Asociación de crianza de cachorros

Capítulo 101: palma

Muy raramente pasaba tanto tiempo en los brazos de alguien, pero el pequeño vic que había sido sostenido por un tiempo por Xie Luan comenzaba a acostumbrarse a esa sensación, su cuerpo se relajó un poco más.

Con el ajuste de Xie Luan, el cachorro vic se acomodó perfectamente en sus brazos.

Con los ojos sin brillo, el joven no soltó al vic cuando lo puso en el suelo, y el pequeño siguió acurrucado.

A la mayoría de los bebés les gusta que los adultos los carguen, y el acto de cargarlos en sí mismo tiene un toque de mimar al bebé, los bebés sensibles pueden sentirlo.

Para llevar al bebé adoptado de otra asociación a la suya, primero se necesitaría el consentimiento de la asociación. Cuando tuvo esta idea, Xie Luan comenzó a considerar cómo hablar con el presidente de Kalia.

Viendo que ya era hora de ir al comedor y comer con los demás, después de comer sería una oportunidad conveniente para hablar. Al pensar en esto, Xie Luan ya había decidido en su mente cómo proceder.

No podía llevar al bebé en sus brazos, Xie Luan dio unos pasos hacia un lugar sin obstáculos, se agachó y colocó suavemente al tranquilo bebé vic en el suelo.

Aunque era más cálido y duraba más que otros abrazos, este abrazo también tenía un límite de tiempo.

Cuando el joven dejó al bebé en el suelo, el vic primero instintivamente levantó su pata delantera izquierda hacia el joven, pero rápidamente la retiró.

Xie Luan, por supuesto, notó este movimiento del cachorro vic. Extendió la mano y acarició suavemente la espalda del bebé, y con un tono de voz suave dijo—: Volveré en un momento, Ain, tienes que tener más cuidado al caminar solo, no te lastimes.

Al escuchar su nombre y la palabra "volver", la cola de peluche de Ain, que colgaba en silencio, se movió ligeramente.

Después de un momento de pausa, el pequeño vic volvió a extender la pata delantera que acababa de retirar y se acercó un paso más hacia Xie Luan.

Lo olfateó.

Sin saber cuál era el significado de oler repetidamente en la cultura de los vic, Xie Luan bajó la mirada y vio al pequeño vic oliendo suavemente su palma extendida. La acción del pequeño vic de oler su mano le recordó mucho a un cachorro recién nacido, Xie Luan se contuvo a sí mismo para no tomar al pequeño vic de inmediato.

Esperó pacientemente a que el pequeño terminara de oler antes de ponerse de pie.

Desde que el joven se levantó, el pequeño vic que había sido dejado por él no se movió hacia otro lugar, su cuerpo estaba orientado hacia dónde se escuchaban los pasos del joven, y sus ojos estaban abiertos, mirando hacia esta dirección.

Permaneció en su lugar, esperando.

Xie Luan había venido en representación de la asociación Yunbao para entablar una relación amistosa, por lo que naturalmente surgieron situaciones como ser invitado a comer juntos.

El presidente de Kalia era una persona bastante directa y desenfadada, por lo que las formalidades durante esta comunicación fueron mínimas, lo cual también era justo lo que Xie Luan quería.

A pesar de llevar consigo el asunto de Ain en su mente, Xie Luan aún así intercambió experiencias sobre la construcción de la asociación con el presidente y varios miembros de alto rango de la asociación Kalia durante la cena.

Después de la comida, Xie Luan encontró el momento adecuado para plantearle al presidente lo que tenía en mente.

—¿Quieres que ese pequeño vic sea transferido a tu asociación? —Sorprendido por la solicitud repentina del joven, el presidente de Kalia, Barry, no pudo ocultar su sorpresa en su expresión.