XVIIII

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Zoe

Mi mañana arrancó de una manera tranquila para mí sorpresa, desperté una hora antes para poder ducharme a gusto y dejar que el agua caliente corriendo por mi cuerpo relaje todos mis músculos haciéndome sentir sumamente relajada, necesitaba de ese relax que la sencillez puede otorgar.

Al salir con una toalla al rededor de mi torso oí a mi mamá reír en la soledad de su desayuno viendo un programa de chimentos que la mantenían al tanto de todo un poco. Me había olvidado por completo que su risa era algo contagiosa además de ser música para mis oídos, me siento del carajo al caer en cuenta que no recuerdo con exactitud cuando fue la última vez que reímos juntas de manera espontánea, con la sencillez de una charla de madre e hija de esas que se dan así porque sí.

Sentí deseos de bajar y preguntar a qué se debían sus carcajadas y de paso sumarme a ella, sólo por el placer de estar ahí sin la tensa sensación de que todo se volverá una fuerte discusión con tan solo una palabra como ya es habitual. Pero no, decidí qué no quería interrumpir esos cinco minutos de alegría que finalmente consiguió después de mucho tiempo.

¿En qué momento las cosas se volvieron esta completa mierda? En la que ni siquiera puedo bajar las escaleras hasta el living donde se encuentra mi mamá bebiendo su café a preguntar qué es lo que está viendo en la televisión por miedo a qué sin darme cuenta, se vuelve una rueda de preguntas y comentarios maliciosos hacia mi padre y finalmente toda esa paz se va por donde vino. Porque no, el no estaba, seguramente se fue temprano a su oficina, pero el sólo mencionar el tema haría lo antes mencionado.

Así que sólo caminé, masticando bronca, hasta mi habitación en donde se encontraba mi uniforme sobre la cama. Sorpresivamente mi teléfono sonó haciéndome pegar un mini salto por el susto ya que mi mente se encontraba en otro lugar. Al revisar de quién provenía el mensajes me llevo una sorpresa al ver que se trataba de Abby.

La rubia y yo no habíamos hablado durante todo el día de ayer, luego de que me fuera de su casa ninguna le dirigió la palabra a la otra, sólo silencios incómodos los cuales Sunny quería romper sin éxito alguno. Ella estaba molesta conmigo, y yo no sabía cómo hacerla entender que su furia era injustificada en cierto modo.

Así que sólo decidimos ignorarnos por el resto del día, y de mi parte planear una discusión en mi cabeza con todo lo que eso conlleva la cual nunca ocurrió.


Abby💛 [3 mensajes nuevos]

Necesito hablar contigo

A solas

Te veré en el salón de clases antes de que la clase de historia comience


Quedé descolocada por un momento y mi mente se puso en blanco totalmente, se ve que olvidé por completo que hoy volvería a ver a Jimin después de lo la otra noche. Y se siente extraño.

No sé bien cómo sentirme al respecto, no pongo en duda su voto de silencio ya que al final eso implica problemas para el también, y si de mí boca no salió una palabra ni siquiera para Sunny y Abby mucho menos para otros terceros. El secreto está perfectamente guardado, bajo unas cien llaves diría yo. Pero no es que como que sea de piedra, el estómago me da vueltas, las piernas me tiemblan y no sé qué sentiré al momento de verlo entrar por la puerta.

Sé que tomará su rol de profesor, vestido de manera elegante y con sus modales que lo hacen ver como alguien intachable, pero yo tengo otras imágenes de el.

Obsession | Park Jimin |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora