Uraraka continuó hablando y hablando de más cosas tras concluir la conversación sobre la preocupación de Bakugou por ella, o como permaneció a su lado en todos los malos momentos.
Mientras ella hablaba, Bakugou solo la observaba atentamente, como por cada gestó su cabello se movía, como sus ojos brillaban al hablar de cosas que le gustaban, o de su hermosa sonrisa, en la que siempre se fijaba inconscientemente.
Bakugou continuaba pensando como el nerd había podido engañar a la castaña, no cabía a comprenderlo de ninguna manera. A sus ojos la castaña era preciosa, fuerte, gentil, sencillamente inigualable y hermosa.
"Debe ser tonto por no saber apreciarla" pensaba mientras la miraba fijamente con su cabeza apoyada en la palma de la mano.
-Sabes, tengo curiosidad... - comenzó ha hablar Uraraka de nuevo.
-¿Mm? - parpadeó sorprendido ante la pregunta repentina de la castaña.
-¿Tienes alguien que te guste? - preguntó ella intrigada.
-¡¿Eh?! - abrió los ojos como platos, Bakugou no esperaba para nada esa pregunta.
-Sí, ya sabes, alguien de quien estés enamorado - continuó mirándole con intriga.
-¿A qué viene la curiosidad? - preguntó él.
-Estaba pensando... no eres un mal chico, pero tu personalidad no es muy agradable, me preguntaba si tienes alguien que te guste seriamente - comenzó a fingir que pensaba.
-Sí, tengo a alguien que me gusta - se incorporó y cruzó los brazos frente al pecho, sin parar de mirarla.
-¡¿Enserio?! ¡¿Quién?! - preguntó aún más intrigada que antes.
-Tonta... no te lo voy a decir - rodó los ojos.
-¡¿Ah, por qué!? - hizo un puchero ante la respuesta del rubio.
En ese momento sonó el timbre que indicaba el final de la jornada lectiva. Bakugou segundos después de escucharlo, comenzó a caminar a la salida de la azotea, seguido de Uraraka corriendo tras él.
-¡Espera, pero dime quién es! - corría Uraraka bajando las escaleras de la azotea detrás del rubio - ¡Bakugou-kun!
Bakugou siguió bajando las escaleras haciendo caso omiso de los llamados de la castaña porque la esperase. Llegó hasta la clase, recogió sus cosas y caminó hacia la salida del edificio.
Uraraka le seguía a toda prisa con tal de alcanzarlo. Aunque solo lo hacía para saciar su curiosidad por el tipo de persona que podría gustarle al rubio.
-¡Bakugou-kun! - gritaba Uraraka - ¡Esperame! - seguía corriendo tras él - ¡Ah!
Bakugou se giró ante el grito de ella y la observó en el suelo, al parecer había tropezado con una pequeña piedra en el camino mientras corría tras él.
Caminó hacia ella despacio, se puso de cuclillas frente a ella mirándola fijamente hasta que la castaña levantó la cabeza.
-¿Estás bien? - preguntó Bakugou cuando ella levantó su frente del suelo.
-¡Auch! - se quejó ella sentándose en modo indio y mientras frotaba su frente colorada.
-Ja... - rió el rubio por lo bajo viendo la frente roja de Uraraka.
-¡No te rías! - dijo molesta ella.
-Jajaja - continuaba Bakugou riendo - perdón, jajaja, no puedo evitarlo - dijo él.
Uraraka le miraba fijamente con un puchero en sus labios, estaba molesta. Se había caído por su culpa, por tener que perseguirle, y aún así se atrevía a reírse de ella de esa manera.
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💕La sonrisa por la que me muevo💕
FanfictionCon su personalidad arrogante y egocéntrica, Katsuki Bakugou nunca hubiera pensado sertirse frágil ante una sonrisa de la cara de ángel. Esta historia cuenta como Katsuki puede cambiar y enamorarse como las personas normales, todo gracias a la sonr...