Boku no hero academia. Mini Historias Lemon

Bakugo Katsuki. Parte 2

Logré sobrevivir a las clases de la mañana, tendré al menos una hora para prepararme para la tarde. A pesar de que mi madre es japonesa y me enseñó el idioma desde pequeña, aún estaba acostumbrada a las clases en ingles, por lo que había algunas palabras que no lograba entender del todo. Suspiré algo frustrada mientras guardaba las cosas en mi mochila, tratando de recordar como se llegaba al comedor.

- Maldita sea ¿por qué no hay un solo idioma en el mundo? y ¿donde coño queda el comedor? - Me quejé en voz baja perdida en mis pensamientos, y no me percaté de la presencia detrás de mi que me veía confundido.

- ¿Necesitas ayuda con algo? - Preguntó una voz a mi espalda haciéndome sobresaltar a la vez que me giraba, encontrándome con el chico de cabello verde y gracioso que se sienta a mi lado.- Perdón si te asusté, es que estabas murmurando algo y tenías el ceño fruncido.- Dijo algo tímido y con un leve sonrojo en sus mejillas. Que tierno.

- Ehm, estaba tratando de recordar las indicaciones para llegar a la cafetería... ¡Espera! ¿estaba murmurando algo? ¿lo dije en inglés?.- Pregunté avergonzada. Él solo se rió un poco y asintió.

- Lo siento.- Respondí.-... aún no me acostumbro al japones.- Le dije con media sonrisa.

- No no, no te preocupes, no hay problema. Por cierto mi nombre es Midoriya Izuku, pero puedes llamarme Deku.- Me tendió la mano con una sonrisa. Se la devolví mientras estrechaba su mano en un saludo.

- Es un placer Deku.- Correspondía con una sonrisa. Que chico más amable.

- Oi, ¡Midoriya! ¿Vienes a comer con nosotros?.- Preguntó un chico de lentes desde la puerta del salón. A su lado había una chica de cabello castaño y corto, se veía muy tierna también.

- ¡Si! Oh Akira-san ¿quieres comer con nosotros?.- Preguntó Deku. Asentí fugazmente y lo seguí hasta encontrarnos con sus amigos en la puerta y luego salir rumbo a la cafetería.

No hacía falta decir que estaba muerta de hambre por no haber desayunado, así que tomé la manzana que había guardado en la mañana y empecé a comerla hasta llegar al comedor.

- Un gusto, Akira-san.- Saludó con una sonrisa el chico de lentes algo alto, haciéndome sobresaltar. Malditos nervios.

- Nos presento, mi nombre es Iida Tenya y ella es Uraraka Ochaco, es un placer conocerte.- Era realmente amable y educado, casi tan militar como yo en mis tiempos en la escuela en Londres. Al menos no me sentiré tan sola en esta modernidad.

Les devolví el saludo a los dos con una gran sonrisa y empezamos a hablar los cuatro de cosas triviales hasta llegar a nuestro destino.

Una vez todos sentados y con nuestras bandejas con el almuerzo, empezamos a comer. Demonios, no sé si esto está delicioso o es el hambre pero estaba devorando la comida. Uraraka y Deku me veían algo divertidos mientras Iida me veía algo preocupado.

- Come más despacio Akira-san, te vas a ahogar.- Me reprendió Iida, y como si el destino me jugara una mala, empecé a toser. Me di unos golpes en el pecho para que pasara la comida y luego de un trago de agua todo volvió a la normalidad. Vi a los chicos algo apenada.

- Lo siento, soy muy desastrosa al comer.- Dije con una sonrisa para tranquilizarlos. Volvimos a comer pero esta vez fui más despacio, como una persona normal.

Luego del almuerzo y después de una hora y media de clase de literatura, me encontraba en el vestidor de las chicas, cambiándoms el uniforme pues era tiempo del entrenamiento físico.

Aún no tenía un traje de héroe ni un nombre, esto no era algo requerido desde el primer año en Londres ya que eran asignados en la graduación, ambas cosas. Menudo sistema de educación todo raro.