Mi Destino Eres Tú |J.P.|

No Siento Nada

Joel.

Estaba en shock por el beso de Camila, no me lo esperaba, aunque estábamos a punto de hacerlo hace un momento esto fue una verdadera sopresa.

Debo decir que Camila era una chica muy bonita y me agradaba más de lo normal.

Pero no podía sentir algo por ella, eso no sería correcto ella es la nieta de mi jefe y no sería correcto que un don nadie como yo estuviera con ella.

Además me da miedo pensar que ella no me está tomando en serio y sólo quiere divertirse, no debería juzgar pero la mayoría de la gente rica hace esa clase de cosas.

Esperé un poco más y Camila y su abuela ya estaban de regreso, llevaban flores y unos estambres.

-Vámonos a la casa-Ordenó la señora Consuelo-

-Si señora-Dije y encendí la camioneta para ir a la hacienda-

Unos minutos después de manejar, llegamos a la hacienda, bajé rápidamente y abrí la puerta de atrás para ayudarlas a bajar.

-Gracias-Dijo Camila y yo me límite a sonreír a medias-

Ella y su abuela entraron a la hacienda y yo me quedé ahí esperando que más se podría ofrecer o si podía ayudar en alguna otra cosa.

Vi a Erick pasando por aquí así que no dude en hablarle.

-¡Erick!-Llamé su atención y al ver que lo estaba llamando, vino hacia mí-

-Hey que pasa-Dijo una vez que había llegado frente a mí-

-Tengo que decirte algo que pasó hoy con Camila-Dije un poco nervioso mientras Erick me miraba sin entender nada-Me dió un beso-

Erick abrió sus ojos sorprendido y comenzó a reír.

-¿En dónde?-Dijo burlón-

-Pues en los labios, tonto-Respondí-

-¡Que animada!-Exclamó-Pero...¿Tú le gustas a ella? O ¿Porqué se besaron?-Frunció el ceño-

-Bueno...su abuela fue a platicar con una de sus amigas, Camila y yo nos quedamos solos en la camioneta y comenzamos a hablar...-Dije rápidamente-Y casi nos besábamos pero su abuela apareció y ya no se hizo, luego ambas se bajaron en el mercado pero Camila me sorprendió al regresar y me plantó un beso-Me encogí de hombros-

-Si tú le gustas a ella-Habló-Imaginate, ya jamás vas a tener necesidad de trabajar, te sacaste la lotería literalmente, hermano-Sonrió-

-No, no Erick no estás entendiendo nada-Dije frustrado-Ella y yo no podemos tener algo más, no quiero que piense que estoy con ella por interés, ni que tú o los demás piensen eso.... además ella es la nieta de los señores y yo soy sólo un simple empleado-

-Eso no impide que se puedan enamorar-Sonrió-

-No, pero no es correcto, su familia jamás permitiría algo así-

-Pero...antes de que te adelantes más...primero lo importante-Me miró serio-¿Te gusta Camila?-Preguntó-

Me quedé callado unos segundos, no sabía cómo responder a eso, apenas hace dos días que llegó y la conocí.

-Erick...ella es más joven que yo-Dije tratando de esquivar su pregunta pero no funcionó-

-No te pregunté su edad...¿Te gusta o no?-

-Es que no sé cómo responder eso...no la conozco del todo y aunque es muy bonita y me cae muy bien no sabría decirte si si o no...-Me encogí de hombros-

-A mí se me hace que sí, pero no lo vas a admitir ahora-Rió-Piensa bien lo que vas a hacer o decir, aclara tus ideas y no te preocupes que todo va a estar bien-Me dió unas palmadas en la espalda-Nos vemos luego-

-Si, hasta luego-Dije y después Erick se fue hacia los sembradíos-

En el fondo me siento atraído por ella de alguna manera pero me niego a admitirlo, esto no estaba para nada bien.

(...)

Las horas del día de hoy habían pasado y yo ayude a mi mamá a limpiar la hacienda ya que por el momento nadie necesitaba a un chófer.

Limpiaba la sala principal y me percaté de todas las fotos que estaban ahí, pero una en especial había llamado mi atención, era de una boda.

Al ver la foto entendí que se trataba de los padres de Camila, parecían muy felices.

Camila era el vivo retrato de su madre, estaba admirando detenidamente la foto, así que la tomé entre mis manos.

Me sorprende que teniendo una hija que es idéntica a su esposa, su papá la sea tan duro con ella.

-Esa es la única fotografía que tengo de mi mamá-Escuché a Camila decir detrás de mí-

Dejé la foto en su lugar rápidamente y la miré apenado.

-Perdón, no sabía que...-Me interrumpió-

-No, no te preocupes-Sonrió-Es la única porque mi papá se deshizo de las demás, de hecho tengo que esconder esa el día que venga porque si no me la quitará como las otras-Sonrió a medias-

-Lamento escuchar eso-Dije sincero-Aunque si quieres ver a tu mamá sólo mírate en un espejo, eres idéntica a ella-

-Gracias-Sonrió-¿Ya vas a terminar?-Preguntó-

-Si ,¿porqué?-

-Cuando termines ve a la piscina ahí te espero, ¿De acuerdo?-Dijo y yo asentí nervioso-Okey-

Después de eso se fue hacia la cocina y supongo que después al jardín en donde estaba la piscina.

Terminé de limpiar la sala y fui a dejar los utensilios de limpieza en su lugar.

Estaba nervioso por ir con Camila pero debíamos aclarar lo que pasó hoy.

Con mucho cuidado de que nadie me viera, salí al jardín y ahí estaba Camila, sentada en una orilla de la piscina.

Tragué saliva y caminé hacia ella para sentarme a su lado.

-Hey ya estás aquí-Sonrió-

-Si...amm...creo que tenemos que hablar de algo-Dije-

-Oh...si..dime-Dijo normal-

-¿Porqué me besaste?-Pregunté-

Ella se quedó callada unos segundos pensando en qué decir, hasta que finalmente habló.

-Yo... pensé que era algo que tú también querías...-Frunció el ceño-

-Escucha...no-Solté un suspiro-No quería, me tomaste por sorpresa-

-Pero si tan sólo unos segundos antes estábamos a punto de hacerlo-Habló en un tono molesto-

-Lo sé perfectamente pero no está bien ¿si?, No está para nada bien que tengamos otro tipo de relación que no sea la de tú ordenas yo obedezco-Dije mordiendo mi la labio nervioso-

-¿Qué me estás queriendo decir?-Se puso de pie así que yo hice lo mismo-

-Escúchame ni siquiera está bien que yo te hablé de tú-

-Joel qué estás diciendo-Dijo extrañada-¡A quién le importa eso!-Exclamó-

-¡A mí, a mí me importa!-Dije del mismo modo-Entre tú y yo no debe haber algo más-

-O sea que tú no...-Ya sabía lo que diría así que completé su oración-

-No, no siento nada por ti-Mentí y lo había dicho de una forma muy fría-

-Entiendo...-Se veía desanimada-Ya tengo que irme-

Y antes de que pudiera decirle algo más, dió media vuelta y se fue, dejándome solo ahí.

No tuve tacto en decirle las cosas, pero esto era para el bien de nosotros, era mejor estar así a que entre los dos pudieran crecer más los sentimientos y se convirtiera en un problema...