Asociación de crianza de cachorros

Capítulo 50: Ambos te amaron

Con las dos manos en el borde del pequeño estanque, la sirenita cuya cola azul hielo se balanceaba bajo la superficie, se incorporó y levantó la cabeza. Sus ojos azules estaban mirando a sus dos padres que estaban acurrucados el uno contra el otro.

La sirenita primero miró al hombre que estaba de pie a la izquierda, luego volvió los ojos al joven de la derecha. Luego finalmente agitó su aleta ligeramente.

Xie Luan originalmente tenía la intención de sostenerlo durante unos segundos y luego soltarlo. Pero la cola alrededor de su cintura y la respuesta del otro al devolverle el abrazo alargaron esos segundos.

En este tipo de situación, donde podría decirse que casi no había espacio entre ellos dos, la mejilla derecha de Xie Luan inevitablemente se frotó contra el cabello plateado del nox. Era muy fresco y suave al tacto.

Xie Luan también le tocó el cabello plateado con la mano, se podía ver que era de muy buena calidad.

Pasaron algunos segundos más, pero Xie Luan no sintió que nox tuviera la intención de dejarlo ir pronto.

A esta corta distancia, se había dado cuenta de que en su forma adulta, el nox era un poco más alto que él. En realidad, era casi media cabeza más alto.

Al descubrir que el cachorro sirena en la pequeña piscina los miraba directamente con sus ojos azules brillantes, Xie Luan extendió la mano y palmeó la cola plateada alrededor de su cintura. Luego dio un paso atrás una vez que aflojó ligeramente su agarre.

Cuando los cachorros sirena regresaban al agua, se hidrataban rápidamente.

Xie Luan se acercó con una silla y se sentó junto a la pequeña piscina. Observó al cachorro jugar en el agua durante unos diez minutos, luego sacó de la piscina.

Cuando ya estaban listos para irse, el nox de cabello plateado que estaba a su lado regresó a su forma de cachorro y saltó al regazo del joven.

Xie Luan ató la capa al cachorro y sostuvo a ambos cachorros en sus brazos.

Cuando se puso de pie, sintió un movimiento. Xie Luan miró hacia abajo justo a tiempo para ver al cachorro sirena que yacía a la izquierda extendiendo la mano y agarrando uno de los pequeños cuernos del cachorro nox sentado a su lado.

El nox movió levemente la cola, pero no lo esquivó, como si permitiera la acción del cachorro sirena.

Era un ambiente bastante agradable. Pero, ¿cómo es que sintió que la interacción entre los dos parecía haber cambiado un poco durante la noche...?

Era hora de volver a Gaia, pero antes de dejar el planeta tenía una última cosa que quería hacer.

No era algo que se le hubiera ocurrido en el último minuto. Xie Luan había pensado durante algún tiempo que, dado que iban a Hailumite, tal vez dejaría que el cachorro sirena conociera a sus difuntos padres biológicos.

La idea era llevar al cachorro al cementerio para visitar sus lápidas.

La madre y el padre del cachorro sirena se habían marchado muy temprano y Xie Luan no sabía qué actitud tenían los padres de la sirenita hacia el cachorro. Pero al menos ellos no habían abandonado al cachorro.

Como ciudad central de Hailumite, Sailou tenía el cementerio más grande y famoso de Hailumite. Todos los líderes de esta raza y muchos de los héroes descansaban en este cementerio.

Algunas familias de prestigio en la raza de la sirenas también optan por enterrar a sus familiares allí. Basado en esta información, Xie Luan llegó al cementerio con los dos cachorros en sus brazos.