15| Indiferencia

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Hermione

Dicen que lo opuesto al amor es el odio, esa es una gran mentira. Lo correcto es la indiferencia, porque no sientes ninguna clase de sentimiento hacia un ser u objeto. Durante las dos semanas luego de la boda de Charlie lo he experimentado, Draco y Rijin desaparecieron de mi vida como si nunca los hubiera conocido, traté llamándolos, pero nunca respondieron.

Aunque claro no es como si yo hubiera llamado y escrito cada cinco minutos, también tengo deberes en mi clínica. La esposa de Hans tuvo a su hijo así que le di permiso por dos semanas, así que me quedé de guardia verificando la salud de mis pacientitos. Dejo a Elizabeth a cargo de la veterinaria para ir a recoger a mi abuela del hospital al fin le han dado de alta y la llevaré a casa de mis padres, Spring se queda en la veterinaria puesto que no tardaré mucho. Durante todo el camino no dejo de observar mi teléfono en espera de una notificación, incluso si llamo no me responderán.

Una vez en el hospital me apresuro hacia la habitación de abuela Euphemia, antes siquiera tocar el pomo de la puerta escucho los gritos de mi abuela.

— ¡No lo apruebo! ¡Eres un desgraciado, Harry Potter! — Su voz resuena en mis tímpanos.

— ¡Mamá! Harry solo siguió su corazón. — Ese es el tío James, parece estar mediando entre ellos.

— ¡Su corazón no pensó en su abuela! Ni siquiera Hermione cometería la locura de casarse sin tenerme presente. Harry James Potter, eres mi único nieto hombre y me excluiste del evento más importante de tu vida. — Mi abuela habla de manera desesperada y dolida.

— Abuela, hay una razón para eso...

Theo aparece detrás de mí mientras sostiene unos documentos, sus ojeras me dicen que ha estado de guardia. Lo que explica porque no alcanza a responder mis mensajes.

— ¡Estoy embarazada! — Luna es quien exclama — Yo pensaba en el aborto, pero Harry me convenció de casarnos en cuanto me descubrió con los síntomas luego del Congreso Médico. Mis planes en solitario se vinieron abajo, pero con Harry a mi lado no será tan duro, nos conocemos desde la universidad. Así que me lo llevaré a vivir conmigo.

Decido no escuchar más, Theo y yo nos damos una mirada silenciosa, es claro que ambos siempre terminamos escuchando cosas que no nos incumben. Una vez lejos y en otro pasillo nos miramos con cierta sorpresa.

— Veo que estás vivo. — Digo en tono de broma, ya que es otro que no ha respondido mis llamadas mensajes.

— Estoy a un paso de ser un cadáver — Sabe cómo me siento porque pone su mano sobre mi cabeza como si fuera un cachorro — Rijin lo ha tenido peor, como la doctora Daphne está de luna de miel, mi jefa la ha tenido como interna en varias zonas del hospital, ni siquiera podemos tomarnos un respiro, no tiene tiempo ni para dormir y Draco, él se...

Antes de que pueda decirme algo se oye los altavoces: — Código rojo en el área de Traumatología, Doctora Lovegood y residentes se les solicita de inmediato. Código rojo...

— Pasaré mañana por tu casa, espérame con Pansy... — lo veo irse corriendo con su bata ondeando tras él.

No me queda más que regresar hacia la habitación de mi abuela, al pasar la encuentro sola sentada en la silla de ruedas. Puede caminar, pero no ha de esforzarse demasiado.

— ¡Hija mía! — Exclama en cuanto la saludo — ¿Tú no te casarás en secreto, cierto?

Sonrió, sé porque pregunta, mas no voy a delatarme, después de todo es un tema del que nunca hablaré.

— Abue, ya te he dicho que nací para quedarme soltera por siempre — Digo mientras me acerco a ella para llevármela, ya que mis tíos se han de encargar de los papeles que la darán de alta. — No tienes que pensar que huiré para casarme, no soy Julieta.

Euforia ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora