ʜᴀᴘᴘʏ ᴇɴᴅɪɴɢ - ɢʏᴜʜᴀᴏ & ᴊᴜɴʜᴀᴏ ˡᵒᵛᵉ ᵃˡᵃʳᵐ ᵃᵘ

Capítulo 37: De primeros amores

Los meses durante los que Junhui permaneció en coma habían sido dolorosos y llenos de incertidumbre.

Jun era el amor de su vida, Wonu no podía verlo de otra manera, y su mayor temor era que no volviera a despertar, sin duda el mundo se le hubiera venido abajo, más de lo que ya estaba.

Nunca tuvo claro qué era lo que le había pasado. A pesar de que le permitían pasar a verlo, los médicos no le daban mayor información, y prefería no insistir.

A veces le entristecía mirar hacia el televisor en la habitación del hospital y ver que transmitían la serie para la cual Junhui se había preparado con el papel protagónico siendo interpretado por otra persona en reemplazo.

Wonu lo amaba como jamás había amado a alguien, a pesar de que le rompiera el corazón saber que estaba con alguien más.

Junhui nunca le comentaba sobre su vida amorosa, simplemente lo sabía por la sonrisa que atravesaba su rostro cuando hablaba por teléfono o cuando revisaba sus mensajes.

El coreano no tenía intenciones de interferir en su relación, simplemente se conformaba con poder estar cerca de él, pero contradictoriamente admirándolo a la distancia.

Wonu no evitó derramar un par de lágrimas cuando se enteró de que Junhui había despertado. Sin embargo, cuando acudió al centro médico, no evitó sentirse ciertamente decepcionado.

El castaño se encontraba totalmente desorientado, y apenas podía hablar. Era como ver a otra persona.

Durante los primeros meses de rehabilitación apenas balbuceaba, y a ratos tenía momentos de lucidez. Pero había un nombre que murmuraba siempre en esos instantes, como si lo tuviera muy claro: Minghao.

Wonu suponía que se trataba de su novio.

El equipo médico pensaba que era un caso irreversible, que Junhui jamás sería el mismo, pero Wonu se negaba a creer algo así.

Luego de varias terapias, Junhui recuperó una parte considerable de su memoria y reconoció a Wonu, cuya reacción fue abalanzarse contra su cuerpo en un abrazo.

Junhui no evitó llorar esa vez, abrazándose con fuerza a Wonu.

Simplemente parecía un milagro, no había otra explicación, quizás Jun había sido demasiado afortunado. Los resultados de la rehabilitación habían sido mejor de lo que todo el mundo esperaba, y el alivio sin duda era grande para los Wen, quienes podrían fingir que nada pasó.

Cuando Junhui había vuelto a la normalidad, Wonu notó algo diferente comparado al Jun del pasado, y era que se había vuelto demasiado melancólico y su humor había cambiado desfavorablemente. Prácticamente se irritaba por lo más mínimo y parecía menos empático.

No estaba seguro si era alguna secuela, o por el hecho de que al parecer su novio nunca se puso en contacto con él.

Aún así, Wonu no dejaría de amarlo. Lo adoraba tal cual era.

El mejor momento para ambos sin duda fue cuando entraron a la universidad.

Junhui de pronto parecía volverse más cercano con Wonu de lo que ya era. A veces acariciaba su cabello y se despedía estrechándolo entre sus brazos con fuerza.

—¿No pensaste en bajar joalarm para confesarte?—sugería su compañero de cuarto.

—No, quiero decírselo con mis propias palabras, aunque me da vergüenza.

•••

Mingyu llegó temprano al aula de clases, apenas había amanecido y se sentía soñoliento. Apenas había podido dormir por estar pensando en su frágil situación con Minghao. Se preguntaba si era posible que el contrario no lo amara ni un poco, y aquello sólo le inquietaba. Realmente no estaba dispuesto a dejarlo.