Hamburguesas y papas:
Domingo perezoso para la pareja, una semana larga dónde Theo había tenido grandes casos que tratar y Liam pasó toda su semana en la sala de urgencias.
—Liam tengo hambre, cocina algo —. Theo estaba tirado en el suelo, completamente extendido.
Mientras Liam estaba en el sillón cada vez su cuerpo bajaba más al suelo.
—Theo no seas perezoso y cocina algo tú —. Su cabeza tocó el suelo y seguía bajando.
—Bien, si no quieres cocinar ordenare algo.Movió un dedo de la mano intentando tomar el móvil que estaba en la mesa.
—Liam no lo alcanzo, ayúdame —. Su voz era tan baja.
—Por Dios Theo, solo levántate, toma el móvil y pide cuatro hamburguesas con cientos de papas.Jaló la alfombra que estaba bajo la mesa para hacer caer el celular.
—Funcionó —. Habló Theo. —Bien, ahora pide la orden.
Marcó tan despacio que el sonido de las teclas sacaba de quicio a Liam.
Luego de unos minutos alguien tocó la puerta, habían pedido que entrara a la casa y dejara la orden adentro, todo para no levantarse.
El chico que entró se quedó sorprendido al verlos ahí, en el suelo, dejó las cosas al lado de Theo y Liam con gran dificultad sacó dinero para pagarle.
—Theo, pásame la comida —. El cuerpo de Liam seguía cayendo. —Ten.
Ambos comían, ninguno decía ninguna palabra hasta que Liam cayó por completo suelo, haciendo un ruido gracioso.
Los dos rieron con papas en la boca hasta quedarse dormidos.