35

299 9 3
                                    

Narra Alba

Cuando aida pasa adelante mio me agarra mucho miedo. No por ella sino por lo que puede hacer Paula. Ella no es una chica violenta ni nada, pero cuando se le mete algo en la cabeza es capaz de todo.

Asique mi novia se enfrenta a ella, enseguida Paula le contesta y aida le dice que se valla que yo soy su novia. En eso veo como paula se rie irónicamente y levanta su mano como si le fuera a pegar y efectivamente es asi pero yo me pongo entre medio de las dos. Porque no dejaria a nadie que le haga daño a aida.

Me enojo mucho, que empiezo a gritar mas de lo comun y Paula al parecer se dio cuenta y finalmente se fue de la casa.


Yo me doy vuelta y me voy hacia la cocina, porque aunque no fue tanto la cachetada que me pego, un poquito de sangre me sale cerca de la boca. Voy hacia el lavamanos, me lavo la cara y siento como aida me agarra la mano, llevándome hasta una silla para curarme.
Estamos las dos en silencio, ninguna de las dos habla. Ella se acerca y me empieza a curar. Tenerla tan cerca hace que mi cuerpo le agarre una electricidad por dentro, que solo me lo produce ella. No estoy enojada con ella, es que con solo mirarla y pensar que le podian haber pegado a ella, me mata de dolor. Ya van dos veces que pasa esto y no quiero que ella sufra por esto.

Asique me levanto, la tomo de la mano interrumpiendola antes de que me diga algo mas, voy hacia el living, tomo una mochila y salimos de la casa.
Si la estoy llevando a uno de los lugares que mas tranquilidad me da y quiero que lo conozca conmigo. Es un puente, en la playa, donde cuando te sentas, tocas el Agua. Cerca hay un pequeño resto con vistas al mar.

Asique me siento dejando que mis piernas cuelguen y dejando un espacio para que mi novia se siente delante mio, haciendo que yo la pueda abrazar y apoyar mi cabeza en su hombro.
Estamos asi por un buen rato, hasta que me urge hablar con ella, porque de seguro que su cabecita debe estar pensando mil cosas.

- Alba: amor ¿te puedes girar? - ella se gira y se sienta en chinito, mientras yo dejo mis piernas colgando.
- Aida: ¿Que pasa? - siento como su mirada es fria.
- Alba: perdón - y se le escapan un par de lagrimas.
 - Aida: ey bebe ¿porque lloras? - me dice abriendo sus piernas para ponerlas arriba de las mias y acercandose mas a mi, para abrazarme.
- Alba: se que esto ya paso. Lo de Paula. Esta situación fue parecida cuando estabamos en Barcelona. Se que debes pensar si puede llegar a pasar, pero mis dos unicas ex son ellas. Aida perdon, no quiero que esto se vuelva a repetir. Tengo mio a que te hagan daño o peor, que yo te este haciendo daño. - ella solo me abraza cada vez mas fuerte.
- Aida: a ver si me escuchas - separándose. - Alba te amo entendes. Estas cosas pueden pasar. Yo estoy bien, osea sigo con bastante rabia y con ganas de matarla - y me hace reir. - pero se que vos jamas en la vida vas hacer algo para lastimarme o para que me lastimen y hoy creo que lo dejaste mas que comprobado. Asique por favor no pienses nada malo, porque este amor que esta creciendo entre nosotras, es puro, es bueno y lo quiero tener toda mi vida.
- Alba: ¿de verdad ? ¿No estas enojada conmigo ? - mirandola a los ojos
- Aida: ¿enojada contigo? No amor. Si todo fue culpa de la arpía esa. Ademas ya conozco a las arpías que te tienen ganas. Asique no van a poder conmigo. - y le sonrio.
- Alba: Te amo mucho. - acercándome para besarla.
- Aida: y yo a ti. - y me besa.

Nos separamos y a las dos justo nos hace ruido la panza, asique vamos hacia ese pequeño resto, nos pedimos una pequeña paella, comemos y nos vamos otra vez hacia la casa porque tenemos que cambiarnos para el casamiento.
Como de costumbre, nos bañamos juntas, mientras que jugamos un poco entre las dos, salimos y nos empezamos a cambiar.
Cuando me giro, la veo a Aida con un vestido, largo, hermoso. Literalmente me quedo embobada mirandola hasta que ella se da cuenta.

- Aida: que miras tanto che. - riendose.
- Alba: lo hermosa que eres, demasiado.
Me acerco dandole un beso, nos terminamos de vestir y salimos a la iglesia.

Narra Aida

Estoy sentada frente al mar con mi novia que me rodea y siento que algo malo va a pasar.
Al menos habremos estamo 10 minutos asi, hasta que ella me dice si puedo girar para quedar en frente de ella.

Me pide perdón y veo como unas lagrimas recorren su cara. No dudo y le abrazo fuertemente. Empezamos a hablar de todo lo que ha sucedido con paula y con su otra ex, hasta que se tranquiliza y por fin me besa.
Nos separamos porque nuestros estómagos hacen ruido, nos reímos y nos vamos a comer sl pequeño resto.

Cuando terminamos de comer, salimos para volver a la casa de alba para bañarnos y cambiarnos para ir al casamiento.
Como siempre nos bañamos juntas, salimos y nos empezamos a cambiar. Yo me traje un vestido largo, porque a la noche baja un poco la temperatura, entonces es mejor. Estoy en eso, cuando veo como mi novia no me saca el ojo de encima, diciendome que estoy hermosa y me besa.
Nos vamos a la iglesia y la verdad fue todo muy hermoso, hata ganas de casarme me dieron. Ahora con Alba estamos volviendo a su casa despues de la fiesta que hicieron los novias y algo tomadas vamos.

Llegamos tipo 7 de la mañana y sabemos que nuestro tren para volver sale a las 6 de la tarde, por eso antes de irnos al casamiento dejamos todo ordenado.
Subimos hacia la habitación, ella entra primero, yo cierro la puerta. Antes de que siga el camino, tomo su mano trayendola hacia mi y nos empezamos a besar desesperadamente terminando haciendo el amor. Quedamos las dos despatarradas en la cama y asi nos dormimos.
Nos despertamos porque alguien esta llamando a la puerta, apenas abro mis ojos y veo a mi novia abrazada a mi.

- Aida: amor, despierta - moviendola.
- Alba: un ratito mas.
- Aida: bebe que estan tocando la puerta y estamos desnudas. - y ahi reacciona, levantandose y poniendose una remera. Abre la puerta y es Laura.
- Alba: ¿que pasa Laura?
- Laura: despabilen que en 3 horas se van y mama quiere despedirlas. Estamos abajo todos, hasta maria, asique vistanse porque por tu cara parece que ustedes tuvieron noche de bodas. - mi novia se rie igual que yo, cierra la puerta y nos empezamos a cambiar.

Tu Mi Destino Donde viven las historias. Descúbrelo ahora