Capítulo 15

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๑ Roto está, Roto se queda ๑

Narra Auron:

No voy a mentir, enserio tenía miedo de volver a despertar en aquel mundo todo extraño, por suerte, no fue así, está vez desperté en mi casa, junto a Frederick, últimamente este pollito se la pasaba pegado a mí, tal vez si me extraño demasiado, no veo dejando de nuevo a Frederick, me lo llevaré conmigo cuando termine el trabajo.

Me levante de la cama, Frederick se movió un poco y volvió a acomodarse en la cama, le di una media sonrisa, di la media vuelta y fui a tomar una ducha.

Cuando termine regrese a mi cuarto a cambiarme, me puse lo primero que vi en el ropero, me cambié, me puse los tenis y baje a la sala, ahí me encontré con Perxita, quien estaba preparado sus cosas para partir al bosque encantado, está vez nos meteríamos a lo más profundo.

También prepare mi mochila, guarde mis cosas, me estiré y ambos salimos de casa en dirección a casa de Rubius.

Era muy cansado, pero teníamos que ir a avisarle a Rubius que íbamos a estar dentro del bosque, o mejor dicho, tener que pedirle permiso.

Una vez le avisamos que iríamos a explorar el bosque este nos dio un mapa y se deslindó de nosotros.

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Caminamos por el bosque, tenía el mapa en manos y fruncí el seño mientras lo miraba, chasquee la lengua después de un rato – ¡Me rindo! – Doble el mapa y se lo dí a Perchas.

El de cresta desdobló el mapa – Vamos... No es difícil leerlo –

Me crucé de brazos – ¡No solo es eso! – Señalé el mapa con enojó – Rubius prácticamente nos dijo ¡Tomen este mapa si no lo saben leer y se pierden no es mi problema! –

Perxita suspiro – ¿Acaso querías que el nos acompañará? Tiene mucho trabajo, no nos puede guiar –

Desvié la mirada – ¡No tiene por qué acompañarnos! Pero pudo darnos un número por si nos perdíamos –

Perxita dio una sonrisa forzada – ¿Por qué no ... Intentas arreglar las cosas con él? –

Lo mire con los ojos entre cerrados – ¿Crees que no lo he intentado? –

– No, no lo has intentado –

Suspire – ¿Y tú crees que me va a dejar si quiera intentar acercarme? Me mandara a tomar por culo nada más le diga algo –

" No se que haría si no estuvieras aquí, todo sería muy triste"

Otra vez esa maldita frase, cada vez que veía a Rubius recordaba lo que el otro Rubius me dijo y no podía evitarlo ¿Cómo podría intentar arreglar las cosas con él después de saber eso? ¡No tenía derecho!

Perxita paso un brazo por mis hombros – Si, probablemente Rubius haga eso nada más te intentes acercar –

Le di una mirada enojada, le iba contestar pero el volvió a hablar – Sin embargo, debes seguir intentandolo, por lo menos debes pedir perdón, si te perdona o no, quedara en él, no en ti –

Baje la mirada ante ese comentario ¿Pedirle perdón? ¿No lo había hecho ya? Espera un segundo ¿Tenía que pedirle perdón por irme de un pueblo en el que ya no me sentía cómodo? Sacudí la cabeza, no era pedir perdón por eso, tenía que pedir perdón por irme sin decir nada, sin explicar nada a nadie.

– Tal vez intenté hablar con él – Perxita sonrió y me dio una caricia en el cabello – Pero no prometo nada, Rubius puede cerrarme la puerta nada más verme –

– Puedes hablarle desde fuera – Sonrió el pelirrojo, yo solo negué con la cabeza.

Suspire – Si.... No haré eso, vamos a seguir con nuestro trabajo – Perxita sonrió y seguimos caminando, buscábamos pistas.

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Narrador Omnisciente:

Ambos chicos miraban los árboles y el pasto, buscaban un pedazo de tela, cabellos, basura o algo que los traficantes hayan dejado.

En esa parte del bosque habían más hadas, por lo que la gente no pasaba haya, sin embargo los traficantes si entraban ahí, si lograban encontrar algo y poder analizarlo, podrían tener a otro sospechoso.

Auron miraba entre las hojas de los árboles, cuando una hada salió de repente, ella salió volando con rapidez, como escapando del rubio, Auron la siguió con la mirada.

– Las hadas están espantadas – Dijo Perxita quien también vio a la pequeña hada, escapar.

Auron suspiro y le dio la razón – Normal, los traficantes deben de asustarlas, es triste, ellas eran super curiosas, ahora son más tímidas –

– Tenemos que encontrar a los culpables lo antes posible, por el bien de todos – Dijo el pelirrojo mientras se rascaba el cachete.

Auron le dio la razón, siguieron buscando por un par de horas y lo máximo que encontraron fue basura, no había nada que los pudiera ayudar, tendrían que regresar mañana y adentrarse más.

Con ese pensamiento, al fin regresaron a casa, sin embargo se perdieron de camino a casa, tuvieron que llamar a Mónica para que está fuera a por ellos, por suerte la pelinegra sabía ubicarse y aún así los encontró cuando empezó a anochecer.

La chica los llevo a la salida, querían ir directamente a casa, pero Auron tenía que ir a avisarle a Rubius que terminaron su trabajo.

El rubio subió hasta la isla, tocó la puerta y este abrió después de un rato, nada más verlo Rubius alzó una ceja.

– ¿Qué quieres? – Pregunto un Rubius bastante enojado.

Auron suspiro – Vine a avisar que terminamos nuestro trabajo de hoy, mañana vendremos de nuevo – El rubio lo miro con seriedad.

Rubius frunció el seño – ¿Y? ¿Yo que tengo que ver? –

Auron se quedó callado se sobo las cienes y después hablo – ¡Tu nos dijiste que te avisarnos cuando terminaramos nuestro trabajo! –

El alto miro hacia arriba – ¿A penas terminaron su trabajo? ¿Trabajan muy lento no? –

Un pequeño tic se origino bajo el ojo de Auron – Trabajamos a un buen ritmo – Dijo con lentitud.

Rubius hizo un ruido con la boca – Como sea, si es todo te puedes ir, aún tengo cosas que hacer –

De pronto Auron recordó lo que Perxita le había dicho "Trata de pedirle perdón" el rubio alzó la voz para detener al oso – De hecho –

Rubius lo miro con seriedad – ¿Qué? –

El de tatuajes y perforaciones se quedó en blanco por un segundo ¿Qué diría exactamente? ¿Perdón por irme sin decirte nada? Si le decía eso ¿Rubius se abriría aún que sea un poco? ¿No era tan fácil o sí?

– ¡Auron! ¿Qué quieres? –

Auron parpadeo unos segundos – Eh... Si, perdona – Hizo una pausa – Yo quería saber si... Tal vez, quisieras ir a comer mañana con ... –

– Para nada, no me interesa –

Auron alzó la vista – No quiero tener más relación contigo que no sea de trabajo ¿Eso es todo? – el rubio asintió con la cabeza.

Se despidió y dio la media vuelta para irse del lugar, una vez abajo suspiro, miro el cielo y frunció el seño – Oh no, Rubius no me va a rechazar así por qué sí, tendrás mis disculpas –

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N.T:

Jsjsjjs creo que debo de dejar de publicar capítulos fuera del horario, si no pronto van a alcanzar los borradores actuales :c




El Hubiera No Existe [Luzuplay]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora