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- ¿Estais listos? - chilla Sam desde la entrada.
- ¡Si! ¡Salgo ya! - grito desde mi habitación echandome las ultimas gotas de colonia.

Los dos hermanos me esperan en la entrada para ir hacia el restaurante en el que hemos quedado con los chicos.
Van muy guapos los dos, pero no puedo evitar mirar al rubio que curiosamente tambien me esta mirando a mi de arriba abajo. Va vestido con unos pantalones de pinza negro y una camisa blanca abierta ligeramente por el pecho, lo que le hace estar más atractivo de lo que es de costumbre.

Sin embargo, yo me he decantado por un sutil vestido negro, pegado por la parte del pecho y suelto por las caderas, combinado con una chaqueta color beige.

Aparto la intimidante mirada de Hugo y agarro del brazo a Sam para salir de la casa.
El camino hacia nuestro destino lo hacemos a pie, no esta muy lejos y a penas tardamos unos diez minutos en llegar.

Una mesa alargada con siete sillas, las cuales cuatro ya estan ocupadas. Como siempre, llegando la última.

Flavio es quien lidera la mesa, a su lado Samantha, que coje a su hermano de la mano para sentarlo a su lado. No queda otro sitio que en una esquina al lado de Hugo y en frente de Bruno.

- Bueno Hugo, por fin te conocemos, hemos oido hablar mucho de ti - rompe el hielo Bruno.

- Espero que bien - rie - encantado de conoceros.

Le miro incredula, ¿hugo siendo amable a primeras? Nota mi mirada y me mira sonriendo. Nos adentramos todos en una pacífica charla mientras esperamos la comida, ya pedida.

Tengo que admitir que me esta sorprendiendo mucho Hugo. Nunca lo había visto en este ambito, rodeado de amigos. No puedo evitar de vez en cuando fijarme en cada una de sus expresiones faciales, la que mas me fascina es cuando se rie, lo he visto muchas veces sonreir, pero reirse a carcajadas, no recuerdo haberlo visto muchas veces, a lo mejor con su hermana alguna vez aunque nunca me he parado a visualizarlo. Sus ojos se achinan y unos hoyuelos decoran sus mejillas cuando lo hace.

En una de estas veces que le observo, maldigo por dentro siendo pillada por su mirada, que me sonríe y deposita su mano sobre mi pierna desnuda acariciandola de arriba abajo. Trago saliba intentando recomponerme ante tal gesto pero no se la aparto y el parece que tampoco quiere apartarla.

Pierdo la cuenta de los minutos que lleva la mano de Hugo posada sobre mi muslo. No entiendo el por que de mi nerviosismo.

- ¿Eva? - bruno rie pasando la mano por mi cara.

- ¿Eh? ¿Que pasa? - pregunto volviendo a la conversación.

- No se, estas ida. ¿Te encuentras bien? - me pregunta mientras los demas, excepto Hugo, hablan sin cerciorarse sobre nuestra conversación.

- Sí, si. Solo, que voy a ir al baño - digo levantandome, haciendo que la mano de Hugo se levante ligeramente. Suspiro y voy hacia el baño a paso rapido.

- ¿Que coño te pasa Eva? - me digo en voz alta mirandome al espejo. Resoplo y me echo agua por la cara, intentando que los nervios que me ha producido el cordobes se esfumen.

Me odio, me odio por tener que estar en un baño escondida, por culpa del cordobes. ¿¡Porque tiene que estar tan bueno?! Nose, ya que me cae mal podría ser feo, o que, por lo menos, no me ponga tanto. Vuelvo a suspirar, pero esta vez interrumpida por unos golpes en la puerta que hacen que me sobresalte ahogando un grito.

- ¡Ocupado! - chillo desde dentro.

Los golpes no cesan y mosqueada salgo a la puerta.

- ¿Acaso no ha oido que..? - me callo al ver a la persona que se encuentra tras la puerta - ¿Que haces aqui? ¿No ves que es el baño de chicas? - digo señalando a la puerta donde lo pone perfectamente.

- Lo se. No pretendia entrar, a menos que me lo propongas - me dice Hugo chulesco alzando una ceja.

- Imbecil. ¿Para que has venido? - me cruzo de brazos apoyandome en la pared.

- Tardabas demasiado, pense que te habia tragado el vater o algo. - dice ironico y yo rio.

- Ya. Claro. - pongo los ojos en blanco - bueno pues ya has visto que estoy en perfecto estado, asi que si me permites - digo intentando salir del poco espacio que hay entre nosotros.

Le aparto empujandole pero nada mas avanzar unos pasos, me coge del brazo haciendo que me gire y quede pegada a su cuerpo a unos centimetros.

- Te has puesto nerviosa - afirma.

- No - admito segura sin despegar la mirada de sus ojos.

- No era una pregunta, lo he notado - esto utimo me lo susurra en el oído haciendo que me estremezca. El y su puta mania de decirme cosas al oído. - ¿Ves? Otra vez.

- Pues lo notas mal Huguito - me consigo recomponer, separandome un poco de su cuerpo.

Le doy unos golpecitos flojos en el pecho negando con la cabeza y girandome para salir de ahí, antes de irme, me vuelvo a girar para pillarle mirando zona peligrosa.

- Cuidado donde miras - le digo sonriendo.

Me sonrie negando con la cabeza y mordiendose el labio. Ahora sí, me giro para salir de ahí cuanto antes. Esto esta empezando a ser algo divertido y a la vez peligroso que, sinceramente, no se como puede acabar.

Hola!!
Para lo que me leais por aquí. Esta novela tambien la estoy subiendo en instagram, por si me quereis seguir por allí, que subo antes los capítulos que aquí. Un besiño.
Instagram: @/evugxfanfic
🤍

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