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Soobin vivía en un departamento pequeño, pero moderno. Era de mi gusto.

Me dijo que me sintiera cómodo.

Me senté en la pequeña mesa del comedor que se encontraba en la cocina y dejé mi mochila en el único sillón de la sala.

——Antes de trabajar ¿Quieres comer algo?

——Gracias. —— La verdad sí tenía mucha hambre.

——¿Qué quieres? ——preguntó mientras me daba la espalda para hacer algo en la mesa de la cocina

——Lo que sea ——Me encogí de hombros. Tenía tanta hambre que podría comer un hipopótamo si me lo ofrecieran.

——¿Qué te parece si hago sopa de frijoles negros? La verdad el almuerzo que nos dan no me llena.

Asentí, pero no me estaba viendo así que hice un sonidito de afirmación.

Sacó varias cosas del refrigerador y empezó a picar la cebolla china.

Me sorprendió que supiera cocinar pues no aparentaba ser uno de esos chicos.

——¿Y tus padres? ——pregunté aun mirando su espalda.

——Muertos.

No entiendo porque tuve la necesidad de matar el silencio cuando nunca me molestó. La cagué horriblemente y apreté mis labios con fuerzas para intentar no decir más nimiedades.

——Lo siento...

Soobin se giró y me sonrió ladino.

——No pasa nada ——me aseguró ——. Ya está bien ——dijo y yo asentí mortificado ——. ¿Te importaría ayudarme a cortar las zanahorias?

No sabía cocinar, ni pelar, ni picar. Todo inútil, asentí porque no quería quedar mal.

Soobin me alcanzó una tabla para picar y las zanahorias, después fue a poner un poco de música desde su reproductor.

Cuando escuché a Duran Duran, me giré gratamente sorprendido hacia él.

——¿Te gusta Duran Duran? ——pregunté con ligera emoción.

——¿Los conoces? ——Alzó las cejas ——. No creí que hubiera alguien más de la escuela que los conociera. No son muy populares en Corea.

——Me fascinan, en especial sus primeros discos.

——Son mis favoritos también. ——Me sonrió de tal forma que terminé contagiado por la sonrisa.

En ese momento no me importó, pero después me regañé mentalmente por sonreír así tan a la ligera.

No debía hacerlo. No quería ser débil y que otros se aprovecharan de eso como ese día.

Una sonrisa significa fácil acceso, blanco fácil. Y no.

Me distraje y cuando intenté volver a picar, me corté el dedo. Felizmente no muy profundo, pero ardía.

Solté un quejido que no fue ignorado por Soobin. Él se acercó preocupado y vio la sangre en mi índice, se retiró a quien sabe dónde, sin decir nada. Dos segundos después reapareció con un botiquín.

Él trató el corte con tanta eficacia que me sorprendió que mi dedo fuera lavado, desinfectado y vendado por manos ajenas en tan poco tiempo.

El vendaje ya estaba puesto, él estaba lavando la franela con la que frenó el flujo de sangre.

——Gracias. Pareces saber de estas cosas ——comenté de pie a sus espaldas.

——¿Lo crees? ——Cerró el caño y se giró hacia mí ligeramente emocionado ——. Quiero ser médico, me gusta informarme de estas cosas ——musitó algo tímido, lo que me pareció tierno de algún modo.

No me imaginaba a Soobin como médico. No sabía que decir, así que solo asentí con una pequeña sonrisa ladina.

——Mejor déjame terminar a mí ——dijo entre risitas.

——Lo siento, no soy bueno en la cocina ——confesé.

——Yo tampoco lo era, pero con mí tia Yona fuera del país todo el tiempo, tuve que aprender ——continuó con su tarea.

¿Vivía solo? ¿Con su tía?

Me nacía el querer saber todo lo posible de ese chico. Pero no pregunté por respeto y porque estaba un poco desconcertado conmigo mismo.

No era de mi interés. ¿Entonces por qué quería saber?

Desvíe esos pensamientos ridículos y le comenté que seguiría avanzando en el proyecto por mientras.

Con su permiso, le subí el volumen a la canción de Duran Duran "Ordinary World" y empezamos a cantar en un dueto no planificado.

El chico también cantaba bien.

Ser tan perfecto debía ser frustrante.

Mientras cantaba e intentaba concentrarme en el trabajo, no pude evitar sonreír preguntándome si él estaría haciendo lo mismo, recordando como se sintieron sus manos sobre las mías.



REESCRIBIENDO LAS ESTRELLAS [Soojun/Yeonbin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora