Capítulo 5: Dedo dorado.

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Habiendo dominado el método de usar las botellas pequeñas y aprendido cómo mezclar las raciones. Xie Luan ahora estaba tratando de mejorar su habilidad para alimentar a los cachorros.

Sin embargo, todavía había algunos cachorros que no sabía de qué razas eran. Xie Luan de repente sintió que necesitaba una "Enciclopedia de crianza de cachorros" para complementar su falta de sentido común y comprender los hábitos de las diferentes razas.

El cachorro Takila, aún se encontraba acostado en la pierna de Xie Luan, parecía que estaba quedándose dormido; el balanceo de su cola se hacía cada vez más pequeño. Las piernas de Xie Luan comenzaron a entumecerse un poco, pero no levantó al cachorro.

Técnicamente, dormir también contaba como una actividad. Algunos cachorros jóvenes de algunas razas podían ser muy ruidosos, lo que provocaba que los cachorros sensibles al ruido, no pudieran dormir. Conseguir que se durmieran era algo que no todos los cuidadores podían hacer. Por lo tanto, en la clasificación de los cuidadores en la Star Alliance, se tomó en cuenta el sueño de los cachorros.

Xiao Qi nunca había visto a un cachorro Takila querer dormir después de tomar la leche y una vez más se quedó aturdida. Cuando regresó a sus sentidos, caminó hacia el joven humano que todavía estaba sentado con las piernas cruzadas.

Xiao Qi quería llevarse a este cachorro Takila que aparentemente estaba durmiendo de regreso a su nido, pero justo cuando se acercó y estiró su mano, el cachorro de repente abrió sus ojos y resopló en voz alta mientras golpeaba la gruesa y corta cola corta varias veces.

No quería ser retenido. Xiao Qi conocía la naturaleza distante de la raza Takila, por lo que retiró rápidamente su mano; cambió a una expresión algo indefensa en su cara. Pensó que el cachorro ya se había quedado dormido, por lo que quiso venir e intentar llevárselo de regreso a su nido.

Como todavía estaba despierto, no sabía cómo debía llevárselo...

—¿Es necesario llevarlo al dormitorio? —Xie Luan levantó y abrazó al cachorro. El cachorro Takila había abierto los ojos de repente. Al mismo tiempo Xie Luan se puso de pie rápidamente, después de estar sentado por mucho tiempo, tenía ganas de estirar sus piernas.

Xiao Qi había trabajado más duro que él. Por lo tanto, sintió que él debería ser el que llevará de regreso al cachorro al nido.

—... —Xiao Qi observó al cachorro Takila, quién estaba siendo sostenido obedientemente por el joven, sin pelear en absoluto. Finalmente asintió con un movimiento lento y rígido.

Primero diciendo que no es feliz cuando lo cargan, y luego diciendo que es bueno que lo carguen. Aunque sus pensamientos internos y sentimientos eran caóticos ahora mismo, Xiao Qi aún trato de mantener su imagen estable.

No tomó mucho tiempo cargar el cachorro Takila a su nido, y cuando regresó, Xie Luan vio que dos de sus compañeros parecían estar discutiendo unas cosas, y tan pronto como lo vieron, Zhao Chaun habló más alto.

—Hoy es mi turno, pero pienso que sería mejor dejar que el recién llegado conozca más sobre esto, para que cuando sea su turno esté más seguro.

El recién llegado era Xie Luan, como no había escuchado de que se trataba, le preguntó a Xiao Qi.

—Oh, no es nada, es solo cambiar el agua del cachorro sirena —negó Xiao Qi con su cabeza hacia el joven, ella ya sabía que Zhao Chuan era una persona floja y descuidada. Pero ahora que había venido un nuevo compañero, ¡quería deshacerse del trabajo que debería hacer!

Si no tuvieran escasez de personal y pudieran reclutar nuevas personas, Xiao Qi ya le habría dicho al presidente que debería despedirlo.

Los cachorros obviamente eran más cariñosos con su nuevo compañero, siendo quien estaba dispuesto a cuidarlos de verdad. Xiao Qi de repente infló su pecho; estaba lista para ayudar a Xie Luan hablando por él.

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