Capítulo 56: General Zarad.

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La forma de pensar de Zarad no era arrogante. Las personas que recién se unían a la Star Alliance recibieron clases de ideología para profundizar su comprensión.

En este curso de ideología, los mayores que estaban a cargo de esta tarea también adularían... No, alabarían a aquellos que habían hecho grandes contribuciones a la Star Alliance.

Deseaba que no fuera uno de ellos.

Al menos que las nuevas personas no hubieran prestado atención en clase, era imposible no reconocerlo.

Al ver la expresión amarga que apareció en el rostro de Zarad después de escuchar sus palabras, Xiao Qi no pudo evitar soltar una carcajada y dijo—: No tengas miedo, la gente enviada por la Star Alliance no te comerá.

Su expresión no cambió. Todavía tratando de consolarlo, Xiao Qi le dio una palmada en el hombro mientras expresaba su sinceridad—: Aún no te he dicho qué día es, todavía tienes unos días para procesarlo y arreglarte.

—...

¿Estaba mal que un hombre tuviera un poco de vello en la cara? Zarad se tocó la barba que le cubría la barbilla y, pensativo, retorció un trozo entre los dedos. Se negó a admitir que la razón por la que no se había afeitado era porque era demasiado vago.

Al estar trabajando durante más de medio año en esta asociación, Zarad ha recibido durante este período los poderes espirituales de Xie Luan, por lo que ya ha recuperado la mitad de su fuerza.

Aunque ya casi se cumplía un año, Zarad estaba cada vez más convencido de que no había nada malo en la forma de vivir de esta asociación.

Era cierto que ahora estamos en una época de paz. No se habían producido guerras importantes en los últimos años, incluso las peleas eran relativamente raras. Se podría decir que la situación entre las diferentes razas es estable.

Además de eso, con la Star Alliance desempeñando bien su papel, Zarad creía que esta paz podría durar mucho tiempo y que todas las razas en el interestelar pueden dar la bienvenida a una era dorada llena de prosperidad.

Cómo la situación era muy tranquila, Zarad sintió que no necesitaba regresar a la Star Alliance.

Cuando tomó la iniciativa de retirarse del ejército, los altos mandos de la Star Alliance deseaban que se quedara y habían hecho todo lo posible para persuadirlo, no obstante, sus esfuerzos fueron en vano. Al final, le habían prometido que podría ser reintegrado en cualquier momento después de que recuperara su habilidad.

A los ojos de los superiores, incluso sin la habilidad de Zarad, su experiencia en batalla lo convertía en un activo y aún podría ser de gran utilidad si permanecía en la sede de la Star Alliance. Sin mencionar su importancia como guía espiritual.

Sin embargo, Zarad estaba muy deprimido cuando perdió su habilidad y no pudo superar ese obstáculo en su corazón. Estaba decidido a marcharse.

Después de dos años de depresión, Zarad todavía no había dejado de buscar formas de recuperar sus poderes. Y finalmente encontró la manera de recuperarlos. Unirse a Yunbao ha sido un gran punto de inflexión en su vida.

Apenas ha estado un poco más de medio año en Yunbao y su mentalidad ya había cambiado mucho. Volvía cada vez más su antiguo aire autoritario.

En Yunbao, actualmente pasaba sus días enseñándoles a los cachorros combate básico y su vida era muy despreocupada.

No tuvo que prestar atención a su imagen todo el día como lo hizo en el ejército. Podría ser él mismo, más o menos.

La expresión amarga que había aparecido sin saberlo en su propio rostro, inesperadamente, después de un momento, Zarad entendió claramente la razón detrás de ella.

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