Dual Cultivation Or Date

Capitulo 14

Liu Qingge no duerme tanto, su cultivo es lo suficientemente alto como para que no tenga que hacerlo, y prefiere merodear viendo lo que sale por la noche. Pero esta vez, después de 19 horas de extrañas bestias demoníacas saliendo del bosque, está inconsciente casi antes de que su cabeza golpee el colchón.

Ha sido un día extraño; la energía en el aire cuando el amanecer no iluminó el cielo era pesada y demoníaca, pronto comenzaron a llegar mensajes a la secta Cang Qiong sin detenerse, pidiendo ayuda a diestra y siniestra. Una masa desenfrenada de energía maligna aquí, unos cuantos cadáveres de muertos vivientes pudriéndose en las aldeas alla, incontables monstruos demoníacos que amenazan a la población bajo las densas nubes en todas partes.

Las amenazas que se extendieron lo suficiente como para que Liu Qingge tuviera que usar gran parte de su energía espiritual volando a través de los picos para enfrentarlos, ocuparon todo el día, sin apenas un descanso para limpiar la sangre de Cheng Luan.

Y solo se volvieron más mortíferos a medida que caía la noche.

Liu Qingge, con la espada en mano y sangre cantando en sus venas, había estado allí para enfrentarlos a todos, luchando hasta que incluso las muñecas del duro cultivador se cansaran y sus pies normalmente infalibles tropezaran con las personas que protegía.

En un ataque de estupidez sentimental había recibido un golpe o dos de vez en cuando destinado a sus discípulos, derribando las garras y los dientes de las bestias que los atacaban.

Y justo después de la salida de la luna, la energía en el aire se había convertido en una masa oscura y retorcida, los demonios ya fuertes se volvían locos y salvajes.

Mientras levantaba su espada sus ojos destellaban, un repentino golpe de energía demoníaca cruda y ardientemente fuerte hizo que todos los monstruos y bestias medio sensibles se congelaran en su lugar repentinamente. En el momento siguiente se dispersaron, soltando a sus presas vulnerables como si incluso la tentación de la carne humana no pudiera mantenerlos cerca.

Liu Qingge sabe que no fue la luz de la luna lo que los asustó; él tiene su propia hipótesis sobre lo que hizo que huyeran.

Pero en este punto, no puede molestarse en dar más detalles, incluso para sí mismo. Su mejilla presiona contra la almohada, los moretones en sus brazos y hombros le duelen contra el colchón. Sin pensar más, sin siquiera una advertencia, se siente de repente caer en el sueño.

Pero la extrañeza del día que acaba de experimentar es superada por el lugar en el que se encuentra tan pronto como cierra los ojos.

¿Dónde estoy?

Estaba en uno de los picos, mirando a su alrededor, se siente como si le resultara familiar.

¿Pico Qing Jing?

Es el pico Qing Jing, pero algunas cosas son extrañas. La luz está apagada; el bambú parece más grueso; el viento se mueve a través de él más líquido de lo que debería.

Liu Qingge cambia de posición y el suelo bajo sus pies cambia con él.

Cuando mira hacia abajo, está parado en un camino que antes no estaba allí.

Se pone la mano en la cadera, listo para sacar a Cheng Luan, pero le falta la espada.

El cabello se le eriza en la nuca. El viento rueda suave y pesado, a través de su piel.

Lentamente deja caer su mano, los dedos se contraen.

Bien.

No hay nada que hacer; tendrá que seguir adelante con lo que tiene.