Capítulo 2

69 27 74
                                        

~Editado~

Me termino de poner el uniforme y observo mi reflejo en el espejo.

Veo a una chica bajita, pelo castaño y ondulado, ojos color avellana, cejas finas, labios carnosos y bien rosados.

Sigo mirando más abajo, y me fijo en mi cuerpo.

Soy delgada, pero con mis curvas en las partes correctas.

Muchas chicas de mi antiguo instituto envidiaban mi cuerpo, porque mientras ellas no desarrollaban todavía, ya yo tenía un bonito cuerpo.

Y a mí me encantaba tener ese cuerpo, aunque después lo comencé a odiar; todo gracias a Yanet.

Termino mi escrutinio y voy hacia la cocina.

—Hola, hija—saluda papá.

—Hola, papá.
—¿Cómo amaneciste? —pregunta.

—Bien, ¿y tú? —y sé que le sorprendió que le preguntara.

—Igual mi niña. Ven a desayunar, para después llevarte al instituto—indica y tomo asiento a su lado.

Desayunamos unas tostadas y un vaso de leche y nos dirigimos hacia el auto.

Entramos y ya no volvemos a hablar más.
***
—¡Holaaa! —grita April en mi oído, y me sobresalta.

—Hola —la saludo con desgana.

—Qué cara chica, parece que tienes 90 años.
Ay amiga, si tú supieras...pienso para mis adentros.

Ahora estamos en la clase de historia; la más aburrida de todas.

—Hoy nos vamos para mi casa cuando termine la escuela— anuncia April y me giro hacia ella con el ceño fruncido.

—¿Pero tú estás loca? —inquiero—. Tu ni me conoces, ¿y si soy una asesina en serie? —. pregunto ganándome una carcajada de su parte.

—Alex tu sí que eres graciosa cuando quieres—declara riéndose.

—No me da gracia April, yo no soy muy amigable, no me gusta estar mucho tiempo con otras personas, y ni hablo contigo ...

—Ustedes señoritas del fondo —nos señala el profesor—. ¿Quieren contarle a la clase que es tan gracioso? —pregunta, y quiero mandarlo la mierda, pero me contengo.

—No nos reímos —decimos las dos al unísono.

Seremos mentirosas...

—Me voy a ser el tonto esta vez, pero si las vuelvo a ver sin atender a la clase, voy a echarlas—advierte, y retoma la clase.

Después de unos segundos April me dice:

—Me caes bien Alex, no eres igual que todos estos chicos, y quiero ser tu amiga.

La observo, sonríe y con eso se abre una confianza entre nosotras; no se... difícil de explicar.

—Bueno,chicos en estos últimos momentos de la clase...

—¡Buenas!—exclama un chico interrumpiendo al profesor Collins, y cuando me fijo es el mismo que me cayó encima.

—Clase —nos llama el maestro—Que asista a la clase el señor Brown es un milagro —dice.

El imbécil se ríe y dice:

—Gracias por llamarme milagro señor Collins.

Aghh,que idiota

—Déjese de payasada Joshua—le dice—. Lo que iba a decir ante de la interrupción, es que voy a realizar un intercambio de puestos, y voy mandar un trabajo, que tendrán que realizarlo con su compañero de asiento—anuncia.

SerendipiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora