Un nuevo enfrentamiento

548 28 0
                                    

Al levantarme me vestí y tome el cinturón donde se encontraban mis armas, me encamine donde siempre solemos desayunas, al llegar me encontré con Susan y me senté frente a ella con una sonrisa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.




Al levantarme me vestí y tome el cinturón donde se encontraban mis armas, me encamine donde siempre solemos desayunas, al llegar me encontré con Susan y me senté frente a ella con una sonrisa.

-         Hola Su, buenos días

-         Buenos días, Eli, se te nota de buen humor- me dijo con una sonrisa divertida- sucedió algo

-         ¿Tendría que suceder algo para que me encuentre de humor? - respondí sonriente mientras llevaba una tostada a mi boca

-         Hola chicas- dijo una Lucy sonriente que llegaba junto a Peter.

-         Buenos días- respondimos Susan y yo al unísono, mientras Lucy se colocaba al lado de Susan y Peter de mi lado, al conectar miradas con el rubio, no pude evitar recordar mi atrevimiento de anoche y me sonrojé, apartando la mirada.

-         ¿Qué harán hoy? – pregunto Lucy

-         Entrenar – dijimos Peter y yo en sincronía sacando unas risas

-         Y ustedes- pregunto el Pevensie mayor

-         Por la tarde queremos ir al rio ¿quieres venir Elaine? – dijo Susan

-         Eeh...

-         Aslan nos pidió que habláramos con él por la tarde – dijo rápidamente Peter, a lo que mire algo confundida ya que no recordaba eso, hasta que tomo mi mano por debajo de la mesa y entendí.

-         Ooh cierto – dije fingiendo

-         Okey – dijo Lucy no tan convencida, alargando la e

-         Hora de irnos, adiós, chicas, dije mientras me levantaba seguida de Peter

-         Adiós- respondieron.

-         Aslan? – pregunte al ojiazul mientras íbamos a entrenar

-         No se me ocurrió algo mas

-         Eres impredecible Peter Pevensie

-         Impredecible es mi segundo nombre – respondió y nos echamos a reír.

pasamos la mañana entrenando, luego fuimos a almorzar, al terminar Peter me guio a las orillas de un rio donde había un árbol, al sentarnos bajo este no articulamos ni una palabra, solo nos tomamos de las manos, decidí recargar mi cabeza en su hombro, al hacerlo el apoyo su cabeza sobre la mía y nos quedamos así, disfrutando por un efímero momento, nuestra compañía para nada incomoda.

-         Peter – lo llame

-         Mmm?

-         Te quiero- le dije y sentí como se tensaba, me asuste pensando lo peor y alce mi mirada para observarlo, así me encontré a un Peter mirándome completamente sonrojado.

Corazón de guerrera| Peter PevensieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora