El yokai del caos

Capítulo 2

Había querido creer que al despertarme todo lo que ocurrió hace unos días no sería más que una simple pesadilla, que cuando abriera los ojos me encontraría con mi padre y madre, que me estarían esperando en la mesa con la comida lista, pero ese había sido el sueño, sentí mi espalda bastante adolorida por haber estado durmiendo en el sofá, no es como si pudiera quejarme, las condiciones en las que me encontraba no eran las mejores, haber caído en el inframundo y por casualidad encontrar una casa podía llamarse suerte, el hecho es, que no vivo solo, me quedó claro luego de volver a sentir las presencias de la tía Kurone y de Kuroka.

Solo me levanté del sofá en silencio, sentía que mi estómago se encontraba pidiendo comida, no sabía de donde la tía Kurone había sacado comida, no había, simplemente entre en la cocina, estaba hecha un desastre como el resto de la casa, pero eso no importaba, abrí con cuidado las alacenas, no quería romper más las ya dañadas puertas, lo único que encontré fue polvo, solté un suspiro comprendiendo mejor la situación en la que me encontraba, en verdad no podía ser peor.

Para este punto ya no sabía que hacer, no me veía a mí mismo siendo capaz de robar, mucho menos de ser capaz de escapar luego de hacerlo, al contario de ellos, no puedo volar, si hay alguien de buen nivel terminaría entrando en combate y si eso ocurría terminaría siendo capturado, puede que antes hubiera sido capaz de pelear con ese demonio, pero solo tuve y él estaba sorprendido, no es como si de verdad pudiera ganarle a uno con ese poder, tuve suerte, mucha, también la ayuda de la tía Kurone.

Volví al sofá, donde me senté para pensar que debía hacer, ninguna de las dos se había movido, por lo que intuí que seguían durmiendo, ni siquiera entendía porque me había levantado temprano, aun así, seguí pensando en una solución para el problema actual, la respuesta fue el chakra, con el chakra se puede hacer cualquier cosa, desde sanar heridas hasta ser una gran fuerza destructiva, entonces, no debe ser imposible crear algo ¿verdad?

Termine deprimido al no saber como comenzar a crear comida, apenas fui capaz de darle forma a una esfera de chakra, no supe que paso dar, no tenía ni idea de como seguir, así que decidí salir de la casa, guarde mis colas y orejas, coloque una simple capucha sobre mí, cubriendo tanto como fuera posible mi rostro, tome una respiración profunda para luego salir corriendo tan rápido como mi cuerpo me lo permitió, iba a romper una regla de papá, jamás robar.

Él, Naruto, era bastante silencioso y rápido, más de lo que cualquiera a nuestra edad seria, pero de la misma manera, yo no era alguien que solo se quedará mirando como en esa primera ocasión con aquel demonio, no soy hábil como mi madre, ni fuerte como el primer juubi que conocí, sin embargo, no voy a dejar que haga esto solo, después de todo, no es el único en esta situación, tampoco puedo dejar que ella se esfuerce, estar embarazada con el riesgo que le conlleva y hacer que se mueva no es una buena idea.

-No se pongan en peligro – mi madre dijo deteniéndome antes de salir por la puerta.

-Si te preocupas puedes enfermarte mamá, no es lo mejor para Shirone y para ti – dije sin voltear a mirarla – íbamos a tener que hacer esto tarde o temprano, Naruto solo se adelantó.

Hice un ligero con mi mano para después salir, no me gustaba hablarle así, pero con lo amable que es seguro revela su condición como nekoshou con tal de unirse a un demonio que aceptara mantenernos bien a los tres, en poco tiempo cuatro, era esa la principal razón por la cual tenía que hacer las cosas por mi cuenta, nuestra vida no había sido sencilla, no teníamos lujos, aun así teníamos lo necesario, era tranquila hasta que ese demonio apareció, si Naruto no hubiera aparecido no sé qué habría sucedido, así que, por el hecho de ayudarnos, tengo que devolverle el favor.

-Tch ¿por qué eres tan rápido?

No entendía porque Kuroka se encontraba siguiéndome, pero estaba claro que no podía dejarla sola, así que me detuve en un callejón, observando como los demonios pasaban sin notar mi presencia, solo mire como cada uno de ellos parecían llevar una vida feliz, eso fue algo que en realidad me enojo, se creen con el derecho para hacer que otros seres para aumentar sus números solo porque muchos de ellos murieron durante esa guerra, no solo eran ellos, los ángeles caídos son una plaga, algo no va como quieren y matan a gente inocente, los ángeles tampoco se salvan, en lugar de hablar con sus supuestos hermanos los dejan vagar haciendo lo que quieran.