OB-SE-SIÓN (Itasasu fanfic)

Capitulo 7. Neko

Contacto... un sólo movimiento... sólo un poco...

Itachi se movía de un lado a otro en su cama, no podía dormir, al hacerlo se veía envuelto una y otra vez en sueños libidinosos con su hermano.

- Ah... Sasuke...

Los ojos de Itachi se abrieron de golpe al susurrar placenteramente el nombre del pequeño, no era la primera vez. Se secó el sudor de la frente y se quedó examinando el techo de su habitación, el silencio que reinaba en el sitio lo hacía profundizar más y más en sus pensamientos. Sin que se diera cuenta condujo una de sus manos directo hacía su hombría, masajeó un poco.

RING!! RING!!

El pelinegro giró la vista en torno al teléfono, la mano continuaba en el sitio aunque estática.

RING!! RING!!

De nuevo sus ojos se clavaron en el techo, ninguna clase de movimiento.

RING!! RING!!

Check!!

El Uchiha levantó el teléfono y colocó el auricular cerca de su oído.

- ¿Alo Itachi?

- ¿Qué ocurre? – hizo una pasusa - ¿Hay algún problema con los informes? – otra pausa - ¿O Acaso el trabajo de archivo es demasiado complicado para alguien como tú Deidara?

- Hey Itachi ¿Qué modo de hablarme es ese? – el rubio se escuchaba algo molesto – Me prometiste que vendrías a mi departamento esta noche ¿Qué pasó?

El pelinegro de nuevo se mantuvo callado para acto seguido suspirar levemente a modo de fastidio.

- En este momento tengo cosas más importantes que fornicar contigo – respondió secamente sin ninguna clase de consideración.

- ¿A si? – se escuchaba totalmente ofendido - ¿Cómo qué?

Itachi alzó la vista al escuchar un sonido proveniente de la entrada a su alcoba.

- Hermano... Tuve una pesadilla - Sasuke se hallaba parado enfrente del mayor - ¿Puedo dormir contigo? – mantenía entre sus diminutas manos parte de una frazada que era arrastrada por el suelo.

- Claro que puedes dormir conmigo, Sasuke – esto lo dijo con la intención de que Deiadara lo escuchara.

En el rostro del peliazul apareció una sonrisa, se había arriesgado a acercarse hasta el recinto del mayor con la seguridad de que su pregunta tendría una negativa por respuesta.

- ¡Itachi! ¿Qué estas haciendo? ¡Itachi! ¡Contestad el puto teléfono!

De un golpe el pelinegro colgó el aparato dejando boquiabierto a un ojiazul del otro lado de la línea.

- ¡No puede ser! – exclamaba Deidara al escuchar como le colgaban, se hallaba desnudo sentado frente a lo que parecía una cena romántica pospuesta - ¿Cómo se atreve ese desgraciado Uchiha?

Con algo de cariño Itachi hizo acurrucar a Sasuke en sus brazos, aunque el niño sentía como si cada contacto proporcionado por el mayor fuera divino, Itachi en cierto modo se sentía como si estuviera haciendo algo incorrecto. Ya había pasado un tiempo desde que se habían reunido y el pensamiento que existía en su subconsciente era el mismo... permanecer juntos por siempre.

Pero un día...

- Mira, Itachiiiiii

- ¿?

El pequeño peliazul extendía sus brazos dejando ver que cargaba un pequeño pero tierno gato negro con una mancha blanca que iba desde la quijada hasta el término del reducido pecho.