The Old Toons 2️⃣

Cansado #2

Espero que les guste~

Lentamente, Felix recobro la conciencia y no pudo evitar gruñir ligeramente, estaba más adolorido de lo que recordaba y a pesar de haber dormido quien sabe cuanto tiempo, aún se sentía agotado. Se sentó con una mueca, bostezando ampliamente. Se sentía algo acalorado y su garganta estaba adolorida. Tosió y abrió los ojos. Pudo ver una puerta abierta, dejando ver lo que estaba bastante seguro que era el baño.

-Baño...- tanteo a su lado aun medio dormido, agarrando su bolso al poder sentirlo y buscando en su interior su cepillo de dientes, encontrandolo rápidamente. Se levantó con con algo de esfuerzo y tropezó hacia el baño para sentirse un poco mejor. Con los dientes cepillados, la cara lavada y la vejiga vacía, tropezó hacia la cama y se recostó nuevamente, esos movimientos lo había agotado. Se mantuvo así por unos minutos, hasta que algo pareció hacer "click" en su cerebro. Se sentí de golpe y miro a su alrededor, sin reconocer en absoluto el cuarto en el que estaba. -Ho cielos...- intento recordar. En un momento estaba viendo una bonita escena de reencuentro y al otro, nada. En blanco. No había nada más que oscuridad. Estaba por levantarse para averiguar en dónde estaba pero la puerta se abrió, haciendo que levante la cabeza al instante. -¡¿S-Senor O-Oswald?!- antes de poder ponerse nervioso y decir alguna tontería, empezó a toser con fuerza. Se tapo la boca con las manos y se inclino un poco, luchando para dejar de toser.

-Tranquilo, ya pasará- Oswald se acercó, palmeando la espalda ajena. Mantuvo su mano ahí hasta que la tos se detuvo, agarrando un baso con agua que estaba en la mesa al lado de la cama y dandole el baso al felino, quien tomó el contenido con una mueca. -Hey...- el conejo se sentó en la cama y sonrió, luciendo aliviado.

-Ho-Hola...- hizo una mueca, la garganta le dolía más y su voz sonaba ronca. -¿C-Como...?-

-Te desmayaste...- agarro el vaso vacío y lo volvió a poner en la mesita. -...y como no sabía si tenías a alguien aquí o no para que te cuidara, te traje- sonrió.

-L-Lamento las molestias- murmuró, avergonzado.

-No te preocupes, no fue una molestia- se encogió de hombros. Felix movió las orejas al escuchar ruidos venir de afuera de la habitación y miró con curiosidad al conejo, quien río ligeramente. -Mi hijos están planeando muchas cosas para hacer cuando estés mejor-

-Ho...- parpadeo un par de veces. - Son muy dulces~- sonrió con cariño al imaginarlo.

-Si, lo son- se quedó en silencio por unos minutos, solo interrumpido por la tos del gato. Oswald le golpeó ligeramente la espalda, mirando con preocupación. Esa tos sonaba horrible. -No sabes cuidarte a ti mismo ¿o si?- murmuró cuando se detuvo. Se levantó para acomodar las almohadas de tal manera que el felino pudiera permanecer en una posición medio sentado, volviendo a sentarse.

-M-Mi expedición duro más de lo esperado...- suspiro de alivio, así estaba más cómodo. -...y no tuve mucho t-tiempo para nada- tosió un poco.

-Esa no es una excusa- frunció el ceño, algo molesto. Felix le agradaba mucho más de lo esperado y no le gustaba en lo más mínimo imaginarse al gato cansado y enfermo solo en algún lado, sin que nadie lo vigilará o cuidara. -Deberías cuidarte mejor- Felix solo tarareo ligeramente, relajándose en su lugar y luciendo como si se estuviera por dormir en cualquier segundo. Oswald suspiro y se levanto, inclinándose para apoyar su mano en la frente ajena y fruncir el ceño. Aún tenía fiebre.

-¿S-Señor Oswald?- parpadeo, adormilado.

-Shhh, tranquilo- sonrió ligeramente. -Descansa, estas a salvo aquí- no supo que fue lo que lo provocó pero el gato se veía muy lindo para resistirse, así que se inclino para depositar un suave beso en la frente del gato. Estaba bastante seguro de que si Felix estuviera totalmente bien, estaría do roja do y tartamudeando pero ahora, enfermo y agotado, simplemente sonrió adormilado. El gato suspiro y cerró los ojos, durmiendo. Oswald sonrío, agarro el baso y salió de la habitación, cerrando la puerta tras él. Volvería más tarde.