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12| Debilidad

Draco

Hermione me invitó a salir, me sentí fuera de lugar en un principio. Ya que nuestra cita anterior fue cancelada por una buena razón, me arreglé tanto como pude en medio de mis penumbras. Rijin me despidió en la puerta de la casa como si yo fuera una adolescente yendo a su primera cita, me susurró en coreano "Hwaiting" y en japonés "Ganbatte" con la intención de darme ánimos y fuerza. No estoy ansioso en lo absoluto, ya que la conozco cerca de a un mes.

Una vez dentro de su coche pone una melodía de Beethoven, sino me equivoco se trata de Claro de Luna, pero no es el principio triste, se trata del tercer movimiento que es la parte final de la sonata, la cual es complicada para un principiante y solo un pianista experimentado podría interpretarla sin un solo error.

— Te llevaré a un lugar muy especial — su voz es tan animada por lo que de inmediato me contagia su emoción. Empieza a explicarme sobre la terrible resaca y que tuvo que buscar pedirle ayuda a su amiga para que la reemplazara en la cirugía, Pansy Parkinson que es dueña de un restaurante. — digamos que tengo que pagar el favor que me hizo ayer.

— No sería más fácil solventar el costo de...

La escucho reír, su risa es encantadora y me parece tierna. — No, tenemos un pacto entre nosotras. Favores que incluyen nuestras habilidades se pagan de la misma manera — parece meditar lo que dirá, porque su silencio pensativo es interrumpido por un largo "hmmm" — en su restaurante come gratis quien pueda demostrar habilidades musicales... Así que siempre que un cliente tenga tiempo y talento puede tocar cualquier instrumento e irse con el estómago lleno.

Entonces empiezo a entender a qué se refiere. — Hermione, tocarás el piano — Afirmo —¿por qué me estás llevando a ...?

— Quiero tocar el piano para el hombre que me gusta — su voz suena sincera, estoy seguro que si la escucho decir esas palabras una vez más, iré corriendo por Daphne para pedirle que haga la cirugía — asimismo, tocaré durante una hora y no creo poder acabar con toda la comida gratis que ganaré.

Sus palabras sinceras me hacen sonreír. Llego a confesarle que nunca crucé la avenida, por lo que aquel lugar y su vecindario no los conozco. A pesar de que casi vivimos uno frente al otro creo que nunca cruzamos palabras. Supongo que si pudiera verla sabría si llegué a observarla alguna vez... ¿Debería considerar más seriamente la cirugía? Tal vez. Ella parece ser mi debilidad en cuanto se refiere a mis ojos, me ha hecho cuestionarme seriamente.

Una vez que llegamos al restaurante, ella me ayuda a bajar de su coche, de inmediato escucho a un caballero cantando Set Fire To The Rain.

Hermione me lleva hasta una mesa, me dice que estamos junto a la ventana, que al lado izquierdo se encuentra un pequeño escenario con algunos instrumentos, como un piano, guitarras, una gaita, violines y cellos. Además de un micrófono.

— Iré a tocar el piano para acompañar al hombre que está cantando. — Dice, antes de que pueda reaccionar ella ya ha besado mi mejilla. — Adoro cuando te sorprendes, tus ojos son muy expresivos.

Escucho el sonido de los cubiertos de los comensales, voces de niños y adultos. Por las distintas voces de alrededor puedo asegurar de que se trata de un restaurante medianamente grande. Las notas del piano acompañan la voz, las personas empiezan a aplaudir y cuando terminan piden que continúen en ello, dan paso a la canción One And Only de Adele.

Escucho que alguien se sienta frente a mí, por lo que a pesar de que no la veo dirijo mi vista hacia donde proviene el sonido de la silla.

— Que brillante truco, ves sin ver. — Es una mujer joven y tiene un acento extraño, no es un inglés perfecto — Soy Pansy Parkinson, la amiga de Hermione y tú debes ser Draco Malfoy, el hombre de su vida. — La última frase me deja perplejo. — No me lo estoy inventando, debiste gustarle mucho para que me contara lo emocionada que estaba por traerte aquí, por lo general no me avisa que vendrá.