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Los días siguientes tenía la misma rutina, por la mañana me despertaba temprano para hacer mi desayuno y alguna colación para compartirla con Jotaro. Después de la ducha, me cambiaba, salía de mi casa y caminaba con él rumbo a la escuela, en los recesos Jotaro seguía dándome el desayuno que la señora Holy hacía para mi, pero ya no se giraba a dormir ahora yo sacaba lo que cocinaba por mi cuenta y le ofrecía un poco, al final terminábamos comiendo los dos juntos. Comenzamos a tener platicas sobre temas vanos, descubrimos que un gusto compartido eran las luchas de sumo y me pregunto si iría con él a las siguientes pero yo no le pude asegurar nada. 

Por las tardes regresaba solo a mi casa y me dedicaba a estudiar los temas que no entendía o que no había visto y en los que mi clase iba más adelantados, comía lo primero que se me ocurriera hacer con lo que tenía en el refrigerador. Después limpiaba el poco desorden que generaba y con el ultimo destello del sol salía a correr por las calles cercanas a mi casa.
En varias ocasiones encontraba a Jotaro de regreso con bolsas de compra en sus manos y un cigarro sin encender en sus labios, regresabamos juntos a casa y al llegar nos despediamos con un simple "nos vemos mañana".

Hoy se cumplían tres semanas de mi entrada al nuevo instituto, conocí a mi asesor era un adulto de hombros anchos con su cabello largo y con trenzas que sobresalían de su cabeza, usaba un pantalón café, una camisa blanca y un tipo de capa naranja encima. Era un hombre serio y respetuoso nunca preguntaba más de lo necesario y siempre se preocupaba por nosotros, sus clases eran muy interesantes la clase de historia era la que única que esperaba con ansias el profesor era capaz de contarnos los hechos como si se tratasen de cuentos fantásticos.

En las demás materias trataba de poner atención pero aún seguía batallando con la visibilidad, los hombros de Jotaro en ocasiones no me dejaban ver, me movía tanto que más de una vez recibí una mirada de interrogación de su parte. Él seguía dibujando en su cuaderno peces y lo más recurrente eran los delfines, no tenía nada de talento para hacerlo estaban tan mal hechos que a veces sólo los distinguía por el triángulo sobresaliente de su espalda.

A mi me gustaba mucho dibujar, lo único de valor que traje conmigo de la mudanza fue mi cuaderno de hojas amarillentas y mis colores maltratados, pude comprar muchos otros pero no era capaz, ese cuaderno fue el único regalo que recibí de corazón por parte de mis padres, le tenía tanto aprecio que ocupaba hasta el último espacio de la hoja para así evitar gastarlo.

Los exámenes del segundo parcial se aproximaban, aún quedaba más de una semana de clases antes de la primera ronda de exámenes, serían tres exámenes por día, comenzaban con matemáticas, historia y orientación, de esas tres la que más se me complicaba era matemáticas y por lo mismo decidí empezar a estudiar en la biblioteca escolar durante los descansos.

Apenas sonaron el timbre para el receso tomé mi libreta y mi botella de agua, Jotaro se quedó con sus manos en la caja de bento y los palillos que siempre me daba.

—Kakyoin ¿Te sientes mal?.

—No, para nada pero de aquí a los exámenes voy a ir a estudiar a la biblioteca en esta hora. Necesito salir bien en los exámenes de este parcial.

—Pero necesitas comer primero.

Jotaro siempre era de pocas palabras y era tan directo que en ocasiones me incomodaba su manera nada sutil de hablar.

—Pero es que en verdad necesito ir a estudiar en la biblioteca, siento que no tengo las horas suficientes.

—Te acompaño.

—Pero, ¿Qué pasará con el séquito que esta afuera del salón?.

—Necesito estar en un lugar fuera de gritos y la biblioteca es la mejor opción.

Lo vi dejar la caja del almuerzo a lado de mi maletín y después tomar el mismo cuaderno de siempre, su lápiz sin goma y un sacapuntas con forma de estrella. Era algo lindo de ver.

Caminamos juntos rumbo a la biblioteca, las chicas al verlo salir del salón lo comenzaron a rodear, él solo me jalo del brazo para que yo fuera por delante de él. Cuando llegamos a la biblioteca entre primero a buscar una mesa, nunca había puesto atención al lugar. Era grande y lleno de estantes con libros,  las mesas estaban acomodadas por zonas, fui a la "zona de silencio" y caminé directo a la mesa que estaba a lado de la gran ventana. Después dejé de escuchar los gritos de las niñas y vi a Jotaro regresar y sentarse a mi costado.

—¿Que hiciste para que se callaran?.

—Les dije que me dejaran en paz y con eso bastó.

—No creo que solo les hayas dicho eso.

—Tienes razón, pero tampoco te dire que les dije así que vamos a estudiar que se nos acaba el tiempo.

Dejó la libreta y se fue directo a buscar un libro sobre biología marina y la evolución de las especies, yo por mi parte busqué uno de matemáticas avanzadas en donde te explicaban la resolución de los problemas paso por paso.

Después de unos 20 minutos en silencio y de lograr contestar un problema sin ayuda del libro vi a Jotaro nuevamente dibujando sus preciados peces, ahora tenía plasmado un pez betta con las mismas flechitas señalando las partes que lo componían "aleta pectoral" en una, "aleta caudal" en otra. Después checaba el libro y escribía "membrana ocular" cerca de donde imaginaba que estaba el ojo de su "pez". Me vio de reojo y levantó su rostro, después bajo su gorra, solo me era posible ver sus labios y lo escuche susurrar un "¿Qué?", su voz sonó aún más gruesa de lo normal.

—Estaba viendo tú dibujo. ¿Eso se supone que es un pez betta?.

—¿Como lo supiste?, estaba intentando darle forma a sus aletas.

—A ver prestame tu libreta un momento.

Jotaro soltó su libreta y me la dio, yo tomé el libro que estaba usando como referencia y comencé a dibujar el supuesto pez, empecé dibujando el cuerpo y después dándole forma a las aletas una por una, puse especial atención en la "aleta caudal" , trate de hacerlo lo más realista posible para que le fuera posible distinguir entre las diferentes partes y cuando termine se lo entregué, él me veía con una expresión que no pude descifrar. Tomó la libreta y delineó el trazo con sus dedos, después me dijo en un susurro aún más bajo que los anteriores

—Muchas gracias Nori.

Era la primera vez que alguien me decía Nori.

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Gracias por el apoyo que he recibido ❣💫

He decidido actualizar dos días por semana, esos días serían el lunes y jueves.
En verdad muchas gracias por leer esta historia fea y cliché cada visualización significa mucho para mi.
Los TQM 🍂❣

Feel The Same (JotaKak)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora