Capítulo 28: Un poco a la izquierda, un poco a la derecha.

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El pequeño cachorro Kuhti había estirado deliberadamente la espalda y levantó el pecho para que su padre pudiera ver la medalla de oro con más claridad. Pero aún le faltaban fuerzas y cuando el cachorro levantó el pecho, sus pequeñas alas estaban firmemente sostenidas detrás de él.

Este fue probablemente el último intento del cachorro. Si no recibía una buena respuesta esta vez, probablemente nunca más tendría el coraje de llamarlo como lo hizo ahora.

El coraje que había reunido con su nueva confianza era muy frágil, y solo a través de la verificación de su padre podría sobrevivir. Si su padre, por el contrario, permanecía frío y no lo elogiaba incluso después de su gran logro, su nueva confianza, junto con el coraje, se derrumbaría una vez más.

Antes de cambiar de asociación y conocer a Xie Luan, otro padre que lo cuidaba había tratado de explicar el comportamiento de su padre. Habían dicho que su forma de enseñar era excesivamente estricta. Carecía de elogios y ánimos, y habían dicho que no era normal, ni una buena forma de criar a un cachorro.

Los padres que eran estrictos siempre culpaban al cachorro por no hacerlo bien y, como tal, era natural que el cachorro se volviera tímido al enfrentarse a su padre.

Al ver que el hombre todavía tenía un rostro frío e inexpresivo a pesar de que el cachorro había tratado de reunir su valor y estaba extendiendo la mano, Xie Luan no pudo evitar sentirse preocupado.

Pero como no podía decir directamente: "Date prisa y felicítalo", solo pudo hacer todo lo posible por insinuarlo con sus ojos mientras continuaba observando en silencio desde un lado.

Y si Xie Luan estaba preocupado, la mujer Kuthi que estaba detrás del hombre estaba, por supuesto, muy ansiosa.

Claramente, el otro había estado de acuerdo hace un momento y lo prometió en el estudio. Pero ahora que el cachorro había tomado la iniciativa y estaba obviamente tratando de conectarse y ser elogiado, ¿cómo es que no salían palabras de su boca...?

Temiendo que el cachorro pronto retrocediera y las cosas volvieran a ser como antes, Fuya inmediatamente empujó con fuerza la espalda frente a ella.

El cachorro Kuhti ya había mostrado deliberadamente la pequeña medalla dorada en su cuerpo y cuando no obtuvo una respuesta durante mucho tiempo, sus alas comenzaron a moverse con inquietud. Los ojos originalmente brillantes comenzaron a perder su brillo gradualmente y la pequeña cabeza en alto comenzó a caer.

Pero en ese momento, el pequeño y esponjoso cachorro de repente sintió que le tocaban las plumas de la espalda.

"¿Tiuh?"

Al igual que cuando escuchó que obtuvo el primer lugar en la competencia, el pequeño cachorro gritó con incredulidad y levantó la cabeza para mirar a su padre de rostro frío.

Solo después de que la cálida palma le acarició la cabeza hasta las plumas de la espalda, el cachorro Kuhti reaccionó. Por lo tanto, cuando Tanner lo tocó por primera vez y miró al cachorro inmóvil en sus brazos, no pudo evitar sentir que se parecía a una bola de pelusa.

Así como el cuerpo de Tanner estaba rígido porque no estaba acostumbrado a sostener al cachorro, sus movimientos al acariciarlo también eran muy rígidos.

Sin embargo, como normalmente no era especialmente casual o relajado, afortunadamente estos rígidos intentos de acariciar al cachorro no parecían demasiado extraños.

Ahora que finalmente había logrado dar el primer paso, era hora de elogiar al cachorro por la medalla que le había mostrado anteriormente. Pero a pesar de que Tanner abrió y cerró la boca dos veces, no pudo pronunciar las palabras. Fue como si algo se le atascara en la garganta, impidiéndoselo.

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