33
Día Uno 20 de Diciembre
-¡¿Qué?!
Me levanto y me dirijo hacía la puerta. El hombre que me había acompañado hacía la habitación yacía allí con una sonrisa nerviosa.
-¿Qué sucede? –pregunte mirando hacía ambos hombres-
-Este tipo asegura conocerte y estaba buscándote –lo apunta con su dedo mientras sus palabras salen apretadas entre sus dientes-
-Si, nos conocemos –respondo con suavidad y cuando él está por explotar, coloco mi mano en su pecho intentando calmarlo- Este hombre, me ayudo a cargar mi bolso
-Te eh dio que me lo tenías que dar a mi ¿Por qué se lo has dado a este tipo? –su ceño se profundiza y yo le sonrío-
-Y yo se lo eh negado pero él, tomo mi bolso sin permiso –finalizo
Niall cierra sus ojos levemente y suspira. El chico se encontraba demasiado nervioso e incómodo en la puerta de la habitación.
-Tuve que haber hecho lo mismo –lo encara- Lamento informarte que esta chica –ladeó su cabeza hacía mi dirección sin quitarle de vista al moreno- No está disponible para nadie.
-¿Quién te crees? –preguntó el frunciéndole el ceño -¿Eres su novio o qué?
-Que tenga un buen día –bufa el rubio a mi lado y cierra la puerta en su cara. Aseguré la misma con la pequeña llave y volví mi vista hacía el.
-No permitas que arruine tu humor.
-No lo hará
-No quiero una pelea contigo –mi voz sale por lo bajo mientras lo miro por encima de mis pestañas y Niall me alza las cejas al oírme como si eso lo hubiera tomado por la guardia baja y lo haya sorprendido aún más de lo que debería-
-No creo que consigas pelear conmigo, puedo ser más pacífico de lo que crees.
-¿Por qué en las entrevistas eres otro a cómo eres conmigo? –de pronto cruzo por mi cabeza y lo escupí sin haberme dado cuenta de ello-
-¿Lo soy?
-A veces, si –murmuré incapaz de saber si él podría enojarse por ello
-¿Te molesta como soy? –sus ojos azules buscan con más atención los míos
-No, amo tu forma de ser. De mal o buen humor, agresivo o no-mi sonrisa aparece recordándome a mí misma negándome rotundamente a imaginármelo a él golpeando a una persona- Yo te sigo amando
Niall me sonríe y toma mis manos de las cuales estaban a cada lado de mi cuerpo. Entrelazó sus dedos con los míos y se inclinó para besarme con suavidad en mis labios. El tacto fue casi mágico y lo fue no solo por su suavidad o por su calidez si no por el simple hecho en el que él, hace magia en mi cuerpo con cada toque. Me acaricio mis mejillas y luego corrió mechones de mi cabello a los costados de mi rostro. Mi cuerpo se relaja al instante y siento que podría dormirme con ese simple toque. Su mirada cálida, sus actos, su piel y a cada toque podría pensar que son dignos de un ángel. Él es un ángel.
-¿Quieres ver una película? –pregunta y yo le sonrío somnolienta
-Sí.
-Hagamos palomitas
-Bien
Y las hicimos en el microondas ya que Niall sabía que aceptaría ver una película con él y él mismo había comprado unos de los tantos en regreso a la casa un paquete de Pop-Korn e inmediatamente, recuerdo la última vez que comí de estas. Ese día se podría grabar en mis memorias por una eternidad.
Nos sentamos en el sillón y yo reposé mi cabeza en su pecho cuando entre tantos programas que hemos buscado, encontramos una película. Una de mis películas favoritas: “Diario de una pasión”
Niall la miraba con atención mientras comíamos palomitas. Estaban buenas, a mí me gustaban y aparentemente a él también ya que no deja de pelearme cada vez que tomo un puñado del que justamente quería tomar el. Nuestras manos al juntarse en el pote, mis uñas se calaban en su piel pellizcándolo y el ríe mientras maldice mi nombre. Salgo victoriosa comiendo ese puñado y él apoya su mano en mi cintura creando así un espacio íntimo para ambos.
-¿Siempre acabas llorando? –pregunta con una sonrisa una vez que termina la película
-No, no lloro en todas las películas –doy vuelta mis ojos y el tira de mi muñeca para que le preste atención-
-¿Acaso no eres la rebelde que maldice, insulta a cada rato? ¿Qué pasó con la fanática de una de las bandas más revoltosas de los tiempos y que pasó con la chica que usa negro más veces de las que pude verla con colores claros? –Le fruncí el ceño y me siento haciéndole frente mientras que Niall me mira con una sonrisa satisfactoria al ganarse mi enojo-
-Está frente tuyo –le arqueo una ceja- Y cree en mí cuando digo que soy mucho más admiradora suya –hablo de los chicos, no solo de él- que de Guns N’ Roses y tú tampoco era todo lo que siempre pensé
-¿A no?
-No
-¿Y en qué modo pensabas en mí?
-Pensé en ti como un chico sensible, tranquilo y totalmente romántico. Creí que podrías hasta empalagarme contigo –bromeo y su sonrisa crece aún más-
-Lo soy pero no demasiado como tú crees. Y si tú quieres que te empalague lo haré –su mirada oscura dice otra cosa o tal vez soy yo misma con mi mente retorcida y sucia a cada cosa que me dicen ya que siempre tomo las palabras por otro rumbo-
-Tal vez –mis dientes aparecen al contagiarme de su sonrisa-
-Quiero verte más seguido así –me guía a sentarme sobre él y me encuentro frente a su rostro. Su mirada suave pero preocupada recorre mi rostro y sus caricias logran suavizar todos los recuerdos de esta tarde en un borrón- Me gustas aún más cuando sonríes-mis ojos se abren y capto sus ojos arrugados en una sonrisa-
Es tan risueño… Y creo que yo en parte lo soy aún más a su lado.
-Entonces mantente cerca –le respondo y coloco mi frente en el hueco de su cuello mientras el acaricia mi espalda, mi mente da pequeños borrones e incapaz de decir y pensar algo solo me dejo acariciar por él.
ESTÁS LEYENDO
Una estrella inalcanzable
Ficção AdolescenteUna realidad in-realista. Un sueño en el que no quiero despertar. Mi pies flotan y mi pecho esta a punto de estallar cuando él a mi lado está. Apariencias que atrapan y engañan. Sentimientos que se confunden y luego se alinean con el tiempo. Aveces...