A tu lado (Saga paranormal #7)

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Ambos no sabían qué hacer. Notaba en los dos que los había sorprendido tanto como yo me había sorprendido hace minutos atrás. Estaban fuera de su elemento y eso me daba la ventaja en la situación y debía aprovecharla.

— ¿Entonces, me lo explicas o esperamos a que llegue la FMR? Porque espero que sepas que drogar al rey del Inframundo en contra de su voluntad es un delito no solo en nuestro mundo. —me puse de pie para dar unos pasos al frente, pero guardando la distancia aun así por seguridad.

Jaden parecía mucho más nervioso y se colocó detrás de Namjoon como un niño buscando apoyo de sus padres, mientras se mordía las uñas de su mano izquierda y con la otra jugaba con su cabello largo. Namjoon por su lado...solo estaba tenso, pero un tenso diferente a lo acostumbrado.

—Namjoon, di algo. —dije esta vez más dura por verlo en completo silencio y estaba comenzando a estresarme y perder la poca paciencia que tenía y quedaba. — Bien, ya que no quieres quitarte la careta...

Pegue un gritito involuntario cuando Namjoon con un movimiento de su mano dejo salir su halo verde y me hizo sentar de nuevo en la silla, atrapándome y tapándome la boca para que no gritara con este.

—Jaden ve a ver a Ivana. Quiero ver cómo es que Nimri logro entrar si ella custodiaba el castillo y enciérrala de nuevo, luego quiero que custodies el castillo y veas si alguien más ha estado aquí o está rondando por allí. —dijo Namjoon como si estuviera dando las noticias del clima.

Vi a Jaden asentir e irse de la biblioteca cerrando la puerta y dejarme allí sola con Namjoon. Me removí sin poder evitarlo al verlo acercarse y sentarse en otra silla frente a mí.

No iba a negar que estar así me hacía sentir algo vulnerable y me daba miedo lo que él podría hacerme. Antes ese miedo sería algo estúpido, pero justo ahora, después de lo que había visto, no estaba segura de nada de Namjoon.

—A ver Nimri, si eres honesta conmigo...yo seré honesto contigo, ¿De acuerdo?

Con un chasquido de sus dedos mi boca quedo libre y le lance una mirada de puro enojo.

— ¿Qué te hace pensar que yo deba decirte algo a ti? Tú no tienes derecho a exigir nada.

—Solo quiero saber cómo entraste. Es mi casa, tengo derecho a saberlo.

Su tono tranquilo me hizo apretar los puños estuve a nada de lanzarle un hechizo que le hiciera daño, pero fue allí que me di cuenta que él me tenía tan sujeta como para que ni siquiera pudiera extender los dedos de las manos y lanzarle un hechizo.

—Por la puerta, por donde más. —dije al fin de forma sarcástica. —Ahora, explícame lo que significa ese cuartucho y la información que hay allí adentro.

Namjoon se llevó la mano a la barbilla y levanto la ceja al mismo tiempo que lo vi destensarse, como si hubiera pensado en algo que arreglaría el problema...o una mentira que lo haría librarse de mí, no lo sabía.

—Hagamos un trato, un juramento. Yo te digo todo, sin mentiras u omitir nada, y tú me ayudas a conseguir lo que quiero.

— ¿Qué? — hacer juramentos en el Inframundo no era algo que tomarse a la ligera. Había visto suficientes trabajadores de mi padre hacer juramentos con él y morir, también había visto varios últimamente con Jimin y este hacía que sufrieran o murieran cuando incumplían. No era una buena idea hacerla en ningún sentido y con Namjoon la idea era mucho más escalofriante. —Estas demente.

Se encogió de hombros.

—Tal vez, pero mira el lado positivo: podrías saber todo y lo que te pediré a cambio es algo tonto.