Capítulo 14.

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El celo de Sana ya había acabado hace unos días, habían pasado seis días exactamente desde aquel incidente con el sirviente del castillo y este ya se había disculpado con ambas princesas

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El celo de Sana ya había acabado hace unos días, habían pasado seis días exactamente desde aquel incidente con el sirviente del castillo y este ya se había disculpado con ambas princesas

El día de hoy los reyes y las tres princesas irían al pueblo de Daegu a presentarle a la omega de la futura reina a la gente. Nadie en el pueblo sabía que todo era un matrimonio arreglado, pero aquel día simplemente presentarían a la omega de la heredera.

Lo que nadie sabía, ni los mismos reyes; es que ese mismo día en el pueblo frente a todos, Tzuyu le entregaría el anillo a Sana.

La alfa estaba muy nerviosa, aún cuando el compromiso era arreglado se sentía ansiosa, porque ella sabía le iba a pedir matrimonio a su pareja predestinada.

[👑]

Ya habían llegado al pueblo, los cinco estaban dentro del carruaje, esperando a que la puerta les sea abierta; cuando esta se abrió, salieron los reyes primero, tras los reyes salieron Tzuyu y Chaeyoung. Los reyes y la menor de las princesas empezaron a caminar, pero todos los pueblerinos se sorprendieron cuando vieron que la mayor de las princesas se quedaba junto a la puerta y aún más se sorprendieron cuando vieron a la alfa tenderle la mano a alguien dentro del carruaje.

Sana acepto la mano de Tzuyu, quien le ayudo a bajar; toda la mirada del pueblo estaban sobre ella, muchas curiosas y otras con sorpresa. Ambas princesas se agarraron de la mano y empezaron a caminar tras lo reyes y la menor de los Chou.

La rubia omega se sentía intimidada por las miradas que la gente le daba, por lo que inconscientemente se apego más a la alfa azabache. Tzuyu noto como muchos miraban fijamente a la omega, por lo que soltó la mano de esta y pasó su brazo alrededor de la cintura de la menor.

Sana se dió cuenta como todos se dirigían hacia una especie de escenario hecho de madera. Los reyes subieron y tras ellos las tres princesas.

Una alfa desconocido para Sana se acercó a los reyes e hizo una reverencia que estos corresponden. El extraño se para frente al escenario.

— ¡Habitantes de Daegu, los reyes han venido aquí para darnos una noticia a todos nosotros! —grito el extraño alfa y se hizo a un lado, dejando que el rey y la reina estuviesen en medio del escenario.

— ¡Hemos venido todos aquí para decirles que la mayor de mis hijas, heredera al trono, ha conseguido a su omega; quien nos dará a otro heredero al trono en un futuro! —grito el alfa.

El rey iba a decir algo más, pero Tzuyu se acerco a él y le tocó el hombro. El rey volteó y todos notan como Tzuyu le susurra algo, todos son testigos de ver como los reyes se retiran del centro, dejándole el lugar a Tzuyu, quien agarró la mano de Sana y la acerco al centro también.

— ¡Yo, la princesa Chou Tzuyu; futura heredera al trono de Daegu, aprovecharé está oportunidad para que todos vean lo que estaré apunto de hacer! —gritó la azabache.

Todos estaban sorprendidos por las palabras, pero nadie aparto la mirada de Tzuyu, que se encontraba sacando algo de su bolsillo.

Tzuyu agarró la caja roja que ya había visto con anterioridad la rubia omega. La azabache se arrodilló frente a la omega mientras abría la caja.

Todos los pueblerinos se quedaron sin aire. Sana se encontraba sorprendida, aún cuando sabía que la caja con el anillo la tenía la alfa y en cualquier momento podía pasar, no esperaba que lo hiciera frente a todo su pueblo.

— ¡Minatozaki Sana! ¿Te casarías conmigo? —lo gritó fuerte y claro la alfa.

Todos estaban en silencio, esperando la respuesta de la omega. La familia real sabía que Sana no se podía negar, pero igual estaban esperando a lo que diría.

— Sí... —susurró Sana, por lo que solo Tzuyu escucho y debido al silencio, uno que otro pueblerino.

Todos estallan de gritos al ver cómo Tzuyu se levantaba y agarra la mano de la omega, poniendo el anillo en el dedo correspondiente.

Algo que ambas princesas no decían, es que no sentían que esto fuese forzado o fuese un matrimonio arreglado.

[👑]

Los reyes y las princesas regresaban al castillo, todos con una gran sonrisa en el rostro, aunque la sonrisa de Chaeyoung era más de burla que de felicidad.

Cuando llegaron ya era hora de la cena, por lo que todos fueron directo al comedor, donde los platos apenas estaban siendo servidos.

— Así que... boda... —comento repentinamente Chaeyoung.

— ¡Ya todo está planeado! —exclama feliz el rey— ¡Será en dos semanas!

Las tres princesas miraron incrédulas a los reyes, no esperaban que fuese tan pronto. Tzuyu frunció el ceño, sentía que todo era muy rápido, pero en el fondo no le molestaba casarse lo más pronto posible con Sana.

— Oh... y sobre la boda, hay algo importante que debes saber... —la reina miró fijamente a su esposo tras decir eso.

— Se que solo dijimos que iban a casarse, pero... —el rey empezó a hablar— El mismo día de la boda serán coronadas como reinas de Daegu.

Las reacciones no se hicieron esperar, Tzuyu abrió lo más que pudo sus ojos y su boca, Sana se atragantó con la carne que comía, mientras Chaeyoung escupía el agua que bebía.

— ¿¡Ser reinas!? ¿No sé supone que eso debe pasar cuando ambos fallezcan? —exclamó Tzuyu.

Ambos reyes se miraron incómodos, algo estaban ocultando y Tzuyu lo sabía. Los reyes permanecieron en silencio, hasta que notaron la mirada molesta de sus dos hijas y la mirada confusa de la rubia.

— Creo que ya debemos contarles... —suspira el rey.

— Hijas mías, a su padre no le queda más de tres meses de vida... —susurra la reina.

Las dos princesas de Daegu sienten sus ojos picar y cristalizarse, por otro lado, Sana se encontraba sorprendida y triste.

— ¿C-Cómo...? —Chaeyoung tartamudea.

— Hijas... estoy enfermo, su madre y yo lo supimos mucho antes de que Sana llegará —susurró el rey— Por eso el mismo día de su boda, ambas serán coronadas como reinas.

Las dos princesas de Daegu empezaron a llorar silenciosamente y los reyes también. Mientras Sana, veía aquella escena con su corazón doliendo.

 Mientras Sana, veía aquella escena con su corazón doliendo

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