí sobre su tumba por el coraje, pero no hice más por respeto.

Respeté lo más que pude a mis padres, a pesar de haber sido inútiles y disfuncionales. Hasta el final de sus días ellos vivieron en la miseria, ¿tenía derecho en juzgar su estilo de vida? No, pues no conocían nada más que el robo o la limosna. El pueblo donde vivía se basaba en eso, ¿por qué ellos iban a ser distintos?

Mi padre fue al cielo, eso es seguro, pues a pesar de haber llevado a mi madre a la muerte, le dio la oportunidad de librarse de la desdicha. Mi madre quizá fue al cielo por la forma tan buena que vivió, pero de ella no lo tengo seguro, porque se dejó pisotear por todos, ¿ser mártir es sinónimo de merecer el cielo? Para mí es ridículo, ¿pero podría ser posible? Quizá, pues ella recitaba oraciones a diario sobre temas estúpidos como "poner la otra mejilla" cuando alguien te lastimaba... No puedo aceptar eso. Iré al cielo sin dejar que otros se posicionen encima de mí.

Yo, DIO, ¿tengo seguro el cielo? Cometí el acto de matar a mi padre, pero fue por su bien y por mi bien... Él sufría, agonizaba, eventualmente moriría, yo ayudé a apresurar su final, ¿eso me convierte en un pecador? No, porque fue un acto bondadoso.

Recuerdo que mi madre me dijo que no antepusiera el odio y el rencor en mis actos, y no lo hice.
Es posible que llegue al cielo, hice un acto de generosidad con mi padre, le otorgué más pronto el derecho de conocer el cielo, ¿debería condenarme por eso?

Me estoy obsesionando demasiado. Creo que lo dejaré por ahora, no estoy dispuesto a seguir.