Bijuu, juubi, cosas demasiado complicadas de explicar, seres que nacieron del chakra mismo, jinchuriki, sacrificios, personas utilizadas para sellar a los bijuu, los diez que existieron y de los que se tenía registro en otro mundo, termine recordando todo esto por lo que me encuentro haciendo en este momento, destruir y modificar un enorme sello que abarca una ciudad en su plenitud, lo estoy haciendo sonar como algo imposible cuando es algo que puedo hacer sin más, no me puse a estudiar magia y fuinjutsu por nada, a pesar de que en realidad detesto estudiar.
El motivo por el que termine pensando en cosas de mi anterior vida fue porque la ciudad me recordó a los propios jinchuriki, encerrados dentro de un sello donde pueden ser protegidos de otros, a la vez que apartados y vistos como herramientas o comida, por eso extenderé el sello a todo el mundo y cualquier dimensión unida a esta, así podrán estar protegidos en cualquier lugar, en cualquier momento, además de que les regalare poder, les otorgaré una fuerza superior que les permitirá enfrentarse incluso a los más fuertes siempre que su propósito sea sobrevivir, proteger o simplemente seguir vivos, libres, no quiero que nadie vuelva a por lo mismo.
-Naruto – una meditativo Kurama llamo, haciendo que viera a los dragones que se encontraban rodeando la ciudad.
-Sigue expandiendo el sello a todos los lugares donde estén tus clones, nosotros nos haremos cargo de ellos.
Dejando un clon que seguiría aplicando los efectos que había decidido colocar desde el principio, deje el altar que mi chakra había creado al comenzar el proceso, me apiade de esos dragones producidos en masa, me apiade de los vampiros que fueron utilizados como verdaderos sacrificios, no se trataba de decenas ni cientos de ellos, el número escalaba a los miles, no necesite mirar a los demás para dar a entender el mensaje, "no los maten, solo noquéenlos", eso fue lo que les pedí, eso fue lo que decidieron hacer.
En cuestión de unos segundos, en cuestión de un par de parpadeos todos los dragones se encontraban en el suelo, con un clon mío delante de sus cabezas, la mano derecha puesta sobre el lugar que se suponía era su frente, se suponía que efectos como este, que son provocados por el Sephiroth Graal no son reversibles y que la única manera de salvar a los sacrificios era matándolos, bueno, me había hartado de que solo existieran tragedias a causa de idiotas que no hacen más que buscar poder.
-Junsuina rinne tensei – dije pasando el poder a través de mis clones.
Había descubierto que las técnicas del rinnegan podían ser modificadas, mejoradas, amplificadas, por ejemplo, una técnica como el rinne tensei que consume la vida de su usuario lo pude modificar al Junsuina, a cambio de una porción de mi poder, uso de la energía natural y la magia que se encuentra en el aire, luego estaba un pequeño proceso de regresión temporal, controlar el tiempo es un problema, pero si se hace solo con el tiempo de un ser es más sencillo.
-Naru – Kuroka dijo después de aparecer a mi lado – todos esos vampiros ¿podrán volver a sus vidas?
-Sí, me asegurare de que puedan volver a ellas, no sin antes asegurarme de destruir el Sephiroth Graal, los tres que existen.
-Pero ¿no terminarías matando a la portadora de ese sacred gear?
-No la mataré, este sistema creado por el dios bíblico es uno que puedo deshacer fácilmente, ya estoy cansado de todas estas idioteces.
-Pareces enojado con el dios bíblico – parece estar divirtiéndose.
-No consideró que haya hecho algo bueno por los seres de este mundo, más allá de eso parece simplemente querer imponerse sobre los demás seres, imponer su religión sobre todos por cualquier medio.
Partículas de luz dorada aparecieron delante de mí, una mano se formó a partir de esa luz y casi de inmediato una cachetada fue dirigida hacía mí, una de mis colas sujeto el brazo de la ángel que se paraba delante de mí con ojos llorosos, no me importó lo más mínimo que estuviera enojada conmigo, de hecho, tuve que detener a los demás, sobre todo a Kuroka, la cual tenía la punta de su guadaña cerca del cuello de Gabriel, no estaba concentrado en algo más que en las alas blancas, de reojo mire a Noir, tengo que salvar a su hermano Gyo, separación de almas ¿eso es posible? ¿puedo crearlo? ¿podré separar a Gyo de Satanael?

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El yokai del caos
Fiksi PenggemarLe arrebataron su familia, el odio nació dentro de su corazón, conoció las injusticias de los demonios y la irresponsabilidad de los ángeles, él nació como un mitad humano mitad yokai cuya vida debió ser normal, ahora, luego de años y unos acontecim...