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EMMA

<<<<TIEMPO ATRÁS.

Se dice que nada sucede por azar.

Siempre existe una razón por la que conoces a alguien, O tú necesitas que cambien tu vida, o ellos necesitan que cambies la de ellos.

Y puedo decir que Paul y Farella desde que se conocieron ha sido un viaje de cambios y emociones, tanto ella como Paul han cambiado para mejor. Paul paso de ser un chico sin preocupaciones a ser todo un hombre de negocios, con un bebé en camino y a tan solo un cuarto de hora, casado.

— Estoy tan nervioso — se sitúa Paul a mi lado, vestido en un perfecto esmoquin negro.

<< Esto es una locura, ya todos los invitados han llegado. A tan solo unos minutos todo esto será real — nerviosos se pasa la mano por el cabello — mie*rda como siga así llegare a el altar todo despeinado.

— Relajate — se voltea con su típica cara de es enserio, no puedo evitar dejar escapar una risa — Vale, lo siento.

— Que bueno que te divirtas — resopla viendo su reloj.

— Creó ya debo marcharme — paso las manos por el vestido pomposo color rosa — Parezco un pastel andante — por fin sonríe — Después de esto no cabe duda que te quiero, ni en un millón de años usaría esto por decisión propia.

<< En fin, tranquilo que todo saldrá bien. Se merecen todo esto. Ella te ama y tu la amas, es más que seguro que serán muy felices.

— Lo sé Emma, espero todo sea perfecto para Farella.

La familia de ella desde que se fugo con Paul, le a dado la espalda es como si fuese muerto para ellos, y aunque ella dice que es lo mejor, se que en el fondo quisiera que su familia compartiera este momento tan importante y feliz con ella.

— Y así será — mi móvil comienza a vibrar.

<< Es la organizadora — le digo cuando veo quien es, suspiro dándole un abrazo — llego el momento.

Me marcho para llegar a el salón que da a unos de los jardines donde se encuentra todo listo para la boda.

— ¡Ya estamos listos, la dama de honor a llegado. Todos a su posición! — grita la organizadora cuando me ve llegar, me acerco a Farella que se encuentra de pie sosteniendo el ramo de flores.

— Te ves tan hermosa — su vestido es precioso. Blanco, corte sirena con bordados y encajes con detalles rosa claro.

— Gracias — dice sin dejar de mirarse fijamente en el espejo que se encuentra a su costado — No puedo creer que me vaya a casar y que sea con el hombre al que amo — sigue hablando sin dejar de ver el espejo.

<< Por muchos años me dijeron que me casaría a los 20 años con alguien al cual no amaba, le quería pero no le amaba. De el solo tenía una amistad y solo por que nuestros padres casi nos obligaban.

Una punzada directo al corazon al imaginar a Farella casada con Michelle.

<< Pero eso no pasó — dice riendo y dejando escapar una lágrima — Me casare con el hombre que yo escogí, al hombre que amo. Y estoy tan feliz por eso, que no me importa que mis padres o mi hermano no me acompañen porque no lo aprueban, porque yo lo escogí. — remalca con nostalgia la ultima palabra, la verdad debe ser triste el que alguien dictamine que debes hacer y con quien debes pasar el resto de tu vida.

<< No puedo ser más feliz, Emma — Por fin se voltea y su mirada refleja tanta felicidad — Yo lo amo tanto.

— Y él a ti — me acerco, pasando los dedos por su mejilla para quitar las pocas lágrimas que se le escaparon — Así que vamos a arreglar este maquillaje y demos inició a la boda, antes de que a Paul le de algo por los nervios.

SIN RETORNODonde viven las historias. Descúbrelo ahora