Genesis

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Ella guió a su esposo al árbol de donde ella tomó una de las manzanas.

Su esposo fue el primero en darle una mordida confiando en su esposa, apenas tragar el primer trozo él sintió una presión en su pecho.

Ella veía como las venas de la cara de él se tomaban de un negro y violeta que quedaron más marcadas cuando él dejó de agonizar y retorcerse en el suelo lleno de pasto verde.

- Bien echo Lilith, ahora estaremos juntos sin que Adán nos moleste - habló una serpiente que estaba tomando la forma de un apuesto hombre para poder besar los rojos labios de ella.

Cuentos espantosos para adultos caprichososDonde viven las historias. Descúbrelo ahora