Jugando a quererte {EDITANDO}

42: Por ti...

42

POR TI... 

Me estaba dirigiendo hacia la salida del colegio cuando alguien me detuvo. Volteé sin interés y fruncí el ceño al encontrarme con un rostro completamente desconocido.

—Hola —dijo el chico de hermosos ojos color avellana.

—Hola.. —contesté indecisa.

—Hace un tiempo que no te veo —comentó con intriga.

—¿Te conozco? —pregunté sin rodeos.

—Soy Cameron —rió— ¿No me recuerdas?

Al escuchar su nombre fue como si mi cerebro hubiera dado un click. Me encontraba frente al chico que besé la semana pasada en mi fiesta, el atractivo de Cameron.

—Oh, cierto... Sí te recuerdo —respondí avergonzada.

—Sobre nuestro beso... —dijo antes de que lo interrumpiera.

—Quiero dejarte algo en claro, que nos hayamos besado no significa que ahora seamos pareja o siquiera amigos —comenté. Caitlin la perra ha vuelto señores y señoras.

Rió suavemente.

—Eso ya lo sé. Lo que quería decirte es que no lo menciones a nadie, fue un error, me dejé llevar por el momento —susurró con un tono de diversión.

<<Tonta>>

—Oh, emm... bueno —sonreí con incomodidad.

<<No todos los hombres mueren por ti>>

—Gracias —soltó una risita— Nos vemos.

Me sentía completamente humillada. Nunca me había ocurrido algo parecido a esto. ¿Un hombre quería que me olvidara de nuestro beso? Normalmente soy yo quien les obliga a olvidar... ¿Está mi reputación tan mala?

Salí del colegio con una gran sonrisa en los labios. Cameron me había dejado sin palabras, y eso me alegraba. Finalmente algo desafiante. Algo que me hiciera olvidar de Ethan.

Empecé a caminar dirigiéndome a mi casa cuando el grito de varias voces conocidas me alarmó. Volteé y me encontré con las paraguayas corriendo hacia mí.

—¡CAITLIN! —dijo Camila entre jadeos.

—NO TE MUEVAS —agregó Luján.

Me quede observando como se acercaban. Mierda. ¿Cuál será mi excusa por haberlas ignorado durante todo el día?

—Hola —dije cuando ya me habían alcanzado.

—¿Todo bien? —preguntó Belén con curiosidad- Nos estuviste evitando todo el día...

Me rasqué el cuello con incomodidad. ¿Y ahora qué?

—Escuchamos lo de Ethan... —comentó Camila intentando ver alguna reacción de mi parte. Mantuve mi rostro serio, no demostraría debilidad, Ethan no ganaría.

—¿Ethan? ¿Qué pasa con él? —fingí confusión.

—Oh, nada, no importa —dijo Luján con una sonrisa. Cayeron.

—Hay una fiesta esta noche en la casa de Laura —comentó Belén cambiando de tema.

—Ahh —susurré sin interés.

—Deberíamos ir juntas —agregó con emoción.

—Hmm, ¿Fiesta? Nah, no es lo mío —respondí.