LOS MUERTOS.

CAPITULO 5: LOS MOTOQUEROS.

Amelia y Gabriella siguen encerradas en su cuarto oscuro, están con miedo, cansadas, con muchas ganas de irse a lo que aparece Magali, la mano derecha del jefe y les dice:

- Don Matías las quiere ver.

Ambas se miran asustadas por tener que verle la cara otra vez a ese hombre, al líder de los motoqueros.

Ambas aparecen y él está desnudo en un baño de esponjas, habían mujeres a su alrededor dándole aquel baño mientras él solo se relajaba:

- No sean ingratas chicas, vengan y denme un beso.

Ambas se quedan quietas pero Magali hace un sonido alarmante con su arma y ellas se acercan con miedo a darle un beso a ese hombre que lo único que hace es disfrutar de su poder.

Amelia y Gabriella se van a prepararle algo para comer a Matias cuando el le pregunta por alguna novedad a Magali:

- Nuestras infiltradas ya deben estar en la fase final de su trabajo, Max ya secuestró al chico, creo que entre esta noche o mañana estarán llegando.

- No te imaginas cuanto extraño la diversión.- Respondió Matias riendo.

Matias se pone de pie y Magali agacha la cabeza para no verlo desnudo a lo que él le responde:

- Tranquila, observarme, todo el mundo querría ver a su Dios de esta forma, así que maravíllate ante mi belleza y sensualidad.

Magali lo observó y él le preguntó:

- ¿Has sabido algo de tu hija?.

- Ella no es mi hija.- Respondió Magali molesta.

- Bueno, ya lo veremos, por mientras prepara al ejército, yo me divertiré con dos chicas ahora y luego me sumaré.

Magali se marchó mientras Matias o Don Matias las observaba a todas.

Max, Malu y Felipe siguen caminando, cada vez más cerca de su objetivo, Felipe está muy cansado, tiene hambre, tiene sed y no puede seguir caminando, quiere escapar pero está muy débil para aquello, claramente no sería la decisión correcta, claramente no es su mejor alternativa.

Maura está en el puesto de vigilancia con sus binoculares, vigilando tanto el refugio como también los alrededores de Ciudad Liberty. Noah está a cargo de momento, anda caminando por todo el lugar con un cuaderno, anotando todo como se debe.

Maura sigue vigilando y de pronto vio que un grupo de motoqueros se dirigía hacia el lugar, al frente venía un camión a toda velocidad:

- Noah, vienen personas hacia acá.- Avisó Maura a Noah.

Noah se fue hacia la puerta y se fijó que el camión no frenará y va con todo a lanzar al suelo la puerta principal. Noah al escuchar el motor muy cerca corrió a toda velocidad y alcanzó a evitar ser atropellado por el camión mientras que la puerta principal se vino al suelo junto a otros extremos de los muros que se doblaron producto del impacto. Maura alcanzó a saltar desde un escalón De la Torre de vigilancia antes de que ella se cayera de los cinco metros.

Entraron unos hombres y con sus lanzacohetes comenzaron a disparar a las casas, a destruirlas. Entraron hombres armados hasta los pies y comenzaron a quemar todo, a romper ventanales, a incendiar los alrededores que es sólo bosque.

Noah corrió a toda velocidad a la armería en busca de las armas, para esconderlas, antes de que las encuentren ellos. Entró en la habitación y en una bolsa comenzó a echarlos todos hasta que siente unos pasos detrás de ellos. Noah tomó el arma, se dio vuelta pero él ya estaba encima de él, le quitó el arma de una patada y comenzaron a luchar. Noah lo lanzó hacia la ventana rompiéndola pero el que era el doble de su cuerpo lo tomó y lo golpeó contra la pared, comenzó a ahorcarlo hasta que se apareció Magali y le dijo:

- Déjalo, al parecer él está a cargo, Don Matias lo quiere en la calle principal.

