Burning Heart (Adaptación Camren G!P)

Capítulo 28

Camila's Pov

No me di cuenta cuando Austin entró en el departamento y cerró la puerta lentamente, casi sin hacer ruido. Le dirigí una rápida mirada, y después otra a Lauren, sintiéndome tensa y enojada.

-Bueno, pueden hablar. ¿Se puede saber qué está pasando?

-No tengo todo el día. ¿Podemos acabar rápido con esto? –preguntó Austin, ignorándome por completo.

-Primero, deja que Camila se vaya –indicó Lauren, observando a mi vecino atentamente, como si en realidad deseara volver a golpearlo. Y yo continuaba sin entender nada.

Él se rió entre dientes, pero comprendí que en realidad no encontraba divertidas las palabras de Lauren. Y yo tampoco.

-Ni lo sueñes. De aquí no se irá nadie hasta que me des lo que me debes.

-¿Qué es lo que le debes? –pregunté, intentando dar un paso hacia ella, pero Austin se colocó delante de mí para impedírmelo.

-No es de tu incumbencia, y ahora, quédate quieta.

-Bueno, ¡se acabó! –Grité, harta de tanto secreto –Cuéntenme de una maldita vez lo que está pasando –sin que me lo esperara, Austin rodeó mi cuello con uno de sus brazos y me pegó a su cuerpo con fuerza. Entonces, sentí algo punzante clavándose en mi garganta, y abrí mucho los ojos.

-Ya sabes lo que tienes que hacer, Lauren –se me secó la boca al escucharlo. No pude evitar pensar que quizá se les pasara por la cabeza hacerme daño.

-Suéltala, ella no tiene nada que ver en esto –le pidió ella, intentando mantener la calma, pero sabía que estaba al límite, pues sus manos no dejaban de temblar a sus costados, como si se estuviera conteniendo.

-Mira, me estoy hartando de todo esto. Dame la maldita caja de una vez si no quieres que le corte el cuello.

Aquellas palabras hicieron que me mareara y que se me revolviera el estómago. ¿Austin buscaba una caja? ¿En mi casa? Entonces…

-¿Fuiste tú el que intentó robarme? –pregunté con la voz temblorosa, sintiendo cómo se me llenaban los ojos de lágrimas. Noté el extremo de la navaja clavándose aún más en mi cuello, y me tensé al instante.

-Lauren –advirtió él, y pude ver cómo ella me miraba fijamente, con preocupación.

-Está en el desván, pero no pienso dejarte solo con Camila –le dijo, claramente molesta, intentando por todos los medios mantener la calma. Suponía que era consciente de que mi vida en aquellos momentos pendía de un hilo.

Entonces me di cuenta de que ya sabía por qué Lauren se encontraba antes en el desván y parecía tan nerviosa. Empezaba a comprender su extraña actitud.

-Pues tendremos que hacerle una visita al desván, porque no voy a volver a fiarme de ti, amiga –él casi escupió la última palabra, y comencé a temblar de nuevo. Me sentía enferma y aterrada, sin estar segura de cómo acabaría todo esto. Si él quería, Austin podría matarme en cualquier momento, y a pesar de que estaba asustada, también me sentía traicionada por Lauren.

Ella asintió en silencio y comenzó a caminar lentamente, girando la cabeza de vez en cuando para asegurarse de que Austin iba detrás de ella y de que no hacía ningún movimiento extraño contra mí. Yo me encontraba en medio de ambos, pues él me tenía fuertemente agarrada del cuello, sin dejar de amenazarme con la navaja. En cuanto llegamos al desván, observé a Lauren buscando entre sus cajas, como antes, y sacó de ellas una caja pequeña de cartón que parecía bastante maltrecha.