Dual Cultivation Or Date

Capitulo 1

Liu QingGe salta de su espada fuera de la casa de bambú, el viento de su llegada aplanando la hierba mientras sus túnicas ondean detrás de él. Avanza hacia adelante mientras envaina su espada, pero antes de llegar a la puerta, ese demonio ladrón de cuerpos sale.

Los ojos de Liu QingGe se estrecharon.

Los ojos de Luo BingHe se estrecharon.

—¿Dónde está él?— dice Liu QingGe.

El viento cruje a través del bambú.

—Shizun está descansando en casa— dice Luo BingHe, con un brillo engreído en sus ojos. Implicando que la casa de Shen Qingqiu no es y no siempre será el pico Qing Jing.

—No eres bienvenido en este pico— dice Liu QingGe, plantando sus pies.

Luo BingHe se ríe de él.

—¿Es este su pico ahora, Señor del pico Bai Zhan ? ¿Shizun ya no está en posición de enviar a su discípulo a hacer sus mandados aquí? Shizun no ha sido informado de su cambio de estatus—. Luo BingHe, a pesar de la diferencia de dos centímetros en su altura de alguna manera logra mirar hacia abajo a Liu QingGe.

Este hombre es tan irritante. Liu QingGe se empeña decididamente en no recordar la última vez que Luo BingHe lo miró desde arriba. Ese momento, cuando...

Decide sacudir el pensamiento de la cabeza.

—Largo— ladra, desenvainando su espadas dos pulgadas.

Luo BingHe lo está observando, su cara de repente se retuerce en una sonrisa.

—Ambos sabemos que no puedes obligarme— dice.

Liu QingGe siente que su aliento se acelera con rabia y da un paso adelante, con su espada volando hacia fuera, cuando la mirada de Luo BingHe, fijada en él, se congela repentinamente.

—¿Qué es eso? —dice Luo BingHe bruscamente.

Está mirando el cuello de Liu QingGe, donde una bufanda de tela fina es apenas visible, escondida contra su piel bajo el cuello de sus túnicas.

Es la bufanda que Shen QingQiu le dio después de... la última vez que se vieron, para ocultar algunas de las peores marcas que le quedaron en el cuello mientras se curaban. Las marcas habían durado unos días, incluso con el cultivo de Liu QingGe acelerando su curación, ya que el demonio frente a él aparentemente no sabía lo que era la moderación.

Liu QingGe no se deja amenazar, recordando el dolor persistente en el cuello, la espalda, el pecho y... en otros lugares los días siguientes a ese encuentro.

Definitivamente no lo ha estado recordando desde entonces.

Como había usado la bufanda para esos pocos días de su curación, se había acostumbrado. Y después de que los moretones y las marcas de mordida se habían ido, él sólo... seguía usándolo.

—Quítate eso —dijo Luo BingHe enojado.

—No— responde Liu QingGe.

—Eso es de Shizun— dice Luo BingHe. —¡Usted debe devolverlo!

—Lo devolveré cuando lo pida— dice Liu QingGe con firmeza.

No tiene intención de dejar que este discípulo no filial se la quite.

Luo BingHe lo observa con una mirada que promete la muerte, pero mira hacia atrás en la casa de bambú, como si se recordara a sí mismo dónde están y sacude la cabeza. Cuando su mirada vuelve a Liu QingGe, sus ojos se ven calculadores.