El hombre tomó a Noah y lo llevó hacia la calle, todas las personas estaban arrodilladas muy asustadas, niños llorando, todos atemorizados.

Don Matias tomó su bate lleno de clavos pequeños y se puso al frente de Matias:

- Cerditos...cerditos...ha llegado el lobo!. Ahora ustedes sirven para mi, y si no lo hacen, todos quedarán como el...

Matias alza su bate para matar a Noah y apareció Violet llorando:

- ¡Por favor, no lo hagas!.

Don Matias se le quedó observando y se fijó en que estaba embarazada.

- ¿No te gustaría que fuera yo el padre?, ando en busca de mi heredero.

Violet al escuchar eso, lo miró con repudio, le dio asco lo que le dijo.

Jacob se apareció sin comprender lo que ocurría.

- Ahora todos ustedes van a trabajar para mi, toda la comida es para mi, Gabriella y Amelia nos hablaron de ustedes y al parecer no nos mintió.- Dijo Matias.

Don Matias va a proseguir a asesinar a Noah, Noah llora rogando por su vida, Matias lo va a asesinar y de pronto se arrepiente, lo mira fijamente a los ojos, le habla al oído y le dice:

- Los estaremos vigilando, dale ese mensaje a tu líder.

Don Matias hace la señal de retirada y todos se van dejando en llamas a Ciudad Liberty.

Justin apareció en muletas a ver lo que sucedía y uno de los hombres lo empujo lanzándolo al suelo, provocando la rabia en Jacob.

Siguen tras Felipe, Samuel y Sofía, ellos se encontraron de frente con un gran edificio, con gente armada y vestidos como en los años ochentas, estilo motoquero y rock.

A lo lejos vieron colgando ropa a Gabriella y a Amelia, bien delgadas y con un aspecto poco esperanzador:

- Hay que ayudarlas.- Dijo Sofía.

- Nos ganan en número, debemos volver por ayuda, al menos ya sabemos donde están.- Respondió Samuel.

No les dio buena espina por lo que decidieron devolverse antes de que los vean.

Ya se hace de noche, Samuel y Sofía caminan por el bosque buscando llegar a alguna casa abandonada, ambos preocupados por Gabriella y Amelia.

Siguieron caminando hasta que lograron llegar a una casa, se recostaron en una cama que había, se pusieron a mirar el techo y Sofía le dijo de un momento a otro:

- Samuel, creo que estoy embarazada.- Haciendo referencia a su periodo.

Samuel la miró sorprendido y no se resistió a abrazarla y besarla. Ambos estaban muy emocionados, muy felices.

Sofía no sabía en qué momento decirle, pero lo hizo en un momento íntimo y seguro.

A Samuel le corrieron lágrimas producto de la emoción, y junto a Sofía lloraron de emoción abrazados:

- No te imaginas cuanto quiero que lo sepa Ángel y los demás.- dijo Samuel.

Sofia solo se reía y lo besaba.

Ángel y Sebastian vigilan en la noche, todos los demás duermen plácidamente, Sebastian está un poco preocupado por su hermano. Ángel lo calma, le pide que no pierda la fe, que solo deben confiar en sus instintos.

Ambos terminan de charlar y desde el bosque ven a una chica parada, en cada brazo sostiene unos cuchillos muy grandes y con una forma muy llamativa. Lo interesante es que Sebastian y Ángel conocían a esta chica, ellos se acercaron sin duda alguna a saludarla mientras que los demás se quedaron sin comprender bien quien era.

- Que están grandes ustedes dos.- Dijo ella.

Ángel no dudó en darle un abrazo, esa chica era Allison, la ex de Samuel. Ángel tiene muy lindos recuerdos de ella, la quería un montón, y bueno Sebastian la conocía por las reuniones familiares que hacían y Samuel siempre la llevaba consigo, en una relación larga y bonita, pero con un final un tanto decepcionante.