Cap 293.

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Perdidos en el amor.
2a parte.

"Nada, sólo por decirlo, ahora dime, ¿cómo va el informe? ¡Haz que sea brillante! Realmente quiero verte ascender antes de que me retire", el comandante no continuó porque no estaba seguro de qué era verdad y qué eran simplemente rumores, todavía tenía un informe importante que terminar y no quería distraerlo. Por lo que decidió dejarlo por ahora, ya le había advertido a Saeng sobre posibles problemas, así que su trabajo estaba hecho, Mantenerse prudente era un buen consejo para cualquiera.

"Haré lo mejor que pueda, realmente no me importa si me ascienden o no, hago lo que tengo que sé hacer y no me arrepiento", Saeng se dio cuenta de que el comandante debía haber oído algo sobre él, de lo contrario, no diría algo así de la nada. Como no quería continuar, decidió no presionarlo, nunca forzaría a nadie a hacer cosas que no quisiera.

"¡No digas eso! ¡Sé más ambicioso y aspira a ser el mejor! ¿Esto es por lo que KimBum dijo anteriormente?", el comandante no pudo evitar suspirar con pesadez. KimBum nunca había pensado que Saeng fuera un buen oficial, aunque cada vez que lo desafiaba, acababa humillado. Así que se desesperó lo suficiente como para hacer cosas frente al comandante, tratando de arruinar la reputación de él, pero el comandante conocía bien a Saeng, confiaba en que él era una persona decente. Sin embargo, KimBum no lo creía, simplemente creyó que el comandante lo favorecía e ignoraba sus faltas.

"No, no le hago caso a sus palabras. Creo que he llegado a un nivel satisfactorio, he trabajado muy duro para llegar a donde estoy, tendré que luchar aún más si quiero subir de rango. He estado haciendo esto durante años, francamente, estoy muy cansado y creo que es hora de detenerme y descansar un poco", dijo Saeng con tranquilidad.

Él sabía cuántas personas habían estado observándolo y dudando de su capacidad desde que llegó aquí, por eso hizo todo lo posible para luchar por su honor y para justificarse ante los demás.

"Si tú lo dices, pero aún así, no quiero que desperdicies esta oportunidad, ¿sabes lo raro que es tener a alguien tan destacado como tú en el ejército en estos días? Quiero que te involucres más en tu carrera, por el bien del ejército", el comandante realmente apreciaba a Saeng, él había ganado su posición por sus propios méritos, en lugar de conexiones familiares. Saeng era exactamente el talento que necesitaban, sería un desperdicio ponerlo en las gradas sólo por culpa de algunos celos estúpidos.

"Comandante, tome un poco de té, huele muy bien", Saeng forzó una sonrisa y deliberadamente cambió el tema, ¿desde cuándo había dejado de estar obsesionado con luchar adelante? Probablemente era porque tenía a Hyun, aunque él solía ser la clase de soldado que no se preocupaba por nada más que luchar por su honor, sin embargo, las medallas y los premios le parecían menos atractivos en este momento. Saeng sabía que el comandante quería lo mejor para él, pero siendo hombre joven, después de años de luchar solo, lo único que ansiaba por ahora era disfrutar del amor del hombre que amaba, quería perderse en el interminable ternura y cuidado de Hyun.

"¡Por supuesto! Lo robé de mi amigo, le costó una fortuna y lo guardé especialmente para ti, ¿a qué sabe?", el comandante sonrió astutamente mientras alcanzaba su taza de té, ¡al muy pícaro no le importó decirle a Saeng de donde provenía la bebida!

"Supongo que no hay té para mí, ya que lo guarda especialmente para nuestro Coronel Saeng", los dos se dieron la vuelta y vieron a KyuJong apoyado en la puerta con una sonrisa en su rostro.

"¡Jajaja! Llegas justo a tiempo, Saeng acaba de servirme una taza de té, ¿has seguido el olor y por eso has venido hasta mi oficina? Tu nariz es seguramente más funcional que la de nuestros perros patrulleros", el comandante tomó un sorbo de su infusión mientras se burlaba de KyuJong, ¡el otro joven brillante en esta base del ejército! KyuJong provenía de una familia militar, pero nunca lo había usado para su beneficio, obtuvo lo que tenía justo como lo hizo Saeng, a base de su propio esfuerzo. Aunque era muy discreto, alguien se enteró de su pasado de alguna forma, así que había mucha gente. Que temía ofenderlo sin querer y que el tomara represalias, sin embargo KyuJong no era ese tipo de personas.

"Comandante la próxima vez que quiera hacer algo debajo la mesa, recuerde no involucrar al Coronel Saeng, de lo contrario Marco se asegurara de que toda la base del ejercito lo sepa en 5 minutos", KyuJong replicó amargamente mientras sacudida la cabeza, ¿cómo podía decir que tenía una nariz de perro? Sabia que estaban aquí porque Margo se lo había dicho, KyuJong se sintió repentinamente afortunado de que Marco no estuviera viviendo en tiempos de guerra, de lo contrario traicionaría a su país, no por malicia sino por su gran boca.

Saeng se carcajeó luego de escuchar a KyuJong, ya que Marco era un joven descuidado al que le encantaba hurgar y compartir los chismes con él. Saeng sabía que Marco no quería decir nada malo con eso y sabía exactamente lo que quería decir y a quien debía decirle, por lo tanto no le presto atención, de todos modos, todo lo que podía murmurar con todos los demas no eran más que vanalidades. Los otros ni eran estupidos, chismorreaban alegremente unos contra otros, pero tambien sabían mantener la boca cerrada cuando se trataba de algo serio.

Un verdadero amor. 2a Parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora