Capítulo 9

5.6K 413 45
                                    


Camila's Pov

Di un respingo en la cocina cuando unos brazos me rodearon y alguien me estampó un sonoro beso en la mejilla.

-¡Hola, hola, Camila! -Dijo Vero sin separarse de mí. Estaba pletórica, y yo me alegré de que pareciera tan feliz.

-Hola -musité, más como una muerta que como una chica viva. No podía dejar de pensar en lo que había estado a punto de pasar entre Lauren y yo hacía pocos minutos.

-Uy, que ánimos los que tienes -ella se separó de mí y se apoyó en la encimera, a mi lado.

-Es que me duele la cabeza.

-¿No te encuentras bien?

-¡Hola familia! -el grito de Keana me hizo cerrar los ojos, ya que me retumbó en todos los rincones de la cabeza, e incluso hizo rebotar mi cerebro. Me di la vuelta lentamente, justo cuando la esposa de mi mejor amiga me rodeó con sus brazos y me apretó entre ellos. - ¿Qué tal estás? -me preguntó cuando me soltó. Aquello parecía más un circo que una casa en paz.

-No se encuentra demasiado bien -le contestó Vero por mí, cosa que agradecí.

-Eso es la resaca -levanté la mirada lentamente para ver a Lauren en la puerta de la cocina, llevando a Scott en brazos. Estuve segura de que cuando mis amigas se fueran, la mataría. ¿No podíamos olvidar el maldito tema de mi borrachera? Por lo visto, no.

-¿Resaca? -preguntó Keana con diversión, observándome detenidamente.

-Da igual. Voy a preparar la comida -murmure, sin ningún tipo de ganas de hablar de aquel tema.

-Sí, te ayudaré. Y ustedes dos, vayan a molestar a otro lado -les ordenó Vero tanto a su hermana como a su esposa, que nos observaron con una sonrisa en los labios. -Pero no corrompan a mi hijo, que él no tiene la culpa de que ustedes sean un par de cretinas -alzó la voz cuando se marcharon de la cocina, dejándonos solas. Respiré hondo cuando se hizo el silencio, aunque no duró mucho. - ¿Qué te pasa, Mila? -volvió a preguntar, observándome preocupada mientras me veía sacar comida del refrigerador.

-Nada, ya te he dicho que me duele la cabeza.

-¿Por la resaca?

Dejé las cosas en la encimera de malas maneras, para enfatizar así mi desagrado.

-Sí, es por la maldita resaca -me resigné finalmente a contestar.

-Pero... ¿resaca de qué? ¿Es que acaso te emborrachaste?

Me mantuve en silencio, cortando zanahorias, tomates y diversos tipos de hortalizas para preparar una ensalada. Vero aceptó mi mutismo, y ella comenzó a preparar pasta, algo no demasiado pesado. Se podía decir que mi estómago estaba algo revuelto. Entre el malestar de la noche anterior que aún me duraba, y el casi beso con Lauren, me había quedado agotada. Lo mío comenzaba a ser preocupante.

-Escucha, a mí puedes contármelo.

-¿Qué quieres que te cuente? ¿Que salí con tu hermana? ¿Que me emborraché? ¿Que tuvo que traerme en brazos porque ni siquiera me mantenía en pie? ¿O que hoy me encuentro fatal por culpa de la resaca? -estallé.

-No creo que tengas que ponerte así, Camila, todos nos hemos emborrachado alguna vez y hemos hecho estupideces. Pero... ¿saliste con mi hermana? -preguntó, sorprendida.

Bueno, ya estábamos con el tema. Ahora sí que no iba a dejarme en paz.

-Sí, pero no como tú crees. Se suponía que íbamos a tomar una copa y ya está, pero la cosa se me fue de las manos y bebí más de la cuenta. Se acabó -finalicé mi relato cruzándome de brazos. La mirada intensa de mi mejor amiga me incomodó, por lo que tuve que salir de la cocina para tener espacio. Me sentía ahogada en aquel lugar tan reducido. Mi cocina era bastante pequeña, en realidad.

Burning Heart (Adaptación Camren G!P) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora