El Hubiera No Existe [Luzuplay]

Capítulo 1

๑ Polvo De Hada ๑

Narrador Omnisciente:

Después de que Auron y Perxita dejaron el pueblo de Karmaland, ambos llegaron a la ciudad de los Santos, una ciudad sin magia, llena de humanos comunes y corrientes y de criminales.

Al ser una ciudad sin magia, cuando Auron llegó a la ciudad, la flama que tenía en el cabello se apago, no entendía el por qué, se supone que eso era una secuela de su maldición, por más que intento jamás se apagó o desapareció.

Una vez llegaron a la ciudad, tanto Perxita como Auron pensaron que sería buena idea cambiar su apariencia y ¿Por qué no? sus nombres también, al principio todos los conocían como Gustabo y Horacio.

Ahora Auron era rubio, de ojos azules, claro esos ojos eran pupilentes; mientras que Perxita optó por una cresta que con el paso del tiempo se lo teñía de colores.

Al principio tanto Gustabo y Horacio, solo hacían el capullo, hacían atracos - que casi siempre terminaban con ellos en la cárcel o escapándose - , dejaban en medio de la nada a personas random, entre más tonterías más, gracias a esta actitud, llamaron la atención de Conway, el superintendente de la ciudad.

El super les ofreció ser sus informantes, poco a poco los chicos fueron subiendo de puesto, hasta llegar a ser subinspectores.

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Después del accidente de la iglesia, tanto Gustabo como Horacio y Conway, estuvieron en un hospital, estaban delicados, más su vida no corría tanto peligro, pues los explosivos que "Pogo" puso no eran tan potentes como una normal.

Una vez todos se encontraban mejor, Conway mando a Gustabo a un psicólogo, si quería regresar al cuerpo de policía tenía que tratarse, obviamente el rubio acepto.

Ahí fue cuando el superintendente empezó a sospechar del lugar de origen de los dos "hermanos" pues no era normal la rapidez con la que se había curado el rubio, Conway empezó a investigarlos a fondo.

El adulto no tardó en encontrar información sobre los chicos, una vez con todas las pruebas los confrontó, los chicos no podían ocultar más su pasado así que le contaron todo al super.

A partir de ahí ellos accedieron a hacer sus nombres reales públicos, todos en la ciudad empezaron a llamarlos por sus nombres reales, sin embargo solo el superintendente y el comisario sabían su pasado completo.

Ahora Auron y Perxita estaban en un atraco, el cual termino en tiros, como ya era costumbre, Perxita abatió a la mayoría de los delincuentes, mientras que por el lado de Auron, le estaba costando, abatió a un par sin embargo a cambio recibió un par de balazos en el hombro.

Cuando termino el tiroteo Auron recibió ayuda médica, mientras lo curaban Perxita recibió un llamado por parte de Conway, al parecer los quería en su despacho cuanto antes.

El pelirrojo no tardó en pasarle el mensaje a su amigo y una vez curado, el ahora rubio subió al patrulla, una vez arriba Perxita se puso en camino hacia comisaría.

– ¿Para que crees que nos quiera papu? – Pregunto el pelirrojo.

El rubio saco su celular y mientras respondía un par de mensajes hablo – No lo sé, seguro que nos quiere para quejarse de algo – Dicho eso, Auron procedió a bostezar.

– ¿Ayer el abuelo no te dejo dormir? –

Auron rápidamente le dio un golpecito a Perxita en el hombro – Solo estás celoso por qué Volkov no te ha dado –