Jimin
Es el día.
23/02.
¿Cuantos años hubiéramos cumplido juntos si estuvieras aquí? ¿Ocho? ¿Aún hubiéramos estado juntos para este momento?.
Me hubiera gustado ser tan valiente y responder con un simple ¿Que más da? y continuar mi vida sin temor a los fantasmas del pasado. Pero en lugar de eso opté por la opción del cobarde; beber como si la cura a mis males estuviera en el fondo de la botella de vodka que yace en mi mano.
Creí que esta era la medicina capaz de curar todos los males, un veneno que asesina las cosas malas que habían dentro de mí e incluso capaz de limpiar el alma.
Al menos era lo que Yoongi y yo solíamos decir en esas noches de bebidas de dudosa procedencia en lugares de mierda.
Pero ya no era un adolescente que decidía beber porque creía que eso lo hacía verse genial ante los demás, ni tampoco cargaba con los insignificantes problemas de esas edad.
Ya soy un adulto, uno muy cobarde, pero adulto al final.
Lo que supo ser uno de los días más felices ahora era una completa tortura, cada beso se transformó en lágrima, las caricias se volvieron cicatrices, los recuerdos en pesadillas, las promesas de amor ahora era una voz que susurraba palabras de odio, rencor y dolor en mi oído pertubando mis momentos de paz.
No es cualquier voz, es su voz.
Cerrando los ojos lentamente puedo rebobinar los recuerdos de ese día.
***********
—¡NO JIMIN, SUÉLTAME!.
—¡CÁLLATE ESTÚPIDA PERRA CÁLLATE!
—POR FAVOR POR FAVOR
***********
Sus lágrimas cayendo sin cesar una tras otra por su hermoso rostro, su dulce voz quebrada suplicando una piedad que nunca llegó, su cuerpo forzejeando inútilmente por soltarse de mi agarre. Lo veo con claridad, y me veo a mí mismo transformado en ese monstruo lleno de rabia mirando con ojos llenos de odio a quien una vez llamé el amor de mi vida.
—El amor de mi vida— repito con una sonrisa sin una pizca de gracia, apretando con fuerza el puente de mi nariz —¿Que hice...?— murmuro por lo bajo como si alguien fuera a oírme en la soledad de mi habitación, tirando de mis cabellos con desesperación.
Mis ojos comienzan a cerrarse lentamente de nuevo, más recuerdos vienen a mi memoria.
***********
—Te amo, Park Jimin.
—¿Aún con mis defectos y errores?.
—Con todo el paquete completo.
***********
Sonrisas cómplices y un corto pero muy cálido beso sellaban lo que parecía un pacto de amor de entre ambos. Recostado en el verde césped de su patio trasero mientras ella descansaba en completa armonía sobre mi pecho, interrumpiendo esa comodidad solo para mirarme a los ojos y pronunciar aquellas palabras que llenaron mi corazón y mi alma de nuevos sentimientos encontrados.
ESTÁS LEYENDO
Obsession | Park Jimin |
Teen FictionZoe Barton; una adolescente con una vida que se fue poco a poco por la borda luego de un trágico suceso intenta olvidar mediante fiestas y alchol lo problemático que se volvió su hogar y por lo tanto, su vida. Park Jimin; un profesor que aparenta se...