Instinto

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𝔸𝕔𝕝𝕒𝕣𝕒𝕔𝕚𝕠𝕟𝕖𝕤: Los personajes utilizados no son de mi autoría son del maravilloso Gosho Aoyama.

𝔸𝕕𝕧𝕖𝕣𝕥𝕖𝕟𝕔𝕚𝕒𝕤: Au, drama, romance, más drama, muerte, misterio, algo de fantasía y posibles spoiler de la serie.

Instinto: Impulso natural, interior e irracional que provoca una acción o un sentimiento sin que se tenga conciencia de la razón a la que obedece

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Instinto: Impulso natural, interior e irracional que provoca una acción o un sentimiento sin que se tenga conciencia de la razón a la que obedece.

𝙳𝚘𝚖𝚒𝚗𝚐𝚘 𝟷𝟻 𝚍𝚎 𝚊𝚋𝚛𝚒𝚕

El primer instinto ante lo desconocido para los animales como los seres humanos es el mismo, huir lo más lejos del peligro. El primer instinto para Kaito al ver los ojos de Shinichi teñirse de un color carmesí, al igual que el de todo ser vivo en una situación de peligro, fue huir lo más lejos posible del detective.

Pero él no era del tipo de personas de que huía, él se quedaba y daba la cara. Así que ignorando ese sentimiento de peligro que sentía dentro de él e ignorando por completo la mirada carmín que le calaba hasta lo más profundo de su alma, decidió seguir su papel de la castaña rojiza que había decidido interpretar.

— ¿Por qué me llamas Kid? Si soy Ai —contestó el mago tras ver como el otro chico le pedía la joya.

— ¿Entonces por qué no me dices tu nombre real Ai Haibara?

Mierda. Pensó el mago sacando a flote una sonrisa llena de confianza y de optimismo, su cara de póker.

—Entrégame la joya Kaito

— Primero detective, no soy Kaito, yo soy el extraordinario Kaitou Kid —explicó sacándose el traje de Haibara y luciendo su traje blanco— segundo, señor detective, solo si me alcanza.

El detective se acercó y el mago retrocedió un par de pasos. Shinichi frunció el ceño y se lanzó en contra del ladrón mientras que el daba una vuelta hacia un lado esquivándolo, el castaño frunció aún más el ceño a lo que el mago simplemente sonrió otro más.

El mago sacó la joya que el detective pedía y se la mostró como si se estuviese burlando de él, el aprendiz de Holmes nuevamente fue hacía él y el mago se lo quitó de encima girándose hacía un lado. Pero entre vuelta y vuelta, Shinichi alcanzó la mano del ladrón y el forcejeo se transformaba en un balanceo, el par de aretes llevado de lado a lado de forma rítmica y coordinada, llevados ambos por una melodía sorda, tocada por una banda invisible, su entorno desaparecía bajo un fondo negro dejándolos solamente a ellos y sus pasos, que marcaban coordinadamente el ritmo que sus cuerpos seguían de forma improvisada pero natural, como un baile de salón que de tanto practicar simplemente aflora ante la música correcta.

El mago acercó su rostro al del detective, esperando ponerlo nervioso para que este soltara del agarre la joya, sabiendo que esa táctica era un tanto peligrosa. Shinichi al verlo tan cerca se puso colorado, soltó del agarre la mano del ladrón y quedó completamente estático, había sentido como la tibia respiración del mago chocaba con su mejilla cosa que lo sacó de sus cabales por unos segundos, rompiendo todo el ambiente que antes se había creado.

Bendecido por la muerte [Kaishin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